FALLAS DE LA BIBLIA 40

FALLAS DE LA BIBLIA
por Dennis McKinsey

Número 40
Abril de 1986

COMENTARIO

JESÚS VERSUS PABLO (Parte 1 de 3)

Jesús, Pablo y Pedro son tres de los personajes más importantes del Nuevo Testamento, pero hay que ver hasta qué punto divergen sus enseñanzas. Pedro difiere de Jesús y Pablo en muchos puntos, mientras que estos dos últimos con frecuencia se contradicen mutuamente. Como en el programa de televisión To Tell the Truth, uno no puede evitar decir: “¿La verdadera voz del cristianismo quisiera ponerse de pie?”. Pablo afirma hablar por Jesús, ser su voz (“Verdad digo en Cristo, no miento…”) en Romanos 9:1 y 1 Timoteo 2:7, (“Es la verdad de Cristo en mí…”) en 2 Corintios 11:10 y (“Pues buscáis una prueba de Cristo que habla en mí…”) en 2 Corintios 13:3), a pesar de la abundante evidencia en contra:

1) Jesús: “… Por el camino de los Gentiles no iréis…” (Mateo 10:5), “… No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel” (Mateo 15:24) y “… porque la salvación viene de los judíos” (Juan 4:22)
Versus:
Pablo: “Porque así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de los Gentiles, para que seas salvación hasta lo postrero de la tierra” (Hechos 13:47), “… desde ahora me iré a los Gentiles” (Hechos 18:6), “… a los Gentiles es enviada esta salvación de Dios: y ellos oirán” (Hechos 28:28), “Para ser ministro de Jesucristo a los Gentiles…” (Romanos 15:16) y “A mí […] es dada esta gracia de anunciar entre los Gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo” (Efesios 3:8). (Ver también Hechos 20:21, 26:17-18, 20, 23, 22:21, Romanos 1:5, 13, 3:29, 11:11-13, 15:9, Gálatas 2:2, 7-9, 3:14, Efesios 3:6, 1 Timoteo 2:7, 3:16, 2 Timoteo 4:17.)
Jesús les dijo a sus seguidores que no fueran adonde los gentiles y Pablo contravino la orden.

2) Jesús: “No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas: no he venido para abrogar, sino a cumplir. Porque de cierto os digo, que hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas. De manera que cualquiera que infringiere uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñare a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos…” (Mateo 5:17-19), “… más fácil cosa es pasar el cielo y la tierra, que frustrarse una tilde de la ley” (Lucas 16:17) y “… Sobre la cátedra de Moisés se sentaron los escribas y los fariseos: Así que, todo lo que os dijeren que guardéis, guardadlo y hacedlo…” (Mateo 23:2-3). (Ver también Juan 7:19, Marcos 1:44).
Versus:
Pablo: “Así también vosotros, hermanos míos, estáis muertos a la ley por el cuerpo de Cristo…” (Romanos 7:4), “Cristo nos redimió de la maldición de la ley…” (Gálatas 3:13), “Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia” (Romanos 6:14) y “Mas ahora estamos libres de la ley, habiendo muerto a aquella en la cual estábamos detenidos, para que sirvamos en novedad de espíritu, y no en vejez de letra” (Romanos 7:6). (Ver también Romanos 10:4, 3:28, Gálatas 3:23-25, 5:2-4, 18, 2:16, 19, 21, 4:9-10, Efesios 2:15, Colosenses 2:14, 16, Hebreos 7:19, 1 Corintios 8:8 y muchos otros.)
Jesús dijo que la ley permanecería hasta el fin del cielo y la tierra, mientras que Pablo dijo que ya no había que obedecerla.

3) Jesús: “… Por el camino de los Gentiles no iréis, y en ciudad de Samaritanos no entréis” (Mateo 10:5)
Versus:
Pablo: “… [Pablo y Bernabé] pasaron por la Fenicia y Samaria, contando la conversión de los Gentiles…” (Hechos 15:3)
Jesús dijo que no debía predicarse en Samaria, orden que Pablo prefirió ignorar.

4) Jesús: “Por tanto, id, y doctrinad a todos las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19)
Versus:
Pablo: “Porque no me envió Cristo á bautizar, sino a predicar el evangelio…” (1 Corintios 1:17).
Bautizar o no bautizar, ésa es la cuestión.

5) Jesús: “… cualquiera que dijere, Necio, será culpado del infierno del fuego” (Mateo 5:22)
Versus:
Pablo: “Necio, lo que tú siembras no se vivifica, si no muriere antes” (1 Corintios 15:36), “¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó (…)?” (Gálatas 3:1) y “Nosotros necios por amor de Cristo…” (1 Corintios 4:10). (Ver también Romanos 1:22, 1 Corintios 3:18.)
No parece que a Pablo le resulte “necio” una palabra peligrosa, ni que el fuego del infierno le atemorice.

