Caminar el rey de los ejercicios

CAMINAR: EL REY DE LOS EJERCICIOS

“El soberano vigorizador del cuerpo es el ejercicio,
y de todos los ejercicios, caminar es el mejor”,

Caminar 30 minutos al día reporta más beneficios de los que uno se podría imaginar, ya que además de ser una excelente herramienta para mantenerse en forma, es un aliado indispensable para mantener una buena salud cardiaca.

También contribuye al buen funcionamiento pulmonar, fortalece los huesos, ayuda a controlar ciertas enfermedades sistémicas, regula la presión arterial y evita el sobrepeso.

Pero eso no es todo. La caminata posee también otros atractivos: no es necesario pagar por realizarla, se puede hacer solo o acompañado, no tiene límite de edad, nos permite ir de un lado a otro y sólo requiere que tengamos ganas de iniciarla.

Sin embargo, para que esta actividad resulte placentera y agradable, es necesario tomar en cuenta algunas consideraciones:

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No salga a caminar a pleno sol. Prefiera las mañanas o las tardes

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Utilice ropa cómoda. Nunca salga a caminar con prendas ajustadas

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Nunca olvide ir con unos buenos zapatos, ojalá ligeros pero firmes

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Escoja una superficie plana, como las veredas o el interior de los centros comerciales

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Permanezca erguido y no se incline demasiado

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Beba agua antes, durante y después de la caminata

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Un paso vigoroso y rápido es bueno, pero también lo es si camina despacio

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Diviértase caminando: descubra nuevas rutas y lugares

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Si usted ya la ha incorporado como una práctica habitual en su vida, combine este excelente ejercicio con una rutina de precalentamiento:

Mueva la cabeza, alternando de derecha a izquierda

Suba y baje los hombros, y luego muévalos hacia adelante y hacia atrás

Eleve los brazos a la altura de la cara y luego regréselos a su posición original

Con las manos en la cintura, flexione el tronco hacia la derecha y vuélvalo a la posición central. Haga lo mismo con la izquierda.

Eleve ligeramente sus piernas, alternándolas de a una.

medicina solar de Jakob Lorber

Medicina Solar

»En los tiempos más antiguos, en los que el hombre ya habitaba esta tierra, éste utilizaba el sol cuando se sentía mal físicamente; es decir: su luz y su calor como único medio de curación para la recuperación de su salud. Colocaban a sus enfermos al sol, destapando aquellas partes del cuerpo en las cuales el enfermo sentía algún tipo de debilidad, malestar o dolor y en poco tiempo el enfermo notaba mejora.«

Jesús

¿Qué es la luz?

La luz es mitad material y espiritual. Al golpear una barra de hierro con una piedra obtendremos una chispa.
Porque el hierro tiene el bolsitas de aire entre sus átomos. El aire al ser presionado se enciende y esa vibración produce la luminosidad de la chispa. Los átomos del aire contienen en su interior seres que vamos a llamar aquí espíritus. Lo espiritual representa al polo positivo, lo material representa al polo negativo. Los polos no son como parte frontal y parte posterior, sino más bien lo interior y lo exterior.

El espíritu encarcelado en el átomos es la parte positiva, que siempre tiende a un estado de completa libertad.El espíritu está sólo tranquilo encarcelado en la materia o polo negativo, siempre y cuando no reciba ninguna presión. Pero si recibe alguna presión el espíritu despierta y notamos su presencia el brillo o chispa que este genera.

¿Qué es el brillo?

Ejemplo del hombre soberbio: Si un hombre soberbio recibe un fuerte golpe de alguien. Él comenzará a entrar en furia, comenzará a estremecerse y temblar de ira con todo su cuerpo, sus ojos arderán de cólera, como si tuvieran brasas detrás, sus cabellos se erizarán. Y si hay personas a su alrededor, estas también entrarán en un contagio de la ira de acuerdo al grado de amistad que exista. Muchos conocen el efecto de las arengas militares, donde el general lleno de ira contagia a sus soldados, para que vayan a la batalla sangrienta.

Lo mismo le pasa al espíritu (polo positivo) que es golpeado dentro de su envoltura material (polo negativo). Al despertar toman conciencia de su encarcelamiento.El espíritu intenta liberarse de la envoltura material pero la envoltura es indestructible. Al no poder liberarse vuelve a su estado anterior, para descansar y hacer un segundo intento. Los espíritus lo pueden repetir este proceso por varios millones en un segundo.

Los átomos vecinos perciben la vibración del átomo en movimiento y comienzan a vibrar igualmente. Esta vibración se transporta con gran facilidad, debido a que los átomos del aire y del éter están muy juntos unos con otros. Este vibrar lo perciben los ojos de los animales y especialmente lo de los hombre. Ya que los ojos también son mitad espiritual y mitad material, tienen la capacidad de filtrar la frecuencia que armonizan con las vibraciones de la luz y por resonancia captan polaridad positiva-negativa de la luz.

Por eso el Maestro Jesús dijo (Lucas 11) que los ojos son la lámpara del cuerpo. Si los ojos son claros habrá luz en el alma. La luz es entonces el contagio continuo de los átomos vecinos , cuyo transporte depende del grado de intensidad de vibración. Cuando mayor sea esta, mayor será la distancia del contagio y transporte.

Ahora que pasa cuando la luz alcanza un objeto y no puede continuar con su transporte, entonces el objeto refleja el luz y devuelve a los átomos contiguos su vibración, después de haber asimilado la parte que vibra con la superficie del objeto.

La Luz Solar

La luz del sol es la misma que la luz de la chispa del hierro. La diferencia sólo está en que la luz solar es luz blanca y proviene del la vibración del amor, mientras que la luz del fuego rojo proviene de la vibración de la ira.
Éter y la luz solar

Cuando más profundo el punto en la tierra, más denso es la materia. Cuando más próximo estén la líneas que se unen en un punto más cerca están entre ellas. Cuanto más se alejan las líneas que salen de un punto común, mas se separan estando más holgados entre sí. El aire, así como toda materia, es un conflicto material – espiritual y espiritual – material. Por eso cuando más profundo o más cercano al centro de la tierra está la materia más mala o nociva es. Pero cuando más elevada está, entonces es más amorosa, pacifica y estable. Como ejemplo tenemos la alta toxicidad de los metales pesados. Y la gran vitalidad que dan los átomos del aire.
Éter

Pero, ¿qué hay en el espacio entre los planetas y el sol? Existe el éter. El éter es tan fino que no puede ser observado con el microscopio. El éter empieza en nuestra tierra a partir de 15,000 kilómetros. El éter un una substancia espiritual que se comporta positivamente con respecto a los planeta, pero negativamente con respecto al sol. El éter lo componen espíritus muy sutiles que no ofrecen resistencia alguna a la materia.

Si no fuera así entonces habría mucha fricción en el recorrer de los planetas alrededor del sol. Sobre todo porque los planetas se mueven a grande velocidades. Como ejemplo tenemos la velocidad de la tierra que es de 108,000 kilómetros por hora. El sol es el emisor de la luz.
¿Qué es el sol?

Es un planeta en un estado de perfección. Los otros planetas son solo satélites del primero. La luz del sol se origina por la vibración de alegría espiritual de los espíritus que rodean este planeta. En el sol habitan seres espirituales de siete clases. Los menos evolucionados son expulsados hacia el exterior para su evolución, y cuando vuelvan ya evolucionados pasan a pertenecer al cuerpo del sol.
Los Fotones

Esos seres que son expulsados para su evolución. Pueden ser llamados animalitos atómicos. La ciencia actual le llama fotones. Es decir los fotones transportan la luz que emite el sol. Esta luz es la vibración de los espíritus evolucionados entregan a los fotones durante su viaje de evolución para su fortalecimiento. Pero. ¿qué es o que expulsa a los fotones a ir de viaje? La voluntad y el orden de Dios. Los fotones son por lo tanto negativos, pero llevan un carga positiva. (la vibración amorosa de los espíritus evolucionados).

Ya que dos polos positivos se repelen, los fotones se alejan del sol que es positivo. Y viajan por el espacio hasta llegar a algún planeta. Cuando llegan al planeta entregan su carga positiva a la materia receptora y entonces los fotones regresan al sol, debido que ellos son negativos y por lo tanto son atraídos por el polo positivo que es el sol.

Esta carga positiva no es más que la vibración de alegría amorosa de los espíritus evolucionados del sol. El reflejo de la luz solar no es más que el regreso de los fotones hacia al sol. Los fotones permanecen en el sol mientras sigan siendo negativos. Pero si ellos se alimentan demasiado de la luz positiva, entonces serán repelidos del sol hacia el exterior. La velocidad con que se mueven es realmente muy enorme. La ciencia nos habla de 300,000 kilómetros por segundo.

En el sol hay siete clases de espíritus, cada clase le entrega al fotón la vibración que le corresponde a ella. La luz blanca puede ser descompuesta en siete colores. Cada color tiene su propia vibración. Cuando un fotón choca con algún objeto material, entonces el objeto acepta y se alimenta de la vibración que armonizan con ella y devuelve al medio ambiente las vibraciones amorosas restantes.

Es por eso que el ojo percibe la vibración restante de la luz reflejada en el objeto. Por ejemplo si el objeto se ve de color verde, es por que su superficie ha asimilado todos los colores menos el verde que es expulsado de la superficie del objeto

Una dosis de medicina solar
Una medicina proveniente de Europa puede ser la alternativa para muchos males que aquejan a la civilización moderna. Medio siglo antes de que dos médicos, el británico Dr. Edward Bach (el de las flores de Bach) y el suizo Dr. Theodor Kocher, descubrieran la luz como fuerza curativa, el alemán Jakob Lorber (1800-1864) desarrolló la técnica del uso de la medicina solar.

por Luis Martínez Costa

Un joven ingeniero en su viaje de retorno a Europa experimenta las 9 horas más terribles de su vida. Un miedo inexplicable se apodera de su ser durante el vuelo. Siente una angustia mortal por no poder detener el vuelo y bajar. El ritmo de su corazón se acelera a valores extremadamente peligrosos. La azafata le pregunta si es claustrofobia lo que sufre, pero el pasajero no tiene cómo explicar su sufrimiento. Cuando llega a su destino decide no volver nunca más a volar. Los médicos, después de haber hecho todos los exámenes posibles, no encuentran ningún padecimiento corporal.

Su dolencia es conocida sólo por pocos especialistas, que la denominan “síndrome de ataques de pánico”. No hay médico que pueda ayudarlo. El miedo se presenta también en los viajes en automóvil. En su trabajo, le advierten sobre un posible despido. Como ingeniero de ventas, los viajes son imprescindibles para la empresa. Esto hace que se incremente su rara enfermedad. Después de varios meses de búsqueda, un amigo le menciona una medicina basada en la luz solar y decide aplicarla. En el lapso de un año, todos sus males desaparecen y vuelve a volar en avión como si nunca hubiese tenido miedo. Y como efecto secundario experimentó una reducción de los altos valores del degrado hepatocelulares a niveles normales, la alta presión desapareció y manifestó un rejuvenecimiento en su aspecto exterior.

Una alternativa

Esta medicina, también llamada “heliopatía”, no está aún muy difundida en el mundo, pero está siendo aplicada cada vez más por los europeos. Su preparación a gran escala está concentrada actualmente en España y Chipre.

La mayor virtud de la medicina solar radica en que los elementos necesarios para su elaboración son de fácil adquisición, su preparación es sencilla y económica y puede ser elaborada en algún lugar de la casa donde se tenga acceso a la luz solar.

El principio puede ser explicado de la siguiente manera: la luz de nuestro astro rey es la que mantiene y preserva la vida en nuestro planeta. Sin su acción la vida en la Tierra acabaría en un corto tiempo. Todos los elementos, que componen los tres reinos de la naturaleza, mineral, vegetal y animal, provienen del Sol.

No es casualidad que muchos médicos prescriban a sus pacientes baños de sol moderados.

