Sólo los límites de nuestro pensamiento

De: LUNA200620  (Mensaje original) Enviado: 02/08/2006 8:44
 
Sólo los límites de nuestro pensamiento humano hacen que algo parezca bueno o malo. Un suceso de nuestra vida no es bueno o malo por naturaleza, sencillamente es. Pero nuestra humana tendencia a controlar las cosas nos lleva a ponerles una etiqueta. En realidad no hay sucesos buenos ni tampoco los hay malos si has ahondado en el meollo del funcionamiento del mundo. Todo lo que sucede es sencillamente una oportunidad para crecer y curar una parte tuya que necesita de curación.
Cada día, a medida que entras en el mundo, en realidad estás yendo a la escuela. Y como en las escuelas tradicionales, hay un plan de estudios con diversos cursos que ofrecen distintas lecciones. Y una vez que apruebas un curso aprendiendo sus lecciones, pasas al curso siguiente. Si no apruebas la lección entonces repites el curso. Esto se llama reciclamiento. Cada experiencia que se cruza en tu vida te enseña la lección que más necesitas aprender para acceder a la siguiente plataforma de tu vida. El profesor siempre aparece cuando el alumno está a punto.

Si comprendes el proceso y adviertes la oportunidad de una lección en cada situación, puedes pasar al curso siguiente. Y al dejar el curso anterior también dejas la vida anterior. Una vez que recibes la lección necesaria, el tipo de persona o de situación en que venía envuelta esa lección nunca volverá a presentarse. Es casi como si dejáramos una piel vieja cada vez que recibimos una lección nueva, aprobamos un curso nuevo y pasamos al siguiente y a sectores más altos del sendero de nuestra vida.

Pero si no aceptas el aprendizaje que representa la experiencia, digamos que porque culpas a la otra persona por lo que sucede, y no ves el punto de sabiduría que estabas destinado a aprender, las circunstancias continuarán repitiéndose o reciclándose en tu vida hasta que finalmente las comprendas. Y mientras menos comprendas las lecciones que se te presentan, más doloroso será el suceso que te las traiga hasta que llegue el momento en que lo será tanto que sólo podrás aceptarlo y comprenderlo sin más opción.

Tu realidad actual no es más que un reflejo completo de las lecciones que más necesitas aprender. Y como aprendes mucho más de lo que no está funcionando en tu vida que de lo que funciona, todo lo que no funciona es un don. Como descubres más de ti mismo gracias al fracaso que gracias al éxito, haz del fracaso tu amigo, valóralo y aprende de él. Crea alegría gracias a él.

Cada cosa que no soportas en tu vida, cada cosa que te irrita en tus días, cada cosa que te produce estrés, es un profesor muy importante. Las cosas que te presionan te ofrecen las mejores claves para saber qué necesita crecer y evolucionar en ti. Las cosas que no te gustan en la vida, las que te irritan o te estresan, no son más que vehículos que llevan las lecciones que necesitas aprender para aprobar el curso en que estás actualmente y pasar al siguiente.

Todas las cosas que no te gustan en tu vida son en realidad tus mejores amigos y profesores clave porque te ayudan a llegar a tu destino, a tu vida ideal y a tu persona más elevada. La vida es una extraordinaria escuela de crecimiento y que todo lo que te sucede es casi divino. Es un planteamiento verdaderamente asombroso, pero así funciona en realidad nuestro universo.

Si la lección que más necesitas aprender en cierta etapa de tu vida es la aceptación, observarás que entra  en tu vida una corriente continua de personas que te enloquecerán. O si tu lección es acerca de controlar menos, notarás que aparece una serie de gente controladora. Si no estás alerta y no sabes que esto es lo que está sucediendo y rehúsas la responsabilidad personal sobre tu papel en los guiones que estás incorporando a tu vida, entonces esa clase de gente continuará apareciendo en tu vida, y cada vez de un modo más doloroso, hasta que veas tu papel y tu oportunidad de avanzar en cada interacción.

Sólo cuando te haces responsable en cada instancia de tu vida puedes crecer y tu vida puede mejorar. Y entonces esa clase de personas y situaciones dejará de manifestarse en tu vida. Una vez que recibes una lección, varias cosas pueden suceder. Esta clase de personas puede dejar de aparecer con la frecuencia que lo hacía, porque acudían a ti como maestros y ya está hecho el trabajo. La conducta de esas personas puede cambiar drásticamente, y de súbito te parecerán las personas más amables y amistosas que hayas conocido.

Al dejar de culparlas, como la mayoría de nosotros tiende a hacer en esas situaciones, y al trabajar en ti mismo y apartar los obstáculos que había que apartar en ti mismo, has creado poderosamente un espacio para que ellos sean las mejores personas en las situaciones que anteriormente los hacían difíciles. La gente es esencialmente buena y si la tratas con amor incondicional y comprensión en lugar de atacarla, sólo puede responder de manera más amable y espiritual que antes. Ante el verdadero amor y el cariño profundo no hay ser humano que pueda mantenerse al margen del corazón. Todas las sombras mueren en la luz.

El antídoto del miedo es el amor. Cuando tomas algo de distancia en una situación tensa y ves que la persona que está actuando con dureza en realidad te está implorando ayuda porque está asustada o se siente muy herida, resulta fácil entregar amor. Nunca olvides que inmediatamente antes de que una persona reaccione encolerizada o de una manera no amable, esa persona se ha sentido herida. Es un punto muy importante. Las personas que montan en cólera porque antes han sido heridas necesitan de tu cariño, no de tu condena. Recuerda que si les entregas el amor que toda persona anhela, su mejor persona va a aflorar porque habrás creado un espacio seguro para que pueda brillar. Cuando cambias, los otros cambian automáticamente, porque les has dado un espacio para crecer.

¡¡¡Que el Amor y la Luz de Dios iluminen tus pasos hoy y siempre!!!