¿Cuanto te valoras?

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 02/05/2006 13:20
Cuantas veces, aceptámos el valor que nos dan los demás?

Cuantas veces toleramos injusticias o groserías, porque en el fondo creemos que tienen razón!

Te haz puesto a hacer tus ejercicios?

Haz analizado que es lo tienes y cuanto vale lo que ofreces?

Te invito a que leas la siguiente reflexión y que al igual que el joven del cuento, descubras que si alguien no te valora es que no te conoce…

Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto.
¿Cómo puedo mejorar?
¿Qué puedo hacer para que me valoren más?

El maestro, sin mirarlo, le dijo:

-Cuanto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mi propio problema. Quizás después… -y después de una pausa agregó: -Si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este tema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.

-E… encantado, maestro -titubeó el joven pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus necesidades postergadas.

-Bien -asintió el maestro. Se quitó el anillo que llevaba en el dedo pequeño de la mano izquierda y dándoselo al muchacho, agregó -toma el caballo que está allí afuera y cabalga hasta el mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Vete antes y regresa con esa moneda lo más rápido que puedas.

El joven tomó el anillo y partió.

Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes. Estos lo miraban con algún interés, hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo.

Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara, y sólo un viejito fue tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo. En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro, y rechazó la oferta.

Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado -mas de cien personas- y abatido por su fracaso, montó en su caballo y regresó.

Cuánto hubiera deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro. Podría entonces habérsela entregado al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y ayuda.

Entró en la habitación.

-Maestro -dijo- lo siento, no es posible conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera conseguir dos o tres monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del anillo.

-Qué importante lo que dijiste, joven amigo -contestó sonriente el maestro-.
Debemos saber el verdadero valor del anillo. Vuelve a montar y vete al joyero.

¿Quién mejor que él para saberlo? Dile que quisieras vender al anillo y pregúntale cuánto te da por él.

Pero no importa lo que ofrezca, no se lo vendas.Vuelve aquí con mi anillo.

El joven volvió a cabalgar.

El joyero examinó el anillo a la luz del candil, lo miró con su lupa, lo pesó y luego le dijo:

-Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más que 58 monedas de oro por su anillo.

-¿¿58 monedas?? -exclamó el joven.

-Sí -replicó el joyero- Yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero no sé… Si la venta es urgente…

El joven corrió emocionado a casa del maestro a contarle lo sucedido.

-Siéntate- dijo el maestro después de escucharlo-. Tú eres como ese anillo: una joya, valiosa y única. Y como tal, sólo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿Qué haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor?

Y diciendo esto, volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño de su mano izquierda.

La belleza de la vida

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 01/05/2006 18:51
LA BELLEZA DE LA VIDA EN CUALQUIER ETAPA

  Una señora, bien equilibrada y orgullosa, de 92 años de edad, cada mañana para las 8 en punto, estaba con su cabello peinado al estilo de peluquería y un maquillaje perfectamente aplicado, aún sabiendo que ella era casi ciega.

Se mudó hoy a un asilo de ancianos.Su marido de 90 años, recientemente había muerto, obligando a que esta mudanza se hiciera después de su fallecimiento. Después de muchas horas de esperar pacientemente en la recepción del asilo de ancianos, ella sonrió muy dulcemente cuando le avisaron que su habitación estaba lista.

Mientras ella maniobraba su andador al ascensor, yo le daba una descripción detallada de su pequeño cuarto, incluyendo las sábanas y cortinas que habían sido colgadas en su ventana: “Me encantan”, dijo ella con el entusiasmo de un chiquillo de 8 años al que acaban de mostrar un nuevo cachorro.

“Sra. Jones, usted aún no ha visto el cuarto . . . sólo espere”. “Eso no tiene nada que ver”, dijo ella. “La felicidad es algo que uno decide con anticipación”.El hecho de que me guste mi cuarto o no me guste, no depende en como este arreglado el lugar, depende en como yo arregle mi mente. Ya había decidido de antemano que me encantaría”. “Es una decisión que tomo cada mañana al levantarme”….