La medicina solar busca capturar la energía curativa de los rayos solares en un medio. Estas pueden ser preparadas en base a la lactosa (azúcar de la leche), como los conocidos “glóbulos” en la homeopatía, o a cristales de sacarosa, por ejemplo la proveniente de la caña de azúcar. Acompañado de un importante régimen alimenticio y de vida, este remedio se vuelve un potente aliado para la recuperación de la salud. Incluso para las personas sanas sirve como un tonificador y rejuvenecedor.

¿Cómo funciona?

En principio, todas las enfermedades (salvo las causadas por traumatismo o defectos estructurales) pueden ser curadas mediante la heliopatía. La explicación sostiene que la esencia interna del hombre, que se conoce como “alma”, tiende a perder elementos vitales dependiendo de la actitud frente a las vicisitudes de la vida. Por ejemplo, cuando una persona se acostumbra a mentir o no cumplir sus promesas, se dice muchas veces que está “perdiendo” su credibilidad o dignidad.

El alma intenta compensar estos elementos faltantes extrayéndolos del sistema nervioso. Este a su vez, que actúa como una batería en descarga, intenta recuperar su fuerza accediendo a las sustancias vitales de la sangre. Al final, por el organismo circula una sangre desequilibrada, lo que tarde o temprano generará una enfermedad ya más visible para el paciente.

Si el origen de las enfermedades es siempre interno, el restablecimiento también tendrá que realizarse desde adentro hacia afuera. Cuando ingerimos las pastillas solares, nuestra alma toma de ellas solamente los elementos faltantes y recupera su equilibrio. El sistema nervioso a su vez ya no estará bajo de energía y el proceso patológico en la sangre se revierte.

El mismo principio se aplica en la homeopatía. La diferencia con esta radica en que los elementos faltantes tienen que ser determinados por un médico homeópata de mucha experiencia. Cada medicina en la homeopatía tiene un alcance limitado. Muchas veces el médico tiene que probar varias medicinas hasta dar con la adecuada. Esto no sucede en la medicina solar puesto que esta contiene todos los elementos necesarios en un solo medio.

Es conocido que la luz solar contiene una gama infinita de colores, que comúnmente se agrupan en siete rangos espectrales. Los siete colores del arco iris nos muestran mejor este hecho. En la fitoterapia vemos que cada planta tiene su correspondiente acción curativa. Y esto se debe a que las flores, hojas o tallos no tienen la capacidad de retener todos los colores. Una rosa roja absorbe todos los colores y expulsa el rojo. Una hoja verde, expulsa el color verde. Es conocido en la física que todo objeto refleja el color característico del mismo pero absorbe todos los demás.

En el curso medicina solar se entrega la técnica de retener los rayos curativos en recipientes de color violeta. El científico alemán Joachim Herbst escribe: “en sustancias pequeñas de azúcar lácteo cargada con la luz solar se observan millones de moléculas en estados energetizados. Estos estados son modificaciones geométricas que pueden ser modeladas como varitas y articulaciones de las combinaciones de átomos, incluyendo los grupos de átomos de oxígeno. Es decir que en diferentes partes de las moléculas se encuentra cargas de energía”.

Por ejemplo, en Inglaterra una compañía de bebidas introdujo en el mercado agua mineral envasada en botella de color violeta. En poco tiempo esta agua fue declarada como una de las mejores en el mundo, y su consumo sólo está al alcance de personas pudientes.

El efecto de la medicina solar representa el almacenaje de su acción curativa en moléculas modificadas en geometría atómica en sus diferentes puntos. Estas modificaciones son de larga duración (4 a 5 años). Según la teoría cuántica un átomo absorbe una determinada cantidad de energía luminosa llamada “quantum”. Los átomos de las moléculas del azúcar lácteo lo almacenan en forma de variación de los ángulos de la disposición geométrica de la sacarosa.

El color violeta

El físico de la Universidad de Oldenburg, Alemania, J. Herbst escribe: “Los otros rangos del espectro de la luz se convierten en color violeta a través de la fluorescencia y fosforescencia del violeta mismo. A través de la reflexión interna del recipiente, la luz es atrapada adicionalmente y su intensidad aumenta en general y equilibra la intensidad del color violeta del espectro solar. Esto se debe a que el color violeta, por ser de ondas más cortas, es la parte de la luz solar más débil. Con esto la luz violeta tiene la misma probabilidad de actuar en el medio”.

Desde la Antigüedad, en la fabricación del vidrio (3.500 a. C.) no se usaron recipientes de color marrón, verde o blanco para la conservación de las cremas, aceites, esencias y medicinas, sino exclusivamente receptáculos de oro o de color violeta. En 1992, después de 14 años de investigación práctica, se consiguió develar este misterio: “Ningún rango fuera del violeta permite conservar mejor la vida (energía)”.

Como fue predicho a través de J. Lorber, los medicamentos en estos recipiente pueden no solamente ser vivificados, sino también ennoblecidos adicionalmente. Esto ha sido confirmado en experimentos de los últimos años: por ejemplo, se ha podido conservar el agua potable en forma fresca almacenándola en botellas de color violeta oscuro durante 3 años, sin la necesidad de usar conservantes o técnicas auxiliares. Las medicinas heliopáticas, que fueron preparadas en 1933, no han perdido hasta ahora su fuerza curativa. *

Medicina solar

Medicina Solar – Receta
Extracto de la obra “La fuerza curativa de la luz solar”.
Introducción

Jesús, el autor de esta receta. «En los tiempos más antiguos, en los que el hombre ya habitaba esta tierra, éste utilizaba el sol cuando se sentía mal físicamente; es decir: su luz y su calor como único medio de curación para la recuperación de su salud. Colocaban a sus enfermos al sol, destapando aquellas partes del cuerpo en las cuales el enfermo sentía algún tipo de debilidad, malestar o dolor y en poco tiempo el enfermo notaba mejora.

Si el enfermo padecía del estómago, entonces, después de haber sido expuesta dicha parte al sol, tenía que beber agua pura de una fuente, que a la vez había estado expuesta al sol y pronto se empezaba a sentir mejor. De todas maneras los primeros habitantes de la tierra no bebían agua que no hubiera estado expuesta al sol durante un plazo de tiempo mínimo, de acuerdo a la posibilidad.

Fuentes profundas y cubiertas les eran desconocidas, y de un manantial donde la luz solar no tenía posibilidad de entrar, nadie bebía agua, pues también ellos sabían y también veían bien que en tal agua se encontraban seres, a veces incluso malignos. No tomaban de estas aguas hasta que estos seres eran ahuyentados por la luz solar.

Ved; en lo hasta ahora mencionado se encuentra una profunda verdad, pues la luz solar lleva, tal como os la podéis imaginar con facilidad, espíritus más puros. Estos espíritus tienen una gran familiaridad con las partes substanciales del alma del hombre. Si con la intervención de tales espíritus puros se le aporta un seguro reforzamiento al alma, entonces el alma, fortalecida, es capaz de combatir con facilidad y rapidez cualquier tipo de debilidad ocasionada, porque la salud del cuerpo depende única y exclusivamente de un alma suficientemente fuerte.

Siempre donde aparezca cualquier debilidad en el alma; es decir, en sus partes substanciales, y el alma misma no pueda, siguiendo un camino ordenado, procurarse una fortaleza en las partes debilitadas, se dirige entonces a su propio espíritu nervioso y extrae de éste lo que le falta a ella.

A cambio de esto se produce entonces en los nervios, como en unas pilas eléctricas descargadas, una carencia clara de aquel fluido vital, por medio del cual únicamente se puede conservar su tensión correcta.

Los nervios, debido a esto, hambrientos, succionan un alimento todavía poco puro de la sangre, y cuando esto sucede se produce de manera muy normal un proceso de vida contrario a la naturaleza de la carne. Como consecuencia de esto pueden surgir múltiples enfermedades según la parte del alma que se haya debilitado.

Pero como que en los espíritus (del sol) puros o evolucionados se encuentran todas aquellas sustancias del alma de las que consiste el alma misma, es fácil para ésa extraer de ellas aquello que desapareció y que era necesario para mantener su fortaleza.

De esta manera vuelve a reconstruirse el antiguo orden (en su espíritu nervioso) y se restablece en los nervios y en la sangre la tensión vital correcta y natural.

Precisamente por este motivo, y, además en numerosos sentidos la verdadera homeopatía es preferible a la alopatía. A través de la homeopatía se aporta lo espiritual al alma, aquello que le es familiar a ésta y el alma misma se convierte en el médico de su cuerpo, en caso de haber absorbido algo externo que la haya debilitado.

En la alopatía, en cambio, el cuerpo es obligado a volverse primero el médico de su alma. Así, únicamente en cuanto ésta se haya curado a través de un gran sufrimiento del cuerpo, podrá comenzar retrospectivamente con la recuperación del mismo, cosa que es, sin duda, el camino menos adecuado para la recuperación de la plena salud corporal. Es fácil, pues, ver lo larga y difícil que es la reconvalescencia del cuerpo y del alma.

Por lo tanto, según esto, la homeopatía es un correcto método de curación. Sin embargo, cabe mencionar y distinguir entre las dos homeopatías existentes:

Primeramente una especial (elaborada por Hahnemann), que evidentemente en cuanto a su éxito es insegura, pues un médico hábil no siempre es capaz de reconocer con certeza dónde y qué partes del alma están debilitadas. Debido a esto él no puede emplear y activar lo verdaderamente específico del alma. Un médico, reencarnado en el espíritu si puede hacerlo, pero para un médico que aún no se ha reencarnado del todo o, como suele ser en la mayoría de los casos, ni siquiera se ha vuelto a reencarnar, esto es, a pesar de su capacidad de comprensión, difícil o incluso imposible.

Por este motivo es preciso fijarse más en la homeopatía de la segunda clase a la que Yo denomino: homeopatía general para diferenciarla de la primera. Con ésta ningún médico, incluso uno de poca habilidad, puede fallar.

Precisamente este tipo de homeopatía trata de lo que YO os predije el 16 de julio de 1851 sobre la fuerza curativa de los rayos solares.

Como es de esperar os plantearé ahora la siguiente pregunta: ¿Cómo es posible tal cosa?

Un caso os lo he mencionado al principio. Este caso es, o mejor dicho, sería suficiente, si las personas actualmente tuvieran en cuenta la forma de vivir que antiguamente se desarrollaba.

Para la actual forma de vivir, en la que el alma más bien es privada que nutrida de algunas partes a causa de la alimentación artificial, siendo ésta además pésima, la utilización de la luz solar (como lo hacían antiguamente) sería demasiado pobre. Por este motivo quiero proclamaros varias clases, así como el régimen necesario correspondiente. Si éste, junto con la medicina mencionada de la luz solar, es tenido en cuenta correctamente, entonces podréis curaros, con toda seguridad, de cualquier enfermedad, sea cual sea.

Incluso daños externos del cuerpo pueden ser curados de esta forma con mayor rapidez, teniendo en cuenta el correcto uso de la medicina mencionada.

Lo relacionado con esto se explica a continuación.

Queremos hablar de las especiales formas en las que la materia-salud de la luz solar es unida con facilidad a cualquier sutil material y su empleo en casos de enfermedad corrientes. E1 hecho de que la materia de la luz solar se una con materias de todo tipo es accesible a todos. Tan sólo se ha de echar una mirada a una pradera.

Si la primera plantita es cogida, olfateada y comida, tanto el olor como el gusto dirán: «Provenimos de la luz y del calor del sol.»

En un vidrio, expuesto algún tiempo al sol, aparecerán diversos colores en su superficie exterior. ¿Por qué no pues en su superficie interior? Porque la interior no está expuesta al primer ataque de los rayos solares.

¡Colocad una planta con flor en un sótano oscuro! Aunque florezca la flor, o bien no tendrá ningún color o como máximo tan sólo se percibirá un débil colorido.

De esto se deduce, que también los colores de las flores y los de los frutos son obra de los activos espíritus de la luz del rayo solar.

En aquellos países, que vosotros denomináis los cálidos, el juego de colores es, tanto en las plantas como incluso en los animales, mucho más vivo y generoso, al contrario pues de las zonas templadas y sobretodo de las frías, en las que el tono general se acerca al gris. De un fuerte y agradable olor, no cabe ni hablar, y en cuanto al sabor, éste suele ser duro y ácido acercándose a la amargura de los espíritus desterrados en el interior de la tierra.