6) Pablo: “… vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí” (Gálatas 2:20), “El cual se dió a sí mismo por nuestros pecados…” (Gálatas 1:3), “Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros…” (Efesios 5:2) y “… como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella” (Efesios 5:25). (Ver también 1 Timoteo 2:6, Tito 2:14, Hebreos 7:27, 9:14.)
Versus:
Jesús: “… Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?” (Mateo 27.46, Marcos 15:34) y “… Mi alma está muy triste hasta la muerte […] Padre mío, si es posible, pase de mí este cáliz…” (Mateo 26:38-39). La palabra hebrea para “cáliz” significa realmente “destino” o, en este caso, “muerte”. Si Jesús se entregó gustoso como sacrificio por todos, nunca lo sabríamos por sus palabras.

7) Pablo: “Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa” (Efesios 6:2)
Versus:
Jesús: “Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su vida, no puede ser mi discípulo” (Lucas 14:26).

8) Pablo: “Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos limpias…” (1 Timoteo 2:8)
Versus:
Jesús: “Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en las sinagogas, y en los cantones de las calles en pie, para ser vistos de los hombres […] Mas tú, cuando ores, éntrate en tu cámara, y cerrada tu puerta, ora a tu Padre que está en secreto…” (Mateo 6:5-6).
Quienes quieren promover la oración en las escuelas públicas deberían seguir a Pablo, no a Jesús.

9) Jesús: “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra” (Mateo 28:18)
Versus:
Pablo: “A aquel inicuo, cuyo advenimiento es según operación de Satanás, con todo poder, y señales, y milagros mentirosos” (2 Tesalonicenses 2:9)
¿Quién tiene todo el poder? ¿Jesús o el inicuo?

10) Pablo: “En [Jesús] están escondidos todos los tesoros de sabiduría y conocimiento” (Colosenses 2:3)
Versus:
Jesús: “Empero de aquel día y de la hora, nadie sabe; ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo…” (Marcos 13:32)
Al parecer, Jesús se creía menos sabio de lo que Pablo decía.

11) Jesús: “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todas las cosas que os he dicho” (Juan 14:26)
Versus:
Pablo: “Empero viniendo Pedro a Antioquía, le resistí en la cara, porque era de condenar. Porque antes que viniesen unos de parte de Santiago, comía con los Gentiles; mas después que vinieron, se retraía y apartaba, teniendo miedo de los que eran de la circuncisión. Y a su disimulación consentían también los otros judíos; de tal manera que aun Bernabé fué también llevado de ellos en su simulación. Mas cuando vi que no andaban derechamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los Gentiles y no como judío, ¿por qué constriñes a los Gentiles a judaizar?” (Gálatas 2:11-14) y “Porque me ha sido declarado de vosotros, hermanos míos, por los que son de Cloé, que hay entre vosotros contiendas; quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo cierto soy de Pablo; pues yo de Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo. ¿Está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo por vosotros? ¿O habéis sido bautizados en el nombre de Pablo?” (1 Corintios 1:11-13)
El Espíritu Santo no debió de haber llegado a Pedro y Pablo. Parece que también les faltó a algunos hermanos.

12) Pablo: “Y de todo lo que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en éste es justificado todo aquel que creyere” (Hechos 13:39)
Versus:
Jesús: “… mas cualquiera que hablare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este tiempo, ni en el venidero” (Mateo 12:32) y “Mas cualquiera que blasfemare contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, mas está expuesto a eterno juicio” (Marcos 3:29).
Según Jesús, uno no puede ser justificado de todas las cosas.

13) Jesús: “… porque cualquiera que se ensalza, será humillado; y el que se humilla, será ensalzado” (Lucas 18:14)
Versus:
Pablo: “Cierto pienso que en nada he sido inferior a aquellos grandes apóstoles” (2 Corintios 11:5), “Heme hecho un necio en gloriarme: vosotros me constreñisteis; pues yo había de ser alabado de vosotros: porque en nada he sido menos que los sumos apóstoles, aunque soy nada” (2 Corintios 12:11) y “Lo que hablo, no lo hablo según el Señor, sino como en locura, con esta confianza de gloria. Pues que muchos se glorían según la carne, también yo me gloriaré” (2 Corintios 11:17-18)
Parece que Pablo tampoco tenía miedo de ser humillado.

14) Pablo: “Porque es menester que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo…” (2 Corintios 5:10)
Versus:
Jesús: “Vosotros según la carne juzgáis; mas yo no juzgo a nadie” (Juan 8:15), “… ¿quién me puso por juez o partidor sobre vosotros?” (Lucas 12:14) y “… porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo” (Juan 12:47, 8:50)
Alguien tenía que avisarle a Pablo que Jesús no quería el trabajo.