Estas son mis posibilidades:

puedo pasarme el día en cama enumerando las dificultades que tengo con las partes de mi cuerpo que ya no funcionan, o puedo levantarme de la cama y agradecer por las que sí funcionan .

Cada día es un regalo, y por el tiempo que mis ojos se abran me enfocaré en el nuevo día y en las memorias felices que he guardado en mi mente . . . sólo por este momento en mi vida.

La vejez es como una cuenta bancaria… uno extrae de lo que había depositado en ella. Entonces, mi consejo para ti sería que deposites gran cantidad de felicidad en la cuenta bancaria de tus recuerdos”. Gracias por lo que has hecho para llenar mi banco de memorias. Sigo depositando.

Recuerda las simples 5 reglas para ser feliz

1.  Libera tu corazón de odio.
2.  Libera tu mente de preocupaciones.
3.  Vive humildemente.
4.  Da más.
5.  Espera menos.

Había un hombre …

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 29/04/2006 10:48

Había un hombre que tenia cuatro hijos. El buscaba que ellos aprendieran a no juzgar las cosas tan rápidamente; entonces el envió a cada uno por turnos a ver un árbol de peras que estaba a una gran distancia.

El primer hijo fue en el Invierno, el segundo en Primavera, el tercero en Verano y el hijo más joven en el Otoño.

Cuando todos ellos habían ido y regresado, los llamó y juntos les pidió que describieran lo que habían visto.

El primer hijo mencionó que el árbol era horrible, doblado y retorcido.

El segundo dijo que no, que estaba cubierto con brotes verdes y lleno de promesas.

El tercer hijo no estuvo de acuerdo, el dijo que estaba cargado de flores, que tenia aroma muy dulce y se veía muy hermoso, era la cosa mas llena de gracia que jamás había visto.

El ultimo de los hijos no estuvo de acuerdo con ninguno de ellos, el dijo que estaba maduro y marchitándose de tanto fruto, lleno de vida y satisfacción.

Entonces el hombre les explicó a sus hijos que todos tenia la razón, por que ellos solo habían visto una de las estaciones de la vida del árbol.

El les dijo a todos que no deben de juzgar a un árbol, o a una persona, solo por ver una de sus temporadas, y que la esencia de lo que son, el placer, regocijo y amor que viene con la vida puede ser solo medida al final, cuando todas las estaciones han pasado.

Si tu te das por vencido en el invierno, habrás perdido la promesa de la primavera, la belleza del verano y la satisfacción del otoño.

Moraleja: No dejes que el dolor de alguna estación destruya la dicha del resto. No juzgues la vida por una situación difícil.Persevera a través de las dificultades y malas rachas… mejores tiempos seguramente vienen por delante.

El Ángel

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 28/04/2006 12:15

El Ángel

Cuenta la Antigua leyenda que un niño que estaba por
nacer le dijo a Dios:

Dicen que me vas a enviar mañana a la tierra pero
¿ Cómo viviré tan pequeño e indefenso como soy?

Entre muchos ángeles te escogí uno para Ti,
que te está esperando, él te cuidará.

Pero dime, aquí en el cielo no hago más que cantar y sonreír,
eso basta para ser feliz.

Y ¿Cómo entender que la gente me hable,
si no conozco el extraño idioma en que hablan los hombres?

Tu Ángel te dirá las palabras más dulces
y más tiernas que puedas escuchar
y con mucha paciencia y cariño te enseñará hablar.

Y ¿Qué haré cuando quiera hablar contigo?
Tu ángel te juntará las manitos y te enseñará a orar.

He oído que en la tierra hay hombres malos
¿Quién me defenderá?

Tu Ángel te defenderá aún a costa de su propia Vida.
Pero estaré siempre triste porque no te veré más Señor.

Tu Ángel te hablará de mí y te enseñará el camino
para que regreses a mi presencia,
aunque yo siempre estaré a tu lado.

En ese instante una paz reinaba en el cielo,
pero se oían voces terrestres
y el niño presuroso repetía suavemente.

Dios mío, si ya me voy dime su nombre,
¿Cómo se llama mi ángel?

Su nombre no importa, tú le dirás MAMÁ…

El camino del lider

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 27/04/2006 12:28
EL CAMINO DEL LÍDER

Cuentan que un hijo le dijo a su padre que quería ser un líder, y le
preguntó cómo podía lograrlo.