Alguien podría objetar en cuanto a esto: Si, según esto, todas las diferentes especies del mundo vegetal, animal y mineral-sobretodo en las zonas cálidas- poseen en sí tanta materia luminosa del sol, entonces ¿no sería preciso ningún tipo de procedimiento artificial para eliminar del sol, artificialmente, a través de este procedimiento, lo que sería posible conseguir de manera natural sin esfuerzo alguno?

Esta objeción es correcta y hasta ahora toda medicina se ha basado en esto.

Cualquiera que utilice algún tipo de hierbas medicinales notará con seguridad algún efecto: pero ninguna hierba está constituida de manera que pueda absorber la materia luminosa – salud del sol, así como así. Toda planta absorbe únicamente lo que a ella le corresponde y por lo tanto no es capaz de asimilar nada más que esto, pues -según su constitución- sólo retiene de la luz solar lo que le corresponde y conviene.

Si un médico, en un alma enferma, pudiera investigar con exactitud qué esencias vitales se han debilitado o incluso cuáles faltan y además conociera la hierbecita provista de estos elementos vitales, entonces podría devolver de esta manera, con toda seguridad, al alma enferma -o lo que es lo mismo- a una persona enferma, la plena salud.

Pero, puesto que un conocimiento tan profundo de la persona y su alma suele ser desconocido a un médico común, tal como si se tratara de una parte del mundo por descubrir, entonces su ámbito de curación sigue siendo más una adivinanza que un saber. Aquello que el hombre se ha apropiado a través de la experiencia y a través de pruebas, raras veces bonitas, al utilizar la fuerza curativa de las plantas, los minerales y los animales, lo emplea normalmente para curar los enfermos.

A la mayoría de los médicos podría aplicárseles el proverbio del norte en el que un médico así es comparado con una especie de porra. Si ésta acierta afortunadamente la enfermedad, entonces el paciente mejorará; sin embargo si le da al paciente en vez de dar a la enfermedad, entonces éste morirá!

Aquí no se trata de la practica de antiguas experiencias o de nuevos experimentos para la curación del hombre, sino de un arcano que, mientras lo permita la máquina del cuerpo, sea capaz de volver a revivir la humanidad enferma, de la misma manera que la luz de la primavera revive las plantas y animales, suponiendo que el organismo sea proclive a tal revivir. Cabe mencionar que una vida eterna del cuerpo, junto con su alma, y en ésta tierra, tal como lo sueñan algunos médicos, no existe.

Pero con la posibilidad del hombre de prorrogar su vida en relación con Mi orden establecido, éste puede llegar a una elevada edad con una salud muy buena si tiene en cuenta el régimen adecuado y además el correcto empleo del arcano.

Puesto que necesariamente hemos anticipado esto, y gracias a estas explicaciones, todos podemos comprender como las diferentes esencias de la vida de los rayos solares están conectadas con la naturaleza, ahora pasamos a la forma de tal mecanismo receptor de rayos solares.»

Régimen

«Regularidad en todo: alimentación (comida y bebida), reposo (dormir), aseo, baño y salidas.

Abstinencia de todos los alimentos ácidos y condimentados, sobretodo abstenerse de cerveza y café.

E1 café es lo peor que el hombre ha llegado a elegir del mundo vegetal. Este producto (fruto) tan sólo es para animales como caballos, asnos, camellos y animales por el estilo. E1 café anima a éstos, haciendo que se fortalezcan sus nervios. En las personas, en cambio, que lo saborean, el café tiene exactamente el efecto inverso. En ellas, éste estropea la sangre de manera increíble, excita los genitales y si no se produce inmediatamente una satisfacción, entonces se atrofian las partes sensitivas del cuerpo humano. Ya que esto perjudica al alma, es decir: el eliminar estas potencias del alma creadas para los animales, entonces ésta se cansa, se vuelve pesada, dejada, a veces oscura, malhumorada y triste. Yo os digo: el beber en una taza los excrementos de animales disueltos en un poco de azúcar sería mucho más sano que la sopa de fuego color marrón de este rudo alimento animal.

Tan solo os he mostrado la nocividad del café porque veo muy claro y sé de qué manera la humanidad -sobretodo la femenina- depende de este alimento para asnos; ¡para su naturaleza, sin embargo no hay nada tan nocivo como el saborear esta bebida! Y nada hace que el cuerpo se vuelva tan poco receptivo para una medicina curativa como el café, afectando éste sobretodo al cuerpo de la mujer. Por lo tanto, durante el padecimiento de una u otra enfermedad y sobretodo durante el tratamiento homeopático solar ha de ser evitado, pues sino la medicina no llega a actuar en absoluto.

Si alguien hubiera tomado veneno, siendo ya un bebedor de café exuberante, y volviera a tomar una fuerte dosis de café después del veneno entonces podría incluso matar con esto el efecto del veneno.

Si el café es capaz de tener un efecto tan fuerte como el veneno (tratándose de un veneno no demasiado intensivo), entonces con facilidad podría destruir el efecto suave y fino de los mencionados medicamentos homeopáticos solares.

Por lo tanto uno ha de evitar tal alimento que aún puede llegar a obstaculizar, más que el opio, el efecto de medicamentos nobles y puros.

Alimentos de harina fresca cocidos en caldo de carne pura y sana o bien en leche fresca y buena, no demasiado grasa, son, si no se abusa de ellos, preferibles a todos los demás alimentos. Se puede, sin embargo, saborear -a excepción de las judías y lentejas- otros alimentos. Sémola de maíz, arroz bien cocido y también sémola de mijo pueden ser saboreadas si han sido preparadas con el mencionado caldo y la leche.

Carne sana y bien conocida, tomada moderadamente, no es nocivo. Es recomendable comerla junto con fruta cocida: manzanas, peras y ciruelas. La carne se ha de saborear con moderación pues contiene esencias del alma de tipo rudo y subordinadas. Cuando son tomadas con frutas, sin embargo, estas esencias son suavizadas, llegando a ser estos menús los adecuados para los enfermos.

Los llamados «alimentos verdes» en cambio tendrían que suprimirse -por lo menos durante el período de tratamiento medicinal-pues las esencias alimentarias de las hierbas y raíces comestibles son aún menos adecuadas que las contenidas en la carne de los animales.

El segundo método, comentado con esto a vosotros, (la utilización del azúcar expuesto al sol) tiene el mismo efecto que el primero, siendo más fácil de llevar a cabo que éste (el primero) y partiendo del hecho que los pasos hayan sido seguidos correctamente confiando y teniendo plena fe en Mi. Unicamente precisa de más tiempo, si bien esto es un factor de poca importancia.

Quien quiera preparárselo según el primer método tendrá con seguridad éxito. Si la eficacia del primer método fuera difícil de conseguir debido al método en si, entonces Yo puede bendecir-en fe y creencia-el segundo método tanto como el primero. Sin Mi ayuda ningún medicamento tiene efecto, menos los nocivos para el cuerpo y como consecuencia para el alma.»

Receta para preparar Medicina Solar
Primer método para retener los rayos solares

«Tomad una taza de color violeta oscuro con un diámetro de 3 a 4 pulgadas (1 pulgada = 2,54 cm), cuyo borde tenga aproximadamente 1 pulgada y esté tallado de tal manera que sea muy fino y llano. Preparad una tapadera para este vaso (taza) con el fin de poder cerrarlo herméticamente .

En cuanto tengáis tal recipiente -siendo este tipo el más adecuado- coged las ya conocidas bolitas de azúcar lácteo* repartiéndolas en el fondo de la taza, sin que una cubra a la otra. Si exponéis a continuación esta taza con sus bolitas al sol -es decir a los rayos solares- entonces éstas absorberán el rayo solar junto con todos sus espíritus esenciales de la vida. Cuando se suministren una, dos o tres bolitas a un enfermo, tendiendo éste cualquier tipo de enfermedad y habiendo seguido un régimen adecuado, -siendo el mejor momento antes de la salida del sol- el enfermo mejorará a partir del tercer día. A1 llegar el séptimo día estará completamente curado, pues el alma tomará de éstas lo que precise. De esta manera eliminará lo no utilizable y comenzará a restablecerse en su cuerpo, con toda facilidad, la correcta fuerza vital.

* Bolitas de azúcar lácteo tal como son en la Homeopatía.

En verano, cuando el sol actúa con más fuerza, es suficiente exponer al sol dichas bolitas durante un ciclo lunar. No han de estar expuestas al sol durante todo el tiempo que éste se encuentre en el firmamento, sino tan sólo mientras el sol permanezca a 45 grados de altura. A menos de 45° (debido al grado de inclinación) la luz y su efecto se debilitan perdiendo prácticamente todo el efecto sobre la bolitas. Por esto es entonces cuándo han de ser tapadas cautelosamente con la tapadera, colocándolas en un lugar seco y fresco hasta el día siguiente.

Para el total almacenaje de las bolitas, nutridas ya por la luz solar, tenéis que encontrar una botella de vidria color violeta oscuro. Será necesario cerrarla herméticamente con un tapón del mismo vidrio.

Después de esto podrá ser bien asegurada, por ejemplo, con un cordel. Su colocación será en un lugar seco y fresco. En primavera y en otoño el tiempo a exponer las bolitas al sol será de tres meses. El procedimiento será el mismo. en invierno será imposible este preparado, porque los rayos solares incidirán con demasiada inclinación siendo así poco efectivos.

El régimen es el mismo, tal como lo utiliza cuidadosamente la homeopatía, pero con la diferencia de que se ha de empezar con el tratamiento con un mínimo de tres a siete idas antes, al contrario del procedimiento de la habitual homeopatía. Durante el tiempo del régimen el paciente puede beber durante el transcurso del día cuantas veces quiera agua, previamente expuesta al sol. Como recipiente para beber, preferible a cualquier otro un vaso de un color violeta más claro, o por lo menos un recipiente de porcelana lacado en este color.

Para que el agua sea muy eficiente también podéis utilizar un espejo ustorio* de más de 30 centímetros de diámetro y de máximo tres pies de distancia focal, y a través de éste transmitir el rayo solar potenciado, al agua -(en cuanto se manifieste en el foco)- de tal manera que caiga, según la altura del recipiente, una, dos y hasta tres pulgadas por debajo del nivel del agua; es decir más hacia el centro de la masa del agua.- Se ha de tener en cuenta que el foco no debe permanecer más de medio minuto en el agua porque sino los espíritus vitales refrescantes (del agua) serían absorbidos demasiado por los espíritus luminosos del sol. Esto tendría como consecuencia en cuanto al agua, que ésta – produjera un efecto demasiado fuerte en naturalezas más débiles, lo que sería más bien un obstáculo para la consiguiente cura general.

También un auténtico vino puro que no haya sido conservado en un tonel de roble, sino en mangueras o botellas de vidrio tal como se hacía antiguamente, o bien en un barril de madera dulce, y tratado tal como el agua es, en caso de personas débiles de los nervios, preferible al agua.

Después de la utilización de tales medicamentos, ha de ser tenido en cuenta el mismo régimen, según la estación del año, durante tres ciclos lunares y el paciente a menudo ha de salir al aire libre mientras brille el sol. De esta manera se encontrará completamente mejor.

Cabe destacar que las parejas prescindan del acto sexual durante el período de cura; pues la semilla de ambos sexos es una esencia vital muy importante y no debe ser eliminada del alma durante la reconstrucción del cuerpo.

Si una persona cuidadosamente curada vive de manera correcta y ordenada no volverá a enfermar con facilidad, pudiendo alcanzar una avanzada edad de vida.

