LAS PROPIEDADES DE LAS PIEDRAS

LAS PROPIEDADES DE LAS PIEDRAS

    Nos dedicaremos ahora a detallar las distintas formas que el Esoterismo y la Parapsicología modernas instrumentan la Gemoterapia; las mismas, van desde métodos tan disímiles como colocar gemas sobre las fotos de las personas que queremos ayudar hasta la ingesta de aquéllas. He seguido personalmente un caso de un caballero con un tumor estomacal, por principios filosóficos reticente a los abordajes traumáticos como la cirugía, quien para combatirlo, a lo largo de tres meses, diariamente ingería un pequeño rubí, lo defecaba, lo recuperaba de entre las heces, lo esterilizaba y lo volvía a tragar, así tantas veces hasta que, reduciéndose de tamaño, ya le fue imposible recuperarlo. Pero no importaba: para ese momento, el tumor había desaparecido.

    Lo que en cambio nos ocupará aquí será la descripción pormenorizada de los efectos de las distintas piedras. Las he seleccionado (pues son miles de clases distintas) en orden a los siguientes criterios: que sus efectos hayan sido comprobados, que sean fácilmente obtenibles en el mercado y que su uso no requiera complejos conocimientos técnicos ni preparaciones espirituales superiores.

CRISTAL DE ROCA: Se corresponde con cualquier chakra. Potencia las respuestas energéticas en cualquier situación. Combate la agitación y la tensión. Vence ansiedades y capta energías positivas. Ayuda a las personas que padecen vértigos, diarreas y hemorragias.

DIAMANTE: Refuerza el aura protegiendo contra energías negativas. Actúa eficazmente contra los envenenamientos. Ayuda a transformarnos interiormente y lograr la unidad dentro de nosotros mismos. Energetiza cualquier chakra.

RUBÍ: Se corresponde con el chakra sacro-coccígeo. Estimula e intensifica las fuerzas vitales del cuerpo gracias a un mejor fluir de la bio-energía. Protege de los falsos alumbramientos. Emite radiaciones que eliminan las causas espirituales de las enfermedades que degeneran los tejidos celulares.

CORAL ROJO: Corresponde al mismo chakra. Actúa con eficacia en los casos de desnutrición, hipotermia, anemia y letargo. Alivia durante las menstruaciones y los cólicos. Influye en el carácter haciéndolo más adaptable y flexible.

CORAL BLANCO: Vibra en la frecuencia del chakra esplénico. Favorece la relación con los demás, influye en disipar la agresividad del entorno y facilita las actividades energéticas del plano económico.

CUARZO BLANCO: Es un acumulador –igual a todo color de cuarzo– de las más altas vibraciones del  “chi” o energía vital universal. Nos introduce en los planos más elevados de la meditación. Corrección al chakra coronario.

CUARZO ROSA: Activa y enlaza las emanaciones del chakra cardíaco teniendo por consiguiente y en el plano de lo físico, efectos benéficos en el sistema circulatorio sanguíneo y el corazón, y en lo emocional, adecuadamente programado, favorece las relaciones de pareja.

CUARZO VERDE: Absorbe y elimina las energías negativas del ambiente, de forma que al usarlo de manera personal se transforma en una eficaz “esponja” de las malas vibraciones del entorno, y contando con un trozo de regulares dimensiones depura los ambientes de la vivienda de esas mismas irradiaciones. Por consiguiente, hay que descargarlo con más frecuencia que la habitual en otras gemas. Se corresponde al chakra laríngeo.

CUARZO AHUMADO: El más difícil de conseguir, debe su particular tono “fumée” al precipitado de sulfito de hierro durante su cristalización. Vibra en la frecuencia del chakra del entrecejo, desarrollando el pensamiento analítico profundo, la capacidad de comprensión y de expresión. En lo orgánico, previene de cefaleas, migrañas, jaquecas, meningitis, aneurismas cerebrales y apoplejía.

GRANATE: Corresponde al chakra sacro-coccígeo. Estimula la función sexual, ayuda a superar las enfermedades de los órganos genitales, actúa con eficacia en los casos de depresión, reumatismo y artritis. Eleva el espíritu por encima de la pasión para alcanzar la pureza de corazón. Estimula la creatividad y facilita establecer nuevas relaciones amorosas.

JASPE ROJO: También vinculado al chakra sacro-coccígeo, favorece la recepción de las energías telúricas positivas, eficaz para enfermedades gástricas, hepáticas e infecciosas, fortalece la vesícula biliar y la vejiga.

PIEDRA DE SANGRE: Mismo chakra, estimula en el hombre la irrigación sanguínea a los vasos cavernosos.

CORNALINA: Se compadece con el chakra umbilical, otorga estabilidad, facilita al individuo centrarse psicológicamente, influye en la ingestión y asimilación de los alimentos, depura la sangre y facilita la coagulación. Brinda una sensación de bienestar espiritual.