El padre le respondió que lo primero que tenía que hacer era estar consciente de sus conductas.

Que cada vez que sintiera que había hecho daño a una persona, clavara un clavo en la cerca de su casa.

El hijo aceptó el reto y empezó a tomar mayor conciencia de sus actos.

Siguiendo el consejo de su padre, comenzó a poner clavos con el martillo  cada vez que hacía daño, maltrataba a una persona o no la respetaba.

Luego de un tiempo el hijo dejó de poner clavos en la cerca, porque ya era  consciente de sus actos y trataba bien a las personas. Entonces preguntó a su padre: ¿y ahora qué hago?

El padre le respondió diciéndole que por cada acto de bien y servicio que realizase, saca un clavo de la cerca.

El hijo nuevamente aceptó el reto y empezó, poco a poco, a sacar los clavos. Ya  estaba despierto, era conciente  y además se dedicaba a ayudar a las personas.

En poco tiempo logró sacar  todos los clavos. Contento, se acercó donde su padre, quizá con un poco de soberbia y le dijo: ¡he terminado! ¡Logré sacar todos los clavos!

Finalmente he aprendido a ser una mejor persona, un líder. Sin embargo, acto seguido lo asaltó una duda: ¿ahora qué haremos con todos los huecos que dejaron  los clavos en la cerca? El padre le respondió:

“no los  toques. Están allí para recordarte siempre que en tu camino de aprendizaje dejaste huella de dolor en la gente y que gracias a su entrega, comprensión y colaboración  ahora puedes ser la persona que eres”.

El primer paso que debe dar aquella persona que quiere  ser líder es aprender  a estar consciente, pues éste es un elemento clave  para lograr el liderazgo personal.

La historia termina con la etapa  más evolucionada del liderazgo interpersonal: el servicio a los demás.

No  podemos ser líderes si no tenemos primero la capacidad de liderarnos a  nosotros mismos.

El liderazgo personal se logra cuando la persona emprende el camino trabajando su autoestima, creatividad, visión, equilibrio y capacidad de aprender.

El liderazgo interpersonal se logra posteriormente, cuando la  persona domina la comunicación, aprende a dirigirse a otros y a entregarles
el poder, a trabajar en equipo y a servir a sus seguidores.

El liderazgo es un camino en espiral que va de dentro hacia fuera. Si una  laguna que alimenta a un río no es profunda, si tiene poca agua, el río no  podrá irrigar los campos y no se podrá sembrar ni cosechar.

De la misma  forma, si la persona no tiene primero un nivel de profundidad interior, no  podrá irrigar un liderazgo constructivo y  hacer crecer a las personas  que la siguen.

Yo los cuidare

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 26/04/2006 9:51

YO LOS CUIDARE
Un ebrio en un automóvil dicen que se pasò una luz. Causó un accidente múltiple de seis autos en la calle 109.
 
Cuántos cuerpos tendidos estaban por doquier y sangre regada por todos lados, las sirenas gritaban eulogias, la Muerte estaba en el aire.
Una madre atrapada dentro de su auto, fue escuchada sobre todo por el ruido; su ruego casi rompe el aire:

Oh, Dios, por favor salva a mis niños! Ella trataba de librar sus manos atrapadas; Ella trataba de liberarse, pero el  metal torcido la mantuvo cautiva. Su mirada llena de terror se enfocó en donde el asiento trasero había estado, pero todo lo que vió fue vidrio roto y dos sillas de niños destruidos.

Sus gemelos no se veían  por ningún lado; ella no los escuchaba llorar. Y luego ella rogó de que hayan sido arrojados del vehículo.

Oh Dios, no los dejes morir!. Luego los bomberos llegaron y la liberaron, pero cuando buscaron en la parte trasera, no encontraron niños, pero los cinturones de seguridad estaban intactos.

Ellos pensaron la mujer estaba loca y que estaba en el auto sola, pero cuando trataron de interrogarla    descubrieron  que había desaparecido. Policías la vieron corriendo sin rumbo gritando mas fuerte que el ruido suplicando  desesperadamente, Por favor ayuda para encontrar a mis niños! Ellos tienen cuatro años de edad y están con camisa azul; jeans azul para hacer juego.