Esta es una manera de utilizar la luz solar para la salud de las personas de forma un tanto artificial.»
Segundo método para retener los rayos solares

«Si la primera forma de retener los rayos solares os presentara alguna dificultad -cosa que podría suceder con facilidad- y esto os impidiera conseguir todo lo necesario para llevar a cabo el proceso, entonces podríais retener los rayos solares de otra manera, si bien siendo ésta parecida a la primera. Esta forma será igual de eficaz que la primera y servirá de ayuda al enfermo. Este método consiste en:

En vez de utilizar una taza de vidrio violeta podéis hacer servir una taza de arcilla cocida o completamente negra o bien y aún mejor, la taza lacada en azul marino. También puede utilizarse una bandeja colocando en ella en vez de las bolitas de azúcar otro tipo de azúcar* del tamaño de un guisante-troceado y procurando que un trocito no tape al otro.

* Lo más conveniente sería el azúcar cande o candi (azucar cristalizado) ganado de la caña de azúcar.

Exponed este azúcar siempre a la misma hora del día, tal como con la clase de azúcar anterior y durante un mínimo de dos meses. Durante la noche tapadlo bien, evitando así la entrada de aire, y guardadlo tan cuidadosamente como lo hicisteis con el anterior, en un recipiente oscuro: su utilización es la misma que en la forma de retener los rayos, anteriormente comentada, únicamente con la diferencia de que aquí la dosis ha de ser más fuerte que en la primera, puesto que las partes del azúcar que se encuentran en el recipiente de arcilla no reciben los rayos solares tan concentrados como en la primera solución. En enfermedades que precisan de una ayuda 0 calma rápidas se pueden suministrar al enfermo los medicamentos, según el primero o el segundo método. Sin embargo, si ha podido tenerse en cuenta-previamente-la ya mencionada pre-dieta con el saborear del «agua solar», entonces la curación será aún más segura y rápida, pues de esta manera se ahorrará un importante trabajo al alma.

Este azúcar, nutrido por los rayos solares, también podéis utilizarlo, siendo efectivo, de la siguiente manera:

Si el paciente ha bebido durante el día varios vasos de agua, expuesta al sol, se aconseja que se acueste en una cama. Después de varias horas sentirá, con toda seguridad, un sudor. Mientras el paciente se encuentre sudando tomad de uno a tres trocitos de azúcar «soleado» y empapad éstos en una de las gotas de sudor dándoselas al paciente con el fin de que éste se las tome. Después de efectuar esto el paciente sentirá un mareo y notará tanto en la cabeza como en el estómago una ligera presión, llegando además a sentir ligeros temblores en todo el cuerpo. A este temblor le seguirá una leve diarrea y con esto la curación del paciente.

Esta manifestación del efecto puede durar de tres a siete días, según la naturaleza del enfermo.

Después de la recuperación el paciente ha de seguir, sin embargo, el régimen durante varias semanas, bebiendo de vez en cuando un vaso de agua «soleada» y llegará a curarse. Independientemente del tipo de enfermedad, desde las raíces de la misma.

Cabe mencionar que en aquellas enfermedades que provienen normalmente de exuberancia de sangre es indispensable un régimen previo y estricto, tal como lo describe la homeopatía.»

El atrapa sueños

De: Alias de MSN-Satori–  (Mensaje original) Enviado: 31/10/2003 11:24
Hola a todos

Navegando encontré una historia sobre los atrapasueños, supongo que todos los conocen; acá en Colombia son muuuuy comunes, casi todo el mundo tiene uno sobre su cama, son super bonitos y lo que dice la gente es que sirven para no tener pesadillas sino puros sueños agradables. Les pego la historia que encontré, me pareció bien linda e interesante.

La Leyenda de los Cazadores de Sueños

            Los Cazadores de Sueños se conocían en el lenguaje Anishinabee como “Bawaadjigan” y eran primigeniamente de origen Ojibwe.

De acuerdo a la leyenda, los Cazadores de Sueños se colgaban originalmente sobre las cunas de los bebés.

Dado que los sueños son mensajes del mundo espiritual, los buenos sueños siendo inteligentes hallarán su camino a través del agujero central bajando por las plumas sagradas hasta el durmiente. 

Los malos sueños, al ser estúpidos, quedarán atrapados en la red y serían destruidos con las luces de la mañana. 

Se decía también que los atrapasueños favorecerían los buenos sueños, la buena fortuna y la armonía familiar.

Pero vayamos a la leyenda Lakota:

Hace mucho tiempo cuando el mundo era aún joven, un viejo líder espiritual Lakota estaba en una montaña alta y tuvo una visión. En esta visión Iktomi, el gran maestro bromista de la sabiduría se le aparecía en forma de una araña. Iktomi hablaba con él en un lenguaje secreto, que sólo los líderes espirituales de los Lakotas sabían entender. Mientras le hablaba, Iktomi -la araña- tomó un trozo de rama del sauce más viejo. Le dió forma redonda y con plumas, pelo de caballo, cuentas y adornos empezó a tejer una telaraña.

Hablaron de los círculos de la vida, de como empezamos la existencia como bebés y crecemos a la niñez y después a la edad adulta, para llegar finalmente a la vejez, cuando debemos volver a cuidar de los  bebés, completando así el circulo.

Pero Iktomi -dijo mientras continuaba tejiendo su red- “en todo momento de la vida hay muchas fuerzas, algunas buenas otras malas- Si te encuentras en las buenas ellas te guiarán en la dirección correcta. Pero si escuchas a las fuerzas malas, ellas te lastimarán y te guiarán en la dirección equivocada”. Y continuó: “Hay muchas fuerzas y diferentes direcciones y pueden interferir con la armonía de la naturaleza. También con el gran espíritu y sus maravillosas enseñanzas”.

Mientras la araña hablaba continuaba entretejiendo su telaraña, empezando de afuera y trabajando hacia el centro. Cuando Iktomi terminó de hablar, le dio al anciano Lakota la red y le dijo: “mira la telaraña es un circulo perfecto, pero en el centro hay un agujero, úsala para ayudarte a ti mismo y a tu gente, para alcanzar tus metas y hacer buen uso de las ideas de la gente, sus sueños y sus visiones. Si crees en el Gran Espíritu, la telaraña retendrá tus buenas ideas y las malas se irán por el agujero”.

El anciano Lakota, le pasó su visión a su gente y ahora los indios usan el atrapasueños como la red de su vida. Se cuelgan encima de las camas, en su casa para escudriñar sus sueños y visiones. Lo bueno de los sueños queda capturado en la telaraña de la vida y vive con ellos. Lo malo escapa a través del agujero del centro y no será nunca más parte de ellos.

Los Lakota creen que el atrapasueños sostiene el destino de su futuro.

las siete reglas de paracelso

Siete Reglas de Paracelso

1.- Lo primero es mejorar la salud.-
Para  ello  hay  que  respirar con la mayor frecuencia posible, honda y rítmica, llenando  bien  los  pulmones,  al  aire  libre  o  asomado a una ventana. Beber diariamente  en  pequeños  sorbos,  dos  litros  de  agua, comer muchas frutas, masticar  los  alimentos  del  modo más perfecto posible, evitar el  alcohol, el tabaco y las medicinas, a menos que estuvieras por alguna causa grave sometido a un  tratamiento.  Bañarte  diariamente,  es  un  habito  que  debes  a tu propia dignidad.

2.- Desterrar absolutamente de tu ánimo, por mas motivos que existan, toda idea de pesimismo, rencor, odio, tedio, tristeza, venganza y pobreza.
Huir  como  de  la  peste  de  toda  ocasión  de tratar a personas maldicientes, viciosas,  ruines,  murmuradoras,  indolentes, chismosas, vanidosas o vulgares e inferiores  por  natural  bajeza de entendimiento o por tópicos sensualistas que forman  la  base de sus discursos u ocupaciones. La observancia de esta regla es de  importancia  decisiva:  se  trata  de cambiar la espiritual contextura de tu alma.  Es  el  único  medio de cambiar tu destino, pues este depende de nuestros actos y pensamientos. El azar no existe.

3.- Haz todo el bien posible.
Auxilia a todo desgraciado siempre que puedas, pero jamás tengas debilidades por ninguna  persona.  Debes  cuidar  tus  propias  energías  y  huir  de  todo sentimentalismo.

4.- Hay que olvidar toda ofensa, mas aun: esfuérzate por pensar bien del mayor enemigo.
Tu  alma  es  un  templo  que no debe ser jamás profanado por el odio. Todos los grandes seres se han dejado guiar por esa suave voz interior, pero no te hablara así  de  pronto,  tienes que prepararte por un tiempo; destruir las superpuestas capas de viejos hábitos, pensamientos y errores que pesan sobre tu espíritu, que es divino y perfecto en si, pero impotente por lo imperfecto del vehículo que le ofreces hoy para manifestarse, la carne flaca.

5.- Debes recogerte todos los días en donde nadie pueda turbarte, siquiera por media hora, sentarte lo más cómodamente posible con los ojos medio entornados y no pensar en nada.
Esto  fortifica  enérgicamente  el cerebro y el Espíritu y te pondrá en contacto con  las  buenas  influencias. En este estado de recogimiento y silencio, suelen ocurrírsenos  a  veces  luminosas  ideas,  susceptibles  de  cambiar  toda  una existencia.  Con  el tiempo todos los problemas que se presentan serán resueltos victoriosamente  por  una  voz  interior  que  te  guiara  en tales instantes de silencio, a solas con tu conciencia. Ese es el daimon de que habla Sócrates.

6.- Debes guardar absoluto silencio de todos tus asuntos personales.
Abstenerse, como si hubieras hecho juramento solemne, de referir a los demás, aun de tus más íntimos todo cuanto pienses, oigas, sepas, aprendas, sospeches o descubras. por un largo tiempo al menos debes ser como casa tapiada o jardín sellado. Es regla de suma importancia.

7.- Jamás temas a los hombres ni te inspire sobresalto el DIA mañana.
Ten tu alma fuerte y limpia y todo te saldrá bien. Jamás te creas solo ni débil, porque  hay  detrás  de ti ejércitos poderosos, que no concibes ni en sueños. Si elevas  tu  espíritu  no  habrá  mal que pueda tocarte. El único enemigo a quien debes  temer  es  a  ti  mismo.  El miedo y desconfianza en el futuro son madres funestas  de  todos  los  fracasos,  atraen las malas influencias y con ellas el desastre.

Si  estudias  atentamente  a  las personas de buena suerte, veras que intuitivamente,  observan  gran parte de las reglas que anteceden. Muchas de las que  allegan gran riqueza, muy cierto es que no son del todo buenas personas, en el  sentido recto, pero poseen muchas virtudes que arriba se mencionan.

Por otra parte,  la  riqueza no es sinónimo de dicha; Puede ser uno de los factores que a ella  conduce, por el poder que nos da para ejercer grandes y nobles obras; pero la  dicha  más  duradera  solo  se  consigue por otros caminos; allí donde nunca impera  el  antiguo  Satán  de  la leyenda, cuyo verdadero nombre es el egoísmo.

Jamás  te quejes de nada, domina tus sentidos; huye tanto de la humildad como de la  vanidad .  La humildad te sustraerá fuerzas y la vanidad es tan nociva, que es como si dijéramos: pecado mortal contra el Espíritu Santo.

Paracelso.

Alquimia sufi

Alquimia Sufi

La transformación del ser humano es similar a la acción de hacer elementos de alfarería, y también a la alquimia. La palabra “alquimia” viene del vocablo Arábico, al-Kimia. Que acorde con algunas fuentes significa Transmutación, o en otras palabras, el arte de hacer oro.

Hay dos clases de oro. Uno es el oro que obtenemos del exterior.

Hace muchos años vivía en Sur África, me sentía bastante infeliz por esos días, mi relación sentimental se había roto al igual que mi corazón. No tenía ningún tipo de esperanza, así que decidí pasar unas vacaciones en las paradisíacas islas Mauritanas: palmeras, mar, sol; todo señalaba a un gran “olvido”, pero desafortunadamente, cuando llegué a ese paraíso descubrí que había llevado conmigo todo el “equipaje de penas”, nada había cambiado en mí, todo lo que había hecho era cambiar de decorado.