ÓPALO DE FUEGO: Empatiza con todos los chakras. Disuelve toda forma de cristalización astral en el organismo. Permite acceder más fácilmente a nuestro yo interior, redescubrimiento nuestras emociones.

TOPACIO AMARILLO: Vibra en la frecuencia del chakra esplénico. Equilibra el sistema nervioso, actúa de manera benefactora sobre la columna vertebral, desintoxica en general el organismo, favorece el flujo del dinero hacia nosotros (entendido como energía).

TOPACIO ROJO: Corresponde al chakra cardíaco. Protege el plexo solar, fortifica el corazón.

TOPACIO AZUL: Se corresponde al chakra esplénico. Regenera los tejidos, proporciona pensamientos claros.

TOPACIO VERDE: Chakra cardíaco. Favorece el funcionamiento de los pulmones y el ingreso de energía al organismo a través de la respiración (pranayama).

ÁMBAR: También chakra cardíaco. Limpia y purifica todo el organismo, estimula el funcionamiento del sistema digestivo y endócrino. Actúa eficazmente en caso de asma y en general en enfermedades psicosomáticas. Otorga fuerza espiritual, sabiduría y paz.

CITRINO: Se corresponde también con el plexo solar. Los tonos pálidos contribuyen a la purificación de las glándulas de secreción endócrina, los oscuros suprimen las energías negativas que, en forma de miedos, temores o fobias, bloquean el plexo solar. Ayuda en caso de diabetes. Purifica la piel. Combate enérgicamente la depresión. Ayuda psicológicamente en los negocios.

RUBELITA: Mismo chakra, equilibra el organismo en todos los niveles.

TURMALINA: Ídem plexo solar, aleja las malas ondas, atrae inspiración, amistades sinceras y buena voluntad, estimula la auto-confianza, ayuda a soportar el dolor espiritual. Ayuda a modificar favorablemente la estructura celular y a prevenir el cáncer en todas sus manifestaciones, en virtud de sus vibraciones armónicas cuya influencia impide el crecimiento de células anárquicas.

RODOCROSITA: También llamada “rosa del lnca”, se relaciona con el chakra cardíaco, favorece la integración de los aspectos físico, emocional e intelectual, es un excelente conductor de energía cósmica.

ESMERALDA: Fortalece la glándula tiroides en particular y la garganta en general, por lo que se corresponde con el chakra laríngeo. Protector durante los viajes, incrementa el intelecto y la memoria, ayuda al desarrollo de un cuerpo armonioso, regenera y renueva las células, permite acceder a logros materiales por estimular la comprensión de los mecanismos ocultos de la realidad que nos rodea.

PIEDRA LUNAR: Se corresponde con el chakra del entrecejo, calma las reacciones emotivas excesivas, armoniza el crecimiento y la fuerza interiores.

ÓPALO: Si bien armoniza con todos los chakras y su efecto es armonizar en general, en especial el de color negro estimula la clarividencia en particular y los distintos fenómenos de percepción extra-sensorial en general.

PERLA: Corresponde al chakra del entrecejo. Favorece a los organismos carentes de calcio, invita al sacrificio permitiéndonos a través de él acceder al amor infinito. Favorece la transmutación alquímica de nuestro espíritu.

TURMALINA NEGRA: Afín a todos los chakras. Excelente escudo contra todas las energías negativas, ayuda a esclarecer e interpretar los sueños.

ÓNIX NEGRO: Corresponde al chakra del entrecejo, favorece la fenomenología paranormal, estimula el sentido de responsabilidad ante la vida y la estabilidad emocional.

 

ÓNIX VERDE: Protege ojos, dentadura y cabellos, así como de la envidia.

ÓNIX MARRÓN: Buena para la concentración y los pensamientos positivos. Se emplea para el chakra del entrecejo.

AMATISTA: Protege contra la embriaguez, estimula el raciocinio. Pertenece al chakra del entrecejo, da coraje, en la casa estimula el crecimiento de plantas y protege al dinero que entra a través del trabajo.

HEMATITE: Trabaja con todos los chakras. Combate la anemia, da valor, aumenta la resistencia al estrés, favorece la circulación del oxígeno por el organismo. Combate el desánimo y el insomnio.

ZAFIRO AZUL: Corresponde al chakra umbilical. Protege contra intoxicaciones, incrementa la profundidad del intelecto, ordena el funcionamiento de los intestinos.

BERILO ROSA: Se adecua a todos los chakras. Protege de infecciones y otorga perseverancia.

JADE: Se aplica al chakra coronario. Estimula el contacto mental y espiritual con seres y planos superiores.

AGUAMARINA: Compatible con todos los chakras. Además de estimular la percepción extrasensorial, es ideal para aplicar sobre contusiones y hematomas, también de suavizar problemas emocionales, armonizar ambientes intranquilos y clarificar los propios pensamientos.