Un policía hablò Están en mi auto y no tienen un rasguño. Ellos dicen que su Papà los puso ahì, y les dio a cada uno un paletita, luego les dijo esperen por su Mamà que regrese y los lleve a casa.

Yo  busque por todos lados pero no puedo encontrar al Padre.

Probablemente dejo el área, supongo y eso es muy malo. La Madre abrazò a los gemelos y dijo, mientras se limpiaba las lagrimas.
El no pudo haber dejado el área, ya que el murió hace un año.
El policía apareciendo confundido preguntó,
¿Cómo  puede ser eso verdad?

Los niños dijeron, Mami, Papi vino y dijo que te diéramos  un beso por èl. El dijo para no debíamos preocuparnos y que tu estarías bien, y luego nos puso en este auto con las luces brillantes y bonitas. Queríamos que el se quede con nosotros porque lo extrañamos mucho, pero el solo nos abrazò muy fuerte y dijo que tenía que irse.
El dijo que algún día entenderíamos y nos dijo que nos portáramos bien, y  que te dijéramos que el siempre nos esta cuidando.
 
La Madre supo sin lugar a dudas que lo que ellos decian era verdad, ella recordó las ultimas palabras del Padre:

Yo los cuidarè.El reporte de los bomberos no podían explicar el auto  totalmente destruido y como los tres se salvaron sin una cicatriz.
Pero en el  reporte de la policía estaba escrito en letras muy pequeñas:

Un Angel salvò la noche en la Autopista 109.
La oración de 7 segundos, solo repite esta frase y ve como Dios actùa…….
Señor, Te quiero y te necesito, ven a mi corazón, y  bendice mi familia, mi casa, mis amigos y a mi. Amèn”

Aquél que tiene mil amigos no tiene un amigo a quien no corresponder. Esta mañana cuando el Señor abriò una ventana al Paraiso,  El me vió y pregunto:

“Hijo mio, cual es tu mas grande deseo para hoy?.

Yo respondì:

“Señor, por favor cuida a la persona que esta leyendo este mensaje, su familia y sus amigos especiales. Ellos se lo merecen y los quiero mucho”.

El amor de DIOS  es como el ocèano, puedes ver su  comienzo, pero no su final.

El rey y la mendiga

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 24/04/2006 10:59
Cuentan que habia una vez un rey muy apuesto que estaba buscando esposa.
Por su palacio pasaron todas las mujeres mas hermosas del reino y de otros mas lejanos; muchas le ofrecian ademas de su belleza y encantos muchas riquezas, pero ninguna lo satisfacia tanto como para convertirse en su reina
Cierto dia llego una mendiga al palacio de este rey y con mucha lucha consiguio una audiencia.

“No tengo nada material que ofrecerte, solo puedo darte el gran amor que siento por ti”

le dijo al rey,-

“puedo hacer algo para demostrarte ese amor”.

Esto desperto la curiosidad del rey, quien le pidio que le dijera que seria eso que podia hacer.

-“Pasare 100 dias en tu balcon, sin comer ni beber nada,expuesta a la lluvia, al sereno, al sol y al frio de la noche. Si puedo soportar estos 100 dias, entonces me convertiras en tu esposa”-.

El rey, sorprendido mas que conmovido, acepto el reto. Le dijo:

-“Acepto. Si una mujer puede hacer todo esto por mi, es digna de ser mi esposa”-

Dicho esto, la mujer empezo su sacrificio.

Comenzaron a pasar los dias y la mujer valientemente soportaba las peores tempestades….muchas veces sentia que desfallecia del hambre y el frio, pero la alentaba imaginarse finalmente al lado de su gran amor. De vez en cuando el rey asomaba la cara desde la comodidad de su habitacion para verla y le hacia señas de aliento con el pulgar. Asi fue pasando el tiempo….20 dias….50 dias….la gente del reino estaba feliz, pues pensaban -Por  fin tendremos una reina!!….90 dias….y el rey continuaba asomando su cabeza de vez en cuando para ver los progresos de la mujer. –

“Esta mujer es increible”

pensaba para si mismo y volvia a darle aliento con señas.