Aquellos que buscan la felicidad en fuentes externas nunca estarán satisfechos. El oro exterior no satisface. Hazrat Inayat Khan dice, “Nuestro espíritu es la parte real de nosotros; el cuerpo es solamente su vestido.” Y esto nos lleva al segundo tipo de oro, el oro interior que los alquimistas Orientales supieron como hacerlo para si mismos: una transformación del yo a un yo más grande: el Ser, hacer un corazón de oro. En “La Alquimia de la Felicidad”, Hazrat Inayat Khan escribe, “Hay una absoluta paz en la morada de donde el espíritu viene y la verdadera felicidad del alma reside en esa paz….” En orden para ganar esa paz tenemos que empezar con nosotros mismos.

Nosotros nos esforzamos y luchamos por nuestro pan de cada día y deseamos paz a nuestro alrededor; para lograr esto debemos primero lograr esa paz hacia nuestro interior antes que podamos hablar de paz en el mundo. “Yo tuve una tutora en la Universidad, una persona muy apasionada en su militancia a un movimiento llamado “Psicólogos por la Prevención de la Guerra”.

Una amiga quien conocía bien a nuestra tutora dijo que ella nunca estaría lista para prevenir una guerra hasta que no hallara la paz en su interior, que nuestra tutora era de las personas que empezaría una guerra para terminar otra guerra!. Tenemos que encontrar la paz interior primero. Como dice nuestro maestro, “Todos los pensamientos, palabras y acciones que alteren la paz podrían ser vistos como un “pecado”, y todos los pensamientos, palabras y acciones que creen paz podrían ser vistos como virtuosos”.

Hazrat Inayat Khan explica en términos simbólicos la practica de la alquimia. De acuerdo con su descripción, el sendero hacia el oro empieza con el mercurio. La naturaleza del mercurio es estar siempre en movimiento, pero por medio de cierto procedimiento el mercurio es aquietado, y una vez aquietado el se convierte en plata, algo más precioso que el mercurio, luego la plata tiene que ser fundida y el jugo de una hierba debe ser vertido a la plata fundida y derretida, la cual inmediatamente se convierte en oro.

En “La Alquimia de la Felicidad” se explica el proceso muy bien, y es muy valioso citarlo en toda su longitud:

“El mercurio representa la naturaleza de la mente que nunca descansa, que nunca se aquieta. Especialmente cuando alguien trata de concentrarse hace que la persona se de cuenta que la mente no descansa. La mente es como un caballo inquieto: cuando es montado es más inquieto que cuando está en el establo. Tal es la naturaleza de la mente humana: esta se vuelve más inquieta cuando uno decide controlarla, es como el mercurio, constantemente moviéndose”.

“Cuando por algún método de concentración uno logra dominar la mente, uno ha tomado el primer paso para el logro del trabajo sagrado. Cuando la mente está bajo un perfecto control y no está más inquieta, uno puede retener un pensamiento hacia el futuro por el tiempo que uno quiera. Este es el comienzo de un milagro, y el aprovecharse (hacer mal uso) de este privilegio significa que dicho poder empieza a perderse, en este momento la plata se destruye antes que esta se convierta en oro”.

“La plata debe ser calentada antes de que pueda ser derretida, y ¿con qué? Con el calor de la divina esencia presente en el corazón de los hombres, el cual se manifiesta como amor, tolerancia, simpatía, servicio, humildad y carencia de egoísmo”.

“Después de que el corazón ha sido calentado por la divina esencia, la cual es el amor, el siguiente paso es la adición de la hierba, que representa el amor de Dios. La abstracta parte teórica del amor de Dios no es suficiente; el conocimiento de Dios también es necesario”.

“Cuando el jugo de la hierba del divino amor es vertido en el corazón y es calentado por el amor de sus semejantes, entonces ese corazón se convierte en oro, es el corazón que expresa lo que Dios expresaría. El hombre no ha visto a Dios, pero el hombre ha visto entonces a Dios en el semejante, y cuando esto pasa, entonces verdaderamente todo lo que viene de los hombres viene de Dios mismo”.

Alquimistas

Todos los hombres, sean de la condición, raza, ó status que sean, llegan a preguntarse tarde o temprano ¿porqué? ¿qué  hago yo aquí? ¿el porqué de vivir?. Antes de hacerse estas preguntas, ha vivido según lo que le han ido marcando, siguiendo los impulsos de su naturaleza y acomodándose más o menos en lo posible al entorno que le rodea.

Pero hay un momento que esto no le basta, su intelecto o inteligencia no comprende toda la fenomenología que le rodea, y por otro lado ese intelecto, se niega a reconocer algo que esta por encima de el, y claro está, entre que no es capaz de descifrar y resolver los problemas que le aquejan y el no ir más allá de lo que cree estar convencido, se debate en un maremagnum de pensamientos, y lo único que consigue es vivir en una realidad ilusoria que lejos de resolver sus inquietudes, lo mantienen en un mar de dudas e incertidumbres.

  Pero tarde o temprano es seguro que algo dentro de el le obliga, le empuja a buscar respuestas a esas incógnitas que le aquejan. Unos se refugian en la religión, otros en cualquiera de los quehaceres de este mundo, dándole a su vida el sentido de los ideales aceptados. Pero hay algunos que no se conforman con esto, y como ven que lo que tienen fuera y a su alrededor no les convence, terminan por buscar las respuestas del mismo sitio de donde surgen las preguntas, esto es, dentro de si mismo.

  Cuando esto lo hace de forma consciente, deja de ser hombre para convertirse en mago, en alquimista de su propia esencia. El mago o alquimista vulgar, busca el transformar su entorno para su propio beneficio, y claro la piedra filosofal no le aparece por ningún lado, y sin dicha piedra de toque no puede convertir el plomo en oro, normalmente esta abocado al fracaso.

El verdadero Mago o Alquimista, lo que necesita para sus fines, lo busca dentro de el mismo, y al no ser ambicioso en sus pretensiones con poca cosa empieza a trabajar, consiguiendo sin embargo óptimos resultados.

  Empieza por conocerte a si mismo, y conociéndote sabras lo que quieres cambiar dentro de ti y como cambiarlo.

la alquimia suprema osho

LA ALQUIMIA SUPREMA

(fragmento del libro de Osho)

Osho, ayer noche explicaste la quietud interior desde la dimensión del silencio interior. Explica por favor la quietud interior desde alguna otra dimensión.

La quietud tiene muchas dimensiones…

    * Una es el silencio; es el extremo opuesto al sonido, es la ausencia de sonido.
    *
      La segunda dimensión es la ausencia de movimiento: es el extremo opuesto al movimiento.

La mente es movimiento del mismo modo que la mente es sonido. El sonido viaja y la mente también. La mente está en movimiento constante, nunca permanece quieta. No puedes imaginarte a una mente quieta. No existe una cosa así, porque cuando hay quietud, la mente deja de existir; cuando existe la mente, hay movimiento.

¿Cuál es pues el movimiento de la mente? Con él podemos concebir la segunda dimensión de la quietud: la ausencia de movimiento.

Exteriormente sabemos lo que el movimiento significa:  ir de un lugar a otro, de un sitio a otro.  De A a B. Si estás en A y te vas a  B,  ha tenido lugar un movimiento. Así, exteriormente a la mente, movimiento quiere decir cambiar de lugar en el espacio. Si no hay espacio, no te puedes mover. Necesitas espacio para moverte exteriormente.

El movimiento interno no es en el espacio, sino en el tiempo. Si no hay tiempo no puedes desplazarte interiormente. El tiempo es un espacio interior:  de un segundo pasas a otro segundo, de este día a otro día, de aquí para allá, de ahora a después, en el tiempo. El tiempo es el espacio interno. Analiza tu mente y verás que siempre te estás moviendo desde el pasado al futuro, desde el futuro al pasado.

O bien te vas hacia recuerdos del pasado o te desplazas a deseos en el futuro.  Cuando te vas desde el pasado al futuro o desde el futuro al pasado, solamente entonces empleas el momento presente, pero sólo como un medio. El presente, para la mente, no es nada más que la línea divisoria entre  pasado y futuro. Para la mente el presente no es realmente existencial. Solamente es una línea divisoria desde la que puedes desplazarte al pasado o al futuro.

La mente nunca está en el presente porque es incapaz de ir al presente. Compréndelo: eres incapaz de moverte en el presente. En el presente no existe el tiempo. El presente siempre es un único instante. Nunca estás en dos momentos al mismo tiempo. Solamente vives un instante. No puedes ir de A a B porque solamente existe A. No hay B.

Entiende esa cualidad del tiempo en el presente:  siempre vives un solo instante. Tanto si eres un mendigo como si eres un emperador, da igual. Tu depósito temporal es el mismo, solamente de instante a instante, y no puedes moverte en él. No hay lugar dónde moverse y la mente existe únicamente si hay movimiento.

Por eso la mente nunca emplea el presente, no puede emplearlo. Retrocede al pasado. Allí hay muchos lugares a los que puede ir. Existe un gran depósito de  recuerdos:  todo tu pasado está ahí.

O también puede irse al futuro. Puedes imaginártelo porque el futuro es,  básicamente, tan sólo el pasado proyectado. Has vivido, has experimentado muchas cosas. Las deseas otra vez o deseas evitarlas:  ése es tu futuro. Amaste a alguien:  fue hermoso, puro gozo.

Entonces deseas que se repita por eso proyectas en el futuro tu deseo de que se repita. Estuviste enfermo, sufriste y deseas evitarlo en el futuro por eso proyectas no enfermar de nuevo. De modo que tu futuro es tan sólo un pasado que has proyectado y así puedes moverte en el futuro.

Pero la mente no se encuentra satisfecha con el futuro que pertenece a esta vida. Proyecta cielos, proyecta vidas futuras. No está satisfecha con un pequeño futuro, así que la mente crea tiempo más allá de la muerte. El pasado y el futuro son vastos territorios; puedes moverte con facilidad en ellos. Con el presente no te puedes mover.

La ausencia de movimiento implica estar en el presente. Esa es la segunda dimensión de la quietud. Si puedes permanecer en este instante, tan sólo aquí y ahora, estarás quieto. No puedes estar de ninguna otra forma. No existe ninguna otra posibilidad más que estar quieto.

Vive en el ahora, y el movimiento se detendrá porque la mente se detendrá. No pienses en el pasado y no proyectes en el futuro. Esto que se te está dando es todo lo que tienes. Permanece en ello, conténtate en ello. Este mismo instante es el único tiempo verdaderamente existencial; no hay nada más.

El pasado es solamente una memoria. Está solamente en tu mente, es polvo acumulado, experiencias acumuladas. No hay pasado en la existencia, no hay futuro en la existencia. La existencia es el presente.

Si el hombre no estuviera en esta Tierra no habría ni pasado ni futuro. Las flores florecerían, desde luego, pero en el presente. El Sol saldría, pero en el presente. La Tierra no sabría nada del pasado ni soñaría nada en el futuro. No habría ni pasado ni futuro.

El pasado está en la mente, en la memoria y debido a este recuerdo es proyectado al futuro. Por eso, generalmente dividimos al tiempo en tres partes:  pasado, presente y futuro, pero en realidad el pasado y el futuro no son una parte del tiempo. Son parte de la mente, no partes del tiempo. El tiempo posee una única división, si es que puedes llamarla división,  y es la del presente.

El tiempo es siempre presente. Esas tres divisiones no son divisiones del tiempo. El pasado y el futuro pertenecen a la mente, no al tiempo. Al tiempo solamente le pertenece el presente. Pero entonces es difícil llamarlo presente porque,  lingüísticamente, para nosotros el presente es algo entre el pasado y el futuro. Se refiere al pasado, se refiere al futuro. Si no hubiera pasado ni futuro entonces la palabra «presente» perdería todo significado.

Se dice que Eckhart dijo que no hay tiempo, solamente el eterno «ahora». Existe un «ahora» eterno y un infinito «aquí».  Cuando digo «allí» solamente lo digo en referencia al sitio en que estamos, sino, solamente habría «aquí». Si yo no estuviera aquí, ¿ que lugar sería el «aquí» y qué lugar sería el «allí»?