ÁGATA MARRÓN: Se corresponde al chakra coronario, da elevación mental y refuerza los mecanismos de protección espiritual. En la vivienda, impide las condensaciones astrales de baja vibración.

ÁGATA VERDE: Corresponde al chakra cardíaco. Fortalece el corazón, da coraje y vitalidad, ilumina la mente, disminuye la fiebre y alivia el estrés.

ÁGATA AZUL: Incentiva el amor, llama la riqueza, transmite serenidad, combate el insomnio, estimula la sexualidad del sexo opuesto a quien lo lleva. Compatible con todos los chakras.

MALAQUITA: Corresponde al chakra sacro-coccígeo, da alegría de vivir, incrementa el placer sexual, además de estimular el pensamiento práctico y concreto.

LAPIZLÁZULI:  Perteneciente al chakra umbilical, equilibra el funcionamiento glandular, favorece la reflexión y la capacidad de análisis, otorga resistencia mental.

TURQUESA: Chakra del entrecejo, es increíblemente efectiva para eliminar residuos psíquicos y proteger a quien la usa del vampirismo energético.

SODALITA: Compatible con todos los chakras, induce a la autocrítica y da capacidad de auto-observación; benéfica para el sistema inmunológico y protege de radiaciones telúricas negativas.

OJO DE TIGRE: También armónica con todos los chakras, da equilibrio emocional y protege el aparato digestivo.

PIRITA: También útil en todos los chakras, es buena para el sistema circulatorio y respiratorio, mejora la capacidad mental, reduce la ansiedad.

HIERRO METEORÍTICO: Mismos efectos y usos que la pirita.

MADERA PETRIFICADA: Útil más para viviendas que compatible con algún chakra en particular, protege a sus moradores de ataques psíquicos, favorece la consecución de logros materiales y, usada en permanente proximidad, favorece a personas con arteriosclerosis, reumatismo y artritis.

    De este listado se infiere que aunque muchas piedras comentadas no son estrictamente “gemas” (es decir, con alto valor comercial) un tratado de esta naturaleza no estaría completo sin su mención; lo mismo ocurre con aquellas que no son estrictamente de origen mineral no biológico; tal el caso del coral (que es en realidad el exoesqueleto de un molusco), el ámbar (la savia resinosa de ciertas coníferas prehistóricas), la perla  (la protección calcárea que la ostra hace sobre las impurezas que penetran en su caparazón) y la madera petrificada (que es la calcificación progresiva y destructiva de árboles con millares de años de antigüedad).

    Un largo detalle de otras piedras con efectos gemoterapéuticos no la facilitamos aquí, en función de ser curiosidades de geólogos difícilmente obtenibles, como el olivino, el rutilo, la verdelita, la wulfenita, la esfalerita, el diópsido, el alabastro, la estaurolita, la vesubiana, la garnierita, la lumaquela, el cuarzo azul, la aragonita, el copal (incienso sagrado de los mayas), la hemimorfita, la crisoprasa, la cerusita, etc.

    Pero sí es interesante hacer un detalle de las gemas más armónicas con cada signo zodiacal, entendiendo que su empleo frecuente potenciará de ese signo lo positivo y minimizará lo negativo. También es muy útil portar encima la piedra correspondiente al Ascendente astrológico de cada uno:

ARIES: amatista, diamante, rubí, aguamarina, cornalina, cristal de roca.

TAURO: coral, zafiro, jade, esmeralda, diamante, aguamarina, cristal de roca.

GÉMINIS: topacio amarillo, turmalina, aguamarina, esmeralda, ópalo, jade, ámbar.

CANCER: ópalo, esmeralda, perla, piedra lunar, ágata, ónix negro, cristal de roca, amatista.

LEO: brillante, granate, feldespato, cuarzo rosal, rubelita, diamante, cornalina.

VIRGO: esmeralda, topacio, ópalo, turmalina, coral blanco, berilo rosa, rodocrosita, cornalina, ámbar, amatista.

LIBRA: ágata, zafiro, jade, coral, ópalo, berilo rosa, ónix rosa, rodocrosita.

ESCORPIO: rubí, aguamarina, coral rojo, granate, topacio rojo, jade, ópalo, cornalina, ónix verde.

SAGITARIO: brillante, lapizlázuli, zafiro, topacio azul, turquesa, amatista, ámbar.

CAPRICORNIO: ónix blanco, ámbar, zafiro, perla negra, turquesa.

ACUARIO: circón, turmalina, amatista, granate, zafiro, turquesa, cornalina, ámbar.

PISCIS: amatista, ópalo, aguamarina, piedra lunar, zafiro, cristal de roca.

    Como se observará, esta tabla dispersa el viejo mito de que a cada signo zodiacal le corresponde sólo una piedra, siendo entonces varias las que para usted le serán útiles por tener afinidades vibratorias.