Al fin llego el dia 99 y todo el pueblo empezo a reunirse en las afueras del palacio para ver el momento en que aquella mendiga se convertiria en esposa del rey. Fueron contando las horas….a las 12 de la noche de ese dia tendrian reina!!….la pobre mujer estaba muy desmejorada, habia enflaquesido mucho y contraido enfermedades.

Entonces sucedio. A las 11:00 de la noche de aquel dia 99, faltando apenas una hora para que llegara el dia 100, la valiente mujer se rindio…. y decidio retirarse de aquel palacio. Dio una triste mirada al sorprendido rey y sin decir ni media palabra se marcho.

La gente estaba conmocionada!!. Nadie podia entender por que aquella valiente mujer se habia rendido faltando tan solo 1 hora para ver sus sueños convertidos en realidad!!. Habia soportado tanto!!.
Al llegar a su casa, su padre se habia enterado ya de lo ocurrido.
Le pregunto:

-“Porque te rendiste a tan solo instantes de ser la reina?”,
y ante su asombro ella respondio:

-“Estuve 99 dias y 23 horas en su balcon, soportando todo tipo de calamidades y no fue capaz de liberarme de ese sacrificio.
Me veia padecer y solo me alentaba a continuar, sin mostrar siquiera un poco de piedad ante mi sufrimiento. Espere todo este tiempo un atisbo de bondad y consideracion que nunca llegaron. Entonces entendi: una persona tan egoista, desconsiderada y ciega, que solo piensa en si misma, no merece mi amor.

MORALEJA: Cuando ames a alguien y sientas que para mantener a esa persona a tu lado tienes que sufrir, sacrificar tu esencia y hasta rogar…aunque te duela, retirate. Y no tanto porque las cosas se tornen dificiles, sino porque quien no te haga sentir valorada/o, quien no sea capaz de dar lo mismo que tu, quien no puede establecer el mismo compromiso, la misma entrega…simplemente no te merece.

Amor Incondicional

De: Alias de MSNLUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 20/04/2006 11:37
Amor Incondicional