En referencia a mí mismo, llamó al lugar más cercano «aquí», y al que no está cercano lo llamó «allí». ¿Dónde acaba el «aquí» y dónde comienza el «allí»? No podemos delimitarlo. En realidad todo es  un «aquí», un «aquí» infinito.

Es debido a la mente que dividimos el tiempo. Entonces, todo lo que hemos vivido se convierte en el pasado y todo lo que esperamos vivir se convierte en el futuro y aquello que está transcurriendo se convierte en el presente. Pero no hay mente, solamente hay un  infinito «ahora», un eterno «ahora». «Aquí, ahora», es la realidad. «Allí» y «después» son partes de la mente, no partes de la realidad.

El concebir la quietud desde una segunda dimensión significa hacer un esfuerzo para vivir momento a momento. Entonces estarás en quietud, estarás en silencio. No habrá agitación interior, ni movimiento, ni oscilaciones internas.  Todo se habrá convertido en un remanso de profundo silencio.

¿Por qué esta mente se desplaza al pasado y al futuro? Buda le dio el nombre de tanha a trishna,  el deseo. Buda dice que, debido a que has vivido algo, lo deseas de nuevo. Al desearlo, te vas al futuro. No desees y no habrá futuro. Es difícil, porque cuando la mente experimenta placer, anhela repetirlo y cuando la mente experimenta incomodidad no desea repetirla, desea evitarla. Por esto es natural que se cree el futuro y debido a este futuro nos perdemos el presente.

Me estás escuchando, puedes simplemente escucharme; entonces no tendrás mente.  Será una escucha sin mente. Pero si estás escuchando y tratando de entender al mismo tiempo, te habrás ido al futuro. Si estás pensando en lo que se te está diciendo, te has perdido lo que se te ha dicho:  te has ido al futuro. Y el presente es algo tan sutil y delicado y tan pequeño y tan atómico que puedes perdértelo en un solo instante.  Un simple gesto,  y te lo habrás perdido.

Si estás escuchando, simplemente escucha. No pienses en lo que se te está diciendo, no trates de descubrir el significado, porque no puedes hacer dos cosas en el presente; escuchar es suficiente. Y si estás solamente escuchando, estás en el presente y la misma escucha se convierte en meditación.

Mahavira ha dicho que si eres capaz de escuchar correctamente no necesitas practicar nada más. Siendo sólo un shravak,  uno que escucha adecuadamente, lograrás todo lo que puede ser logrado. Simplemente siendo un shravak, uno que escucha  correctamente, porque simple-mente escuchar no es una simple escucha,  es un gran fenómeno. Y una vez que conoces el secreto, puedes aplicarlo en cualquier situación.  Comer se convertirá en meditación, caminar se convertirá en meditación, dormir será meditación. Cualquier cosa en la que estés en ese momento,  sin irte al futuro, será meditación.

Pero desconocemos toda actividad en la que estamos en el presente. O empezamos a pensar en el pasado o empezamos a pensar en el futuro. Nos perdemos el presente continuamente. Eso implica que la Existencia se nos escapa siempre. Y esto se convierte en un proceso en cadena; luego se convierte en un hábito.

Una noche Mulla Nasrudin caminaba por una calle. La calle estaba solitaria y de repente se dio cuenta de que  unos hombres a caballo, una especie de tropa se dirigía hacia él. Su mente comenzó a trabajar. Pensó que podían ser asaltantes, que podían matarle. O que podían ser soldados del rey y que podían llevárselo para que prestara el servicio militar o cualquier otra cosa. Se asustó y cuando los caballos y el ruido que formaban se le acercaron, se puso a correr y entró en un cementerio y para poder esconderse se tumbó en una fosa abierta.

Al ver a aquel hombre corriendo, los jinetes,  que eran simples viajantes, se dieron cuenta de lo que había sucedido. Corrieron tras Mulla Nasrudin y se acercaron a la tumba en que estaba. El yacía con los ojos cerrados como si estuviera muerto. «¿Qué te sucede? ¿Por qué te has asustado tanto de repente? ¿Qué pasa?»

Entonces Mulla Nasrudin se dio cuenta de que se había asustado a sí mismo sin motivo. Abrió sus ojos y dijo, «Es algo muy complejo, muy complicado. Si insistís en preguntarme porqué estoy aquí,  os lo diré. Estoy aquí por vuestra culpa y vosotros estáis aquí por la mía».

Es un círculo vicioso. Si tienes deseos,  te irás al futuro y esto creará un círculo vicioso. Cuando ese futuro se convierta en el presente, de nuevo te irás al futuro. Hoy pensaré en el mañana; esto se convertirá en un hábito. Y el mañana nunca llega. No puede llegar; es imposible. Cuando llega es de nuevo el hoy y he creado el hábito de irme siempre desde el hoy al mañana. Por eso cuando el mañana llega, llega como el hoy y luego me voy de nuevo al mañana.

¡Es una cadena! Y cuanto más la elabores, más eficiente te volverás en completarla. Y el mañana nunca llega. Lo que llega siempre es el hoy, y con el hoy tú no tienes ninguna relación. Estableces un mecanismo:  debido a que es hoy, te vas. Es un hábito muy fuerte, no solamente de esta vida, sino de muchas otras vidas. Uno tiene que acabar con él, tiene que salir de él.

Hagas lo que hagas recuerda solamente una cosa:  permanece en el presente mientras lo estés haciendo. Es difícil, arduo, y no vas a lograrlo de inmediato. Has de romper un hábito muy arraigado. Va a ser una dura lucha, pero inténtalo. El esfuerzo mismo creará una distancia, y por el mismo esfuerzo vas a saborear, a veces, momentos del presente. Y una vez conozcas el sabor, estás en el camino.

Pero no conoces el sabor del presente. No lo has probado nunca, nunca has vivido en él, ¡nunca!, te lo digo. Y está siempre aquí. Es la  vida misma;  es todo lo que hay en la vida.

Jesús dijo que estamos simplemente muertos, ¡sin vida! Un día pasaba junto a un pescador justo a la salida del sol. El pescador había lanzado sus redes al lago y Jesús puso la mano en su hombro y le dijo,  «¿Vas a desperdiciar toda tu vida pescando? Puedo enseñarte algo mejor para pescar. Te haré un pescador de la vida». El pescador miró a Jesús como si un imán le estuviera atrayendo, luego tiró su red y siguió a Jesús.

Cuando acababan de salir del pueblo uno se les acercó corriendo y le dijo al pescador, «Tu padre ha muerto. Acaba de morir, así que vuelve a casa. ¿A dónde vas?»
El pescador pidió permiso; le dijo a Jesús, «Déjame que vaya a casa. Volveré pronto. Tengo que enterrar a mi difunto padre».
Jesús le dijo, «Deja que los muertos entierren a los muertos. No tienes porqué ir; sígueme. Hay muchos cadáveres en el pueblo. Ellos enterrarán al difunto».

Para Jesús, estamos muertos porque nunca hemos saboreado la vida, nunca hemos saboreado el presente, lo existencial. Vivimos en el muerto pasado y seguimos proyectando este pasado ya muerto en el futuro. Esto es a lo que Shankara denomina maya, ilusión. Shankara ha sido muy mal entendido. Cuando Shankara dice que el mundo entero es una ilusión,  quiere decir que el «mundo del hombre» es una ilusión, no el mundo en sí.

No sabemos nada del mundo. Hemos creado nuestro propio mundo mental. Todo el mundo tiene su propio mundo, este mundo de pasado y de futuro, este mundo de recuerdos y de deseos. Este mundo es falso, ilusorio. Por eso cuando Shankara dice que este mundo es falso, se refiere a «tu mundo»,  no al mundo. Y cuando «tu mundo» deje de existir, conocerás al verdadero mundo. Y Shankara dice que éste es el Brahmán, que ésa es la Verdad, la Verdad absoluta.

Es como si estuviéramos viviendo en un mundo de sueños, cada uno estando rodeado de sus propios sueños, de una nube de sueños. Todo el mundo va envuelto en sus propios sueños. Y debido a esos sueños no podemos ver lo que es verdadero, lo que es real. Lo real está escondido tras nuestros sueños. Esta mente soñadora es la mente inquieta; la mente no soñadora es la mente quieta. Pero los deseos crean sueños. Sueñas por la noche porque deseas durante el día. Si no desearas durante el día no soñarías por las noches.

Un Buda no sueña, porque los sueños son deseos y los deseos son sueños. Cuando surgen durante el día los llamas deseos; cuando aparecen por la noche, los llamas sueños. Pero todo deseo es sueño. ¿Por qué? Porque todo deseo radica en el futuro, el cual no existe. Todo deseo es un deseo futuro que no existe. ¡El futuro no existe!
Y seguimos soñando. Debemos acabar con este soñar. Este soñar es un movimiento,  un movimiento continuo. Estás repleto de sueños,  sueños destruidos, acabados, que son de nuevo recreados. Cada día hemos de tirar los viejos y crear unos nuevos.

En cualquier momento, en cualquier actividad, trata de estar aquí y ahora. El esfuerzo mismo es una barrera, pero se ha de empezar con algo. Al principio tendrás que hacer un esfuerzo. Aun el esfuerzo es una barrera porque el esfuerzo te lanza al futuro. Pero al principio uno ha de esforzarse, luego en un segundo nivel uno ha de hacer un «esfuerzo sin esfuerzo»,  y luego, en el tercer nivel, el esfuerzo desaparece y estás en el presente.

Caminas por la calle:  trata simpleme nte de caminar, no hagas nada más. Parece simple, pero no lo es. Parece que todos lo hacemos, ¡no es así! Cuando caminas, tu mente está haciendo mil cosas más. Acompaña cada paso. Simplemente camina.

Buda ha dicho, «Cuando camines, simplemente camina. Cuando comas, simplemente come. Cuando escuches, simplemente escucha». Permanece por completo en lo que haces, no permitas que tu mente se pierda en otras cosas. Y es una experiencia maravillosa porque,  de repente, el presente irrumpirá. En tu mundo de sueños, el mundo de la realidad penetrará. Y si alcanzas ese destello, aunque sea por un solo instante, te volverás una persona distinta.

Entonces sabrás algo del aquí y ahora que está a tu alrededor y que te estás perdiendo. Te lo estás perdiendo debido solamente a un hábito mecánico y uno no puede hacer otra cosa que tratar de no ser mecánico.

A veces, siendo consciente, suceden los milagros. Estaba leyendo que en Rusia, en los días anteriores a la Revolución, en una pequeña ciudad de provincias se estaba escenificando un drama. Repentina-mente el director se dio cuenta de que faltaba alguien para un papel  que era esencial en el último acto. Se necesitaba a alguien para un papel determinado en el que tenía que tartamudear. El actor no estaba y trataron de buscar a alguien para reemplazarlo.

Entonces alguien sugirió que tal vez sería difícil encontrarlo a tiempo, pero que en el pueblo había un chico que encajaba a la perfección. No necesitaba practicar porque era tartamudo de por sí. Así que trajeron al chico. Muchos doctores habían tratado de curarlo, habían probado con muchas medicinas, pero el tartamudeo continuaba. De modo que se llamó al chico y se le dio el papel. No tenía  necesidad de practicar.
En el instante en que el chico pisó el escenario, intentó tartamudear, pero no pudo. Empezó a hablar como cualquier otro, sin fallos.

Cuanto más lo intentaba, más imposible resultaba. ¿Qué había sucedido? Por primera vez el hábito mecánico del tartamudeo se había hecho añicos al ser consciente de él. En aquel momento lo estaba haciendo con atención total. Trataba de tartamudear. Era consciente y el mal desapareció. Era un hábito mecánico, pero el mismo esfuerzo por hacerlo conscientemente lo había vuelto imposible.

En el instante en que centras tu atención en un hábito mecánico, éste se detiene porque un hábito mecánico se nutre de tu inconsciencia. La fuerza de voluntad no funciona aquí. ¡El ser consciente sí! Y acuérdate de la diferencia:  con la fuerza de voluntad comenzarás a luchar contra el hábito y,  si tratas de luchar contra el hábito, lo has aceptado de hecho. Cuando te digo que lo hagas conscientemente, quiero decir que no has de luchar con él.

