Todos tienen el poder de elegir

A lo largo del día
el viento cambia de dirección
cien veces o más.
No tiene otro propósito
ni objetivo más que ser
tan sólo lo que es.

El viento es libre para ir y venir
como le plazca.
Pero las personas, por el contrario,
tienen una necesidad interior
que satisfacer, que concretar,
que cumplir.

Es una cualidad humana
que permite a las personas
elegir qué camino tomar
y decidir si su viaje será
rápido o lento.

Las personas tienen
el poder de elegir
los senderos que habrán
de transitar.
Nunca deben olvidar
que tienen el control de sus vidas.

Así que deja que el viento
te de en la cara
y haga un círculo a tu alrededor
mientras vives cada día.

Pero debes saber, en lo más profundo de tu corazón,
que eres el único, realmente el único
que sabe en qué dirección
sopla el viento para tí.