  Los pasajeros del omnibus, la observaron compasivamente cuando la atractiva joven del bastón blanco subió con cuidado los escalones.
Le pagó al conductor y, usando las manos para percibir la ubicación de los asientos, caminó por el pasillo y encontró el asiento que, según él le había dicho, estaba vacío.
Luego se acomodó, colocó su maletín sobre las rodillas y apoyó el bastón contra su pierna.
Hacía un año que Susan, de treinta y cuatro años, se había quedado ciega. Debido a un diagnóstico equivocado, había perdido la vista, y de repente se había sentido arrojada a un mundo de oscuridad, rabia, frustración y autoconmiseración.
Dado que antes había sido una mujer orgullosamente independiente, ahora Susan se sentía condenada, por esta terrible vuelta del destino, a ser una carga impotente y desvalida para todos los que la rodeaban.
“¿Cómo pudo pasarme esto?”, se quejaba, con el corazón lleno de cólera.
Pero a pesar de cuánto llorase, ella sabía cuál era la dolorosa verdad:nunca más volvería a ver.
Una nube de depresión se cernía sobre el espíritu de Susan, antes tan optimista.
El sólo hecho de vivir cada día era un ejercicio de frustración y cansancio.
Y sólo podía aferrarse a su esposo, Mark.
Mark era un oficial de la Fuerza Aérea, y amaba a Susan con todo su corazón.
Al perder ella la vista, notó cómo se hundía en la desesperación y decidió ayudarla a reunir las fuerzas y la confianza necesarias para volver a ser independiente.
La experiencia militar de Mark, lo había entrenado muy bien para manejar situaciones delicadas, pero él sabía que aquella era la batalla más difícil que iba a enfrentar.
Finalmente, Susan se sintió preparada para volver a su trabajo, pero, ¿cómo llegaría hasta allí?
Estaba acostumbrada a tomar el ómnibus, pero ahora se encontraba demasiado
asustada como para ir por la ciudad por sí sola.
Mark se ofreció a llevarla en el auto todos los días, aún cuando trabajaban en extremos opuestos de la ciudad.
Al principio, esto reconfortó a Susan y cubrió la necesidad de Mark de proteger a su esposa ciega,que se sentía tan insegura para realizar la
acción más insignificante.
Sin embargo, Mark pronto se dio cuenta de que ese arreglo no funcionaba…era problemático y costoso.
“Susan tendrá que empezar a tomar el ómnibus de nuevo”, admitió ante sí mismo.
Pero sólo pensar en mencionárselo lo hacía estremecer.
Ella todavía estaba tan frágil, tan llena de rabia, ¿cómo reaccionaría?
Tal como Mark había previsto, Susan se horrorizó ante la idea de volver a tomar el ómnibus.
“¡Estoy ciega!, explicó con amargura, ¿cómo se supone que voy a saber a dónde me dirijo?, siento que me estás abandonando”.
A Mark se le rompió el corazón al oír esas palabras, pero él sabía lo que debía hacerse.
Le prometió a Susan que, por la mañana y por la noche la acompañaría en el ómnibus todo el tiempo que fuera necesario hasta que ella se sintiera segura.
Y eso fue exactamente lo que ocurrió.
Durante dos semanas enteras, Mark con uniforme militar y todo, acompañó a Susan en el viaje de ida y vuelta al trabajo.
Le enseñó cómo apoyarse en sus otros sentidos, en especial el oído, para determinar dónde se encontraba y cómo adaptarse a su nuevo entorno.
La ayudó a entablar amistad con los conductores, quienes se ocuparían de ella y le guardarían un asiento. La hizo reír, incluso en aquellos días no tan buenos en que tropezaba al bajar del ómnibus, o tiraba su maletín lleno de papeles en el pasillo.
Todas las mañanas hacían el recorrido juntos y Mark tomaba un taxi para volver a su oficina.
Aunque esta rutina resultaba más cara y cansadora que la anterior, Mark sabía que sólo era cuestión de esperar un tiempo más antes que Susan estuviera capacitada para viajar en ómnibus por su cuenta.
Creía en ella, en la Susan que él había conocido antes de que perdiera la vista, la que no le temía a ningún desafío y jamás se rendía.
Por fín, Susan decidió que estaba lista para hacer el intento de viajar sola.
Llegó la mañana del lunes y, antes de irse, ella abrazó a Mark, quien era su compañero de viajes en ómnibus, su esposo, y su mejor amigo.
Tenía los ojos llenos de lágrimas de gratitud por su lealtad, su paciencia y su amor.
Se despidieron y, por primera vez, cada uno tomó un camino distinto. Lunes, martes, miércoles, jueves… todos los días le fue muy bien, y Susan jamás se sintió mejor ¡Lo estaba haciendo! ¡Estaba yendo a trabajar por su cuenta!
El viernes por la mañana, Susan tomó el ómnibus como de costumbre.
Al pagar el boleto, el conductor le dijo: “Caramba, de veras la envidio”.
Susan no supo si le estaba hablando a ella o no.
Después de todo, ¿quién iba a envidiar a una ciega que había encontrado el coraje de vivir durante el año anterior?
Intrigada preguntó al conductor: “¿Por qué dice que me envidia?”, el conductor respondió: “¿Sabe? todas las mañanas durante la semana pasada, un caballero de muy buen aspecto, con uniforme militar, ha estado parado en la esquina de enfrente, observándola mientras usted baja del ómnibus. Se asegura que cruce bien la calle y la vigila hasta que entra en su edificio de oficinas. Luego le envía un beso, le hace un pequeño gesto de saludo y se va.
Usted es una mujer afortunada.
  Lágrimas de felicidad rodaron por las mejillas de Susan.
Porque aunque ella no podía verlo físicamente siempre había sentido la presencia de Mark.
Era afortunada, muy afortunada, pues él le había hecho un regalo más poderoso que la vista,un regalo que ella no necesitaba ver para creer en su existencia.
El regalo del amor que puede llevar la luz donde hay oscuridad.

Realmente es maravilloso un amor asi y ustedes que me dicen?

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