Dale pleno soporte, no seas anti-él.
Caminas por la calle:  préstale toda tu atención. Hazte uno con el caminar; sé consciente de lo que estás haciendo. Primero la pierna izquierda, luego la derecha; se mueven. Siente cada instante conscientemente. Permanece en el momento, no le permitas a tu mente el que se centre en otra parte. Si la mente se distrae debido a viejos hábitos, tráela de nuevo. No te sientas frustrado. Si la mente se distrae, no digas, «Es imposible, no puedo hacerlo».

¡No! Haz que tu mente regrese. Inténtalo de nuevo y antes o después empezarás a sentir ciertos instantes,  por muy escasos que sean,  en los que conocerás el sabor del presente. ¡ Qué sabor tiene el presente! Y una vez sientas el presente, estás junto a las puertas de la Existencia. Puedes entrar en Ella.

En esta dimensión, quietud quiere decir que no hay movimiento de la mente en el pasado ni en el futuro. ¡No hay movimiento! Simplemente estás en el presente. Puedes entenderlo desde el intelecto; puedes incluso sentir que es así. Pero el entenderlo intelectualmente no te servirá de nada, más bien será un engaño, puede resultar un engaño. ¡Has de hacerlo! El pensar en ello no te servirá de nada.

Estás tumbado en tu cama a punto de irte a dormir:  percibe este estar tumbado en la cama. Siente la sensación de la cama, la caricia de las sábanas y los sonidos de tu alrededor, el ruido del tráfico o de cualquier cosa que esté sucediendo. ¡Siéntelo! Quédate así, no pienses, solamente siente.

Permanece en el presente, y en este estado de puro sentir, duérmete. Esa noche soñarás menos, tendrás un sueño más profundo. Por la mañana te despertarás más fresco.
Cuando,  por la mañana, te des cuenta de que el sueño se ha acabado, no saltes de la cama. Quédate en ella cinco minutos. De nuevo siente las sábanas, su calidez, su frescura, o la lluvia cayendo sobre el tejado, o el tráfico que ha vuelto a empezar,  o el mundo que está despertando, el ruido, los pájaros cantando.

Siéntelos durante cinco minutos. No te precipites en la actividad diaria. Quédate con la mañana. Si no lo haces se acabará el sueño y te habrás precipitado e ido al futuro.  Has ido al mercado o a la oficina, pero te has sumido en ello, te has ido. Durante cinco minutos permanece aquí. No vayas tan rápido; no hay porqué. Esos cinco minutos serán meditativos. Esos momentos por la mañana y por la noche son los mejores instantes. A esa hora es muy fácil saborear el sentimiento del presente.

El instante de quedarse dormido es un momento muy vulnerable. Sé sensible a todo lo que te rodea. No pienses. ¡Siente! El sentir siempre está en el presente y el pensar nunca está en el presente. Por eso, por la mañana, cuando la mente está fresca después del sueño nocturno y el cuerpo se encuentra relajado y tú no tienes energía para trabajar, siente durante cinco minutos y luego sal de la cama.

Da cada paso con atención plena. Y por la mañana hacerlo es muy fácil. Por la tarde no es tan sencillo; por la noche es aún más difícil.
Ve al baño y dúchate. ¡Siéntelo! Siente el agua de la ducha que cae sobre ti, cada gota cayendo sobre ti. Olvídate de todo lo demás. Quédate bajo la ducha y siente el presente.

Incluso un baño matutino puede convertirse en auténtica meditación. Cuando el agua cae sobre ti estás en profunda comunión con la naturaleza. Sigue así unos cinco minutos y luego trata de seguir con este sentimiento. Estás desayunando o comiendo:  trata de seguirlo. Se hará cada vez más difícil, pero sigue intentándolo. Pronto llegará un momento en el que estarás todo el día en el presente. Y una vez conozcas esto, sabrás lo que es la quietud.

Esta es la segunda dimensión. Existe también una tercera dimensión, y será conveniente saber algo de ella.

    *
      La primera es el silencio en oposición al sonido. Esta es una dimensión: la de la ausencia de sonido.
    *
      La segunda es la de la quietud frente al movimiento:  eso es la ausencia de movimiento.
    *
      Y la tercera es la del no-ser frente al ego:  la ausencia de ego. La tercera es la más profunda.
     

Buda ha dicho, « A menos que dejes de ser, no puedes estar en quietud. Tú eres el problema, tú eres el ruido, tú eres el movimiento. A menos que tú dejes de «ser» completamente, no podrás alcanzar la quietud perfecta. Por esto a Buda se le conoce como anatmawadi,  el que cree en el no-ser.

Seguimos creyendo que «somos», que «yo soy». Este «yo» es algo totalmente falso. Y debido a este «yo», surgen muchos males; debido a este «yo»,  sigues acumulando el pasado; debido a este «yo» sigues pensando en repetir placeres pasados. Todo cuelga de este «yo»:  el pasado, el futuro, los deseos.

Buda llegó a conocer a través de la meditación profunda que somos capaces de abandonar los deseos mundanos, pero que si el «yo» permanece empezamos a desear el moksha, la Liberación Ultima, la libertad de unificarnos con Dios, de ser uno con el Brahmán. Si este «yo» subsiste, los deseos están presentes, sea cual sea su dirección y su objeto.

Buda dice, «Abandona esta existencia centrada en el «yo»» Pero, ¿cómo abandonarla? ¿Quién la abandonará? Si no hay «yo», ¿quién será el que la deje? ¿Quién pensará en abandonarla? Con «abandonar» se quiere significar el ir hacia adentro y descubrirlo, buscarlo, ver dónde está, si es o no es,  porque aquellos que han ido hacia el interior y aquellos que lo han buscado nunca lo han encontrado. Solamente los que nunca han ido hacia adentro, aquellos que nunca lo han buscado, son los que creen en él, en que existe. Nadie nunca ha encontrado que algo semejante al «yo» exista.

Cuando digo «yo soy», el «soy» es la realidad, no el «yo». Cuando vas hacia adentro sientes cierta «sensación de ser», hay un cierto sentimiento existencial. Sabes que allí hay algo, pero que no eres tú. No hay un sentimiento de «yo».  Solamente se siente una difuminada «sensación de ser», se percibe la Existencia sin «yo».

Otro sistema para entrar en la tercera dimensión: siempre que tengas tiempo, siempre, trata de encontrar dónde reside este «yo». No tienes porque ir a un templo. Si vas, de acuerdo, pero no hay porqué ir. Viajas en tren:  cierra tus ojos, trata de descubrir dónde está este «yo». ¿En el cuerpo? ¿En la mente? ¿Dónde está? Muévete con una mente abierta. Descubre dónde está. Sentado en tu coche o tendido en la cama, siempre que dispongas de unos instantes para cerrar tus ojos, ciérralos y pregúntate, «¿Dónde reside este «yo»? ¿Dónde está? ¿Dónde está ese «yo»?

Ramana Maharshi utilizó una meditación. La llamó la meditación del «¿Quién soy yo?». Buda diría que no iba a servir porque cuando pides, «¿Quién soy yo?» has supuesto de antemano que tú «eres». Esa no es la pregunta. Si la pregunta es solamente «¿Quién soy yo?» entonces el «yo soy» se ha establecido anteriormente. Lo has dado por sentado. Ahora estás preguntando solamente «¿Quién soy yo?» No estás pidiendo realmente por el «yo». La meditación budista dice que preguntes, «¿Dónde estoy «yo»?», no «¿Quién soy yo?»

Escudriña todos los rincones, busca con una mente abierta y no te encontrarás en ninguna parte. Te encontrarás con una existencia silenciosa, pero no con el «yo». Y no creas que es algo muy complicado. ¡No lo es! Solamente cerrando los ojos aquí y tratando de descubrir  «¿Dónde estoy?», no lo conseguirás.

Descubrirás muchas otras cosas. Tu corazón empezará a latir, tu respiración se hará presente, encontrarás muchos pensamientos flotando en tu mente. Descubrirás allí muchas cosas, pero no encontrarás ningún «yo», ningún ego.

Buda afirma que el ego es simplemente un concepto colectivo, como «sociedad», como «nación», como «humanidad». No los puedes encontrar en ninguna parte. Estamos sentados aquí.  Podemos llamar a esto, una «clase», pero no podemos encontrarla. Podemos buscarla: encontraremos individuos, pero ninguna clase. No encontraremos ningún grupo, solamente individuos. «Grupo» es solamente un nombre para una colectividad. Podemos denominar bosque a un conjunto de árboles.

No existe tal bosque, solamente árboles, árboles y más árboles. Si entras en él, solamente encontrarás árboles y el bosque desaparecerá. Este «yo» es solamente un nombre colectivo. «Tú» eres un conjunto. La palabra budista es sangha, un conjunto, un colectivo. Tú eres muchas cosas, pero no un «yo». Ve hacia adentro y descúbrelo. Buda dice, «No me creas. Ve hacia adentro y descúbrelo; busca y descúbrelo». Nunca lo encontrarás.

Por eso en esa tercera dimensión solamente hay «ausencia de sensación de ser» o ausencia de ego. Cuando uno descubre que uno no es, uno está en quietud:  la quietud ha sucedido. No puedes estar tenso, no puedes estar inquieto, no puedes estar en un profundo tumulto si no hay ego. El show ha desaparecido.

Pero, ¿qué es lo que solemos hacer? A cada instante hacemos cosas para alimentar ese ego, para fortalecerlo, para darle más energía, para vitalizarlo. A cada momento tratamos de mantenerlo. Es una idea falsa, pero que puede ser mantenida y mantenida. Puedes seguir creyendo en ella y creando situaciones en las que sea más y más fácil creer en ella. Es una creencia, no es una realidad.

Todo el mundo cree en el ego. La gente pregunta, «¿Dónde está Dios? A menos que lo encontremos no podemos creer en El». Estas personas siguen creyendo en sus egos sin tomarse la molestia de buscar si existe algo así. Esto es un milagro:  somos capaces de dudar de Dios, pero no somos capaces de dudar de nosotros mismos. Y a menos que dudemos de nosotros mismos, no podremos entrar en la quietud. Con ese dudar todo resulta hecho añicos.

Un hombre religioso nace cuando pone en duda su ego y duda de sí mismo.  Hemos dado por sentado ese «yo». Nunca preguntamos por él, si existe o no. Y si alguien hace que nos demos cuenta de que no existe, se convierte en un enemigo. Los amigos son los que nos ayudan a volvernos egos más fuertes. Nuestra familia, nuestra nación, nuestra sociedad nos ayudan a estar centrados en nuestros egos. La religión «te» destrona. Te hace bajar de tu pedestal. «Tú» no existes. Y si «tú» no existes, estás en un profundo abismo de quietud,, sin fondo, infinito,  porque este «yo» es el que lo altera todo, este «yo» es el mal, este «yo» es la molestia. Ese es el problema.

Tanka vivía en un pueblo. Uno se le acerca y le pregunta, «¡Ayúdame! ¡Enséñame! ¡Iníciame! ¡Quiero ser libre! ¡Quiero alcanzar  el Moksha!»
Tanka le dice, «No puedo liberarte. Puedo disolver tu «yo», pero no puedo liberarte».
No hay libertad para el «yo». Solamente existe una libertad y ésa es la liberación del «yo». No hay moksha para el «yo», no hay liberación para el «yo». Unicamente existe un «liberarse» y ése es «liberarse del yo», no «liberar al yo».
¿Qué es lo que puedes hacer? Puedes evaluar sin prejuicios. Siempre que dispongas de tiempo cierra tus ojos, ve hacia adentro y descubre dónde estás. Y pronto descubrirás que existes como parte de la infinita Existencia, no como una isla separada. Ningún hombre es una isla. Somos parte de un continente infinito. Este «yo» te da la falsa idea de ser una isla y de ahí surgen todos los problemas. El «yo» es el origen de los problemas. Toda violencia, crimen, guerra, locura,  es creada por este «yo». Nos colgamos de él y así seguimos. Debemos  dejar esta dependencia.
Has de ser desarraigado de tu propio «yo». Nadie aparte de ti puede lograrlo, ni existe práctica yóguica que sirva de ayuda porque si sigues practicando sin buscar este «yo», cualquiera que sea la práctica, solamente servirá para reforzarlo. Si meditas, este «yo» dirá, «Estoy meditando». Si renuncias al mundo, este «yo» dirá,  «He renunciado al mundo». Si te conviertes en un sanyasin, este «yo» dirá, «Me he convertido en un sanyasin; «yo» he logrado esto; «yo» he logrado esto otro». En «este» mundo o en «ese» mundo,  esos esfuerzos seguirán reforzando ese «yo».
Por esto ocurre que una persona que haya estado practicando muy austeramente se convierte en un egoísta de un modo más sutil. Se convierte más en un «yo» en vez de ir formando parte del continente, de tierra firme. Se convierte en un elevadísimo ego. Esto le puede pasar a todo el mundo. De modo que no son solamente las riquezas o el prestigio o las cosas mundanas y las posesiones las que nutren al «yo». El «yo» puede convertir cualquier cosa en su alimento.

Por eso, antes de entrar en el camino espiritual, siempre se ha de recordar el aviso de Buda. El dijo, «Antes de que entres en cualquier camino, descubre primero si existe o no existe ego»

Solamente entonces tu camino se convertirá en espiritual. Sino, cualquiera que sea el camino, al final resultará ser mundano, porque este «yo» lo explotará».
                                                   
Fin del extracto “La Alquimia Suprema”, Vol 2  de Osho

Preguntas de totli

De: Alias de MSN-Tohtli-  (Mensaje original) Enviado: 28/01/2006 0:19
Disculpe usted mi hermano cuervo por no visitarlo seguido pero apenas me ando emparejando con todos los foros.

Solo queria hacerte una pregunta.
¿Has oido  algo con respecto a que animal le corresponde a cada punto cardinal?

Esque una muchacha en el foro me pregunto sobre eso y pues le dije que iba a investigar. ¿podrias decirme en que lugar recondito de tu foro lo encuentro? o ya de paso … te invito a mi nuevo foro y se lo explicas tu que eres el experto.

Bueno, prometo que ya te voy a visitar mas seguido.

Un abraso.
¡¡¡ahhh!!! me saludas a Demetrio ahora que vallas para alla arriba, tambien saludos a todos por alla Dafer, la chiquita guapa  que siempre se me olvida su nombre pero que canta precioso y a todos los del circulo de medicina.

De: Alias de MSNThe_dark_crow_v301 Enviado: 28/01/2006 8:13
Depende de a que tradicion te refieres. Mas que animal en lo que es el chamanismo son especies de arboloes, colores y elementos regularmente.

No he escrito sobre los puntos cadinales todavia aunque tengo algo de informacion sobre circulos de medicina.

Ya llevo un rato sin visitar a Demetrio, ha habido algunas situaciones con los yetis y gente que ellos han llevado por las cuales por el momento prefiero esperar a que las resuelvan alla en Hercules antes de ir. He intentado tener una platica con Demetrio sobre situaciones negativas que estan generando tanto adentro como fuera algunas personas (Bacho y su club de toby de descerebrados, Violeta y Laura y sus relacion con kinamecos y vende cursos) que van con el a clases, sin embargo no se la verdad si me escuche. creo que te va a tocar saludarlos de mi parte. Por congruencia con lo que estoy haciendo ahora prefiero esperar a lo que suceda alla sin embargo ya no me siento comodo y es posible que ya no pueda regresar.

De mi parte te comento ve con quien te relacionas y a quien invitas a tu foro para evitar camilitos o frank “yo no soy antropologo”. El problema con tener personas asi en un foro es que terminan contaminandolo con incongruencias y hacer un ambiente muy pesado. Relacionate con auqellos que tengan principios o un sentido humano y no permitas cosas como lo que sucedio en el foro de chamanismo de invasion de trolls con IQ negativo. NO te estoy diciendo con quien te debes relacionar, pero si que necesitas definir que rumbo tomar y com que principios, busca semejantes no a gente que se contradice y tiene amnesia selectiva

De: Alias de MSNThe_dark_crow_v301 Enviado: 28/01/2006 8:21
Pd: Bacho sigue insistiendo con que la espiritualidad sea exclusiva para aquellos que la puedan pagar y sigue viendola como medio para obtener recursos economicos.

Mientras no entienda que hay cosas que no se obtienen con dinero sino con los actos de buena fe motivados por el corazon, y usando un poco la inteligencia va a ser dificil que provoque el tipo de cambios que espera de los demas. Su idea simplista de resolver las cosas a golpe de billetes o de saturacion no es practico. No puedes reclutar para una causa en la cual desconoces en que estas metido y que estas generando.

Le tengo mucho aprecio a Demetrio sin embargo como te comento ya no me siento comodo alla sino mas bien fuera de lugar.

e: Alias de MSNThe_dark_crow_v301 Enviado: 16/03/2006 5:20
Se han dado situaciones particulares con Demetrio. Cada tanto tiempo las personas que estan dentro del conocimiento reciben pruebas y llegando a cierto nivel varias de ellas estan relacionadas con el poder. Demetrio inicio su trabajo dentrode la gnosis y en ellos se organiza el trabajo espiritual en “camaras” o niveles. Un problema que se puede generar con ello si no se ha trabajado ciertos aspectos de los aprendices es que estos se les suban los humos y comiencen a creerse “Neo” o guias espirituales (sobretodo si son yetis) y comiencen una lucha de poder entre ellos. Con ello perdida de vista de que es lo primordial.
Espero realmente que se de otra oportunidad alla, esta en manos de quienes se encuentran alli en tomarla y no caer en lo comercial o lucha por el poder innecesaria.

De: Nagual Enviado: 16/03/2006 7:24
Hacer lo correcto y no lo agradable.

De: Alias de MSNThe_dark_crow_v301 Enviado: 16/03/2006 7:47
Hace rato llevaba 2 paginas de algo que estaba escribiendo sobre los abismos del conocimiento como ultima contestacion a un par de sujetos que me han hecho perder el tiempo ultimamente y que terminaran siendo usados inadvertidamente para ellos de carne de cañon por un grupo que conozco de magia real.
Sin embargo se me apago la computadora por la luz y adios texto. Mas tarde lo armo aqui regresando del trabajo.

Basicamente hay dos abismos que he visto ultimamente:
Caer en la desinformacion al continuar desperdiciando energia en contestarle a dos personas que estan dentro de la Antitradicion y que buscan solo su beneficio personal en un lugar donde el moderador esta cruzado de brazos y la situacion que se esta dando con Demetrio en donde esta esa parte: Hay recursos economicos para lograr lo que se habia planeado desde hace tiempo, pero a cambio hay que permitir que ciertas personas ejerzan su elitismo hacia los demas. O hacer las cosas de forma correcta sin los recursos necesarios o tener los recursos necesarios permitiendo que ocurran cosas inadecuadas.
Por lo mientras no tengo ganas de permitirme estar en ambos abismos.
Regresando del trabajo les contesto finalmente a las dos personas que creen que el chamanismo es ciencia o derivada de la razon y que es un producto de lucro.
En la noche hablo con Demetrio por telefono , no esta en mis manos para que el resuelva la situacion que se ha permitido que se de con los yetis, solo le avisarare de un par de cosas.

Lo mas sencillo seria hacer cursos o permitirlos, o generar recursos en base a que solo quienes puedan pagar cierto conocimiento lo tengan acesible para si.
El real conocimientio esta inacesible para aquellos que no pueden silenciar la mente y escuchar el corazon.

el chaman

El Chamán

Por José Luis Giménez

Desde que el espíritu del hombre fue revelado a este, en todas las culturas surgidas en la Tierra, han existido determinados personajes cuya existencia ha estado más cercana al mundo esotérico y extrasensorial, que al físico.

Se trata del Chamán o Shamán, una expresión derivada del vocablo inglés ” Shah – man ” y que tiene su origen en la tribu de los Tungus de la Estepa Siberiana.

El Chamán ha sido sistematicamente encasillado en facetas que se corresponde con los hechiceros, brujos, magos, videntes, mediums, curanderos, etc. y hasta pertenecientes a la casta sacerdotal. Y si bien a veces han realizado tales facetas, lo cierto es que la identidad del chamán va más allá.

El Chamán puede poseer algunas o todas las facetas mencionadas, pero lo que realmente caracterizará al Chamán o Shamán será su capacidad de “caminar” entre dos mundos, el físico o cotidiano y el mundo espiritual, a través de su “estado alterado de consciencia”.

El Chamán, ya sea masculino o femenino, y a través de su preparación iniciatica, será quien posea mayor capacidad de contactar con el mundo de los espiritus, ya sea un mundo superior o el mundo del ser interior, donde sabrá actuar como maestro o guia del inconsciente, llevando a cabo las mayores experiencias extaticas, a la vez que será capaz de guiar a los espiritus desencarnados, hacia la “Luz Eterna”.

El Chamán accede al estado alterado de consciencia, a través de diferentes medios, proporcionado por la madre Naturaleza, a través del consumo de Yerbas y hongos, (ayahuasca, peyote, etc.) , o también a través de la aplicación de sonidos, música o toda una serie de rituales y danzas. Pero además el Chamán utiliza otros aspectos de carácter esoterico – conocimiento de lo interior -, que será lo que le pondrá en contacto permanente con su guia interno, o espíritu protector.

Esta faceta será la más trascendente, pues todo aprendiz de Chamán precisará no solo de la guia y a probación del maestro Chamán, sinó que será la aprobación transpersonal de su guia interno o espíritu protector, quien realmente lo capacitará como tal.

El Chamán a través de su facultad de adentrarse en el mundo espiritual o sutil, conseguirá transformar todo el poder o conocimiento aquirido en el plano sutil, en las acciones o terapias apropiadas para el mundo físico.

Así dichas acciones o terapias podrán consistir en diversas actividades tales como : realización de música, percusión de tambores, talismanes, y desarrollo de determinadas creaciones artisticas.

El Chamán es llamado a serlo, tiene que sufrir una ruptura o muerte con el yo anterior, para que después de su “autocuración”, pueda percibir la llamada e iniciarse en los ritos o adquirir los conocimientos esotericos, que le llevarán a su nuevo estado. No es una tarea fácil, ni debe de confundirse con las modas de la New Age, aunque la iniciación y el aprendizaje actual haya evolucionado con respecto a otros ritos e iniciaciones antiguas.

El Chamán existe en diversas culturas, antiguas y actuales, pero no por ello se muestran diferentes. Lo que los chamanes antiguos identificaban como simbolos de poder, a través de animales “afines” a sus culturas, también llamados “Nagual”, hoy dia se consigue mediante la visión de la naturaleza como un ecosistema donde lo espiritual y la fuerza o energia vital mantienen un equilibrio y mutua interdependencia. No obstante, la sociedad occidental actual, suele aplicar literalmente las descripciones que escuchan al respecto de los animales de poder o ” Nagual” , así como las descripciones sobre los viajes del espiritu, o las facultades del chamán, lo que puede provocar un menoscabo o desprecio, al considerarlo un remanente de otra época.

Así. el Chamán, poseerá un conjunto de facultades y de conocimientos adquiridos pacientemente a través de las experiencias, tanto físicas, como de tipo extrasensorial o esotérico.

No hay que confundir el chamanismo con ningún tipo de credo o práctica religiosa, ya que el modo en que el Chamán plantea su espiritualidad, deja patente la diferencia existente con la doctrina religiosa, lo que posibilita que pueda servir de apoyo a la propia religión.

Esto tampoco quiere decir que el ser Chamán comporte el misticimo o la santidad, sino que deberá de entenderse como un canal, o un intermediario, especializado en la canalización de energias, tanto sutiles como internas, las cuales potenciaran las facultades innatas en él. No obstante a todo lo mencionado anteriormente, El Chamán puede definirse como “El médico del Alma “.

” El Chamán conoce el pensamiento de Dios, pues lo ha mirado a los ojos y siente el latir de la Consciencia Cósmica “.

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