15) Pablo: “[Jesús], siendo en forma de Dios, no tuvo por usurpación ser igual a Dios” (Filipenses 2:6) y “Porque en él habita toda la plenitud de la divinidad corporalmente” (Colosenses 2:9)
Versus:
Jesús: “… porque el Padre mayor es que yo” (Juan 14:28) y “… Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios” (Juan 20:17).
Pablo puede considerar a Jesús equivalente a Dios, pero claramente Jesús no piensa así.

16) Jesús: “… Para con los hombres imposible es esto; mas para con Dios todo es posible” (Mateo 19:26)
Versus:
Pablo: “… es imposible que Dios mienta…” (Hebreos 6:18)

17) Jesús: “… Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo…” (Mateo 19:21)
Versus:
Pablo: “Porque cada cual llevará su carga” (Gálatas 6:5)
Uno no puede evitar preguntarse por qué estamos obligados a ayudar a los pobres, si cada uno debe llevar su propia carga.

DIÁLOGO Y DEBATE

[cartas que Biblical Errancy recibió durante la época de su distribución original en inglés]

De V. T. en of Huron, California

[V. T. nos ha escrito muchas cartas con respecto a la longitud de un camino de sábado, y ahora dice tener evidencia sólida que demuestra que medía 2.000 codos de largo como producto de una ordenanza rabínica vinculante. En su carta publicada en nuestro número 35, le pedimos a V. T. que nos proporcionara esa información. Con ese fin, nos envió copia de una carta que recibió de la Christian Jew Foundation, fotocopias de algunas páginas de la Mishná de Herbert Danby y una definición del camino de sábado del Interpreter’s Dictionary.]
Saludos. Adjunta está la información que prometí conseguir […] No, señor, esa ordenanza o ley no se opone al Antiguo Testamento. La literatura judía/hebrea abunda en referencias a la legislación sobre el sábado […] El material que le he enviado se explica por sí mismo, de modo que no necesito entrar en más detalles. Realmente creo que, con la carta de la Christian Jew Foundation, la página del diccionario y las páginas de la Mishná usted deberá quedar satisfecho […] Pedir PRUEBAS DOCUMENTALES adicionales sería para mí señal de que los árboles no le dejan ver el bosque […] Pedir PRUEBAS dicionales sería (creo yo) incuestionablemente absurdo. Negar que ha recibido LOS HECHOS es simple y LLANAMENTE EVADIR LA CUESTIÓN.

Respuesta del Editor

Saludos. De cierto modo, V. T., no creo que usted esté tan interesado en la precisión académica como en hacerme darme por vencido. Ha involucrado su ego y por eso este problemita ha alcanzado dimensiones casi obsesivas. Francamente, estoy casi dispuesto a darme por vencido si eso nos permite avanzar a temas de más sustancia. Confío en que usted se dé cuenta de que está usando una estrategia que los dos podemos jugar. A diferencia de usted, yo nunca he acosado o importunado a un crítico de nuestra revista, pero su caso mereced una excepción. En Fallas de la Biblia he hecho decenas de preguntas importantes y usted ha decidido ignorarlas todas. En cambio, se ha enfocado en un punto relativamente menor en un vano intento por desacreditarme. Así que déjeme hacerle algunas preguntas que sí tocan puntos importantes: 1) ¿Por qué se nos castiga por el comportamiento de Adán y Eva, teniendo en cuenta Deuteronomio 24:16? 2) Si aceptar a Jesús es condición sine qua non para la salvación, ¿cómo se pueden salvar los bebés, los enfermos mentales y quienes habitaban las Américas antes de la llegada de los misioneros? 3) Si Dios es perfecto, todo lo que creó es perfecto. ¿Cómo, entonces, pudo pecar Adán? 4) Si Dios lo creó todo, ¿por qué no es él la fuente del mal? 5) ¿Qué hizo Jesús para probar que él era el Mesías? 6) ¿Cómo Dios en la cruz pudo hablar con Dios en otra parte, cuando sólo hay un dios? ¿Tiene respuestas a estos interrogantes, V. T.? ¡Sí o no! Si las tiene, soy todo oídos. Si no, entonces tenga la honestidad de admitirlo. Pero no intente arrastrar la atención del lector a algún punto remoto en los bordes de la discusión. Después de que se haya ocupado de esos dilemas, le tengo preparados muchos más. Y sigo esperando los libros de geografía que mencionó en su carta y que supuestamente refutan mi comentario geográfico extrabíblico del número 34.

Con respecto al problema del camino de sábado en sí, todavía no veo una ordenanza real en los documentos que me envió. Veo comentarios sobre el camino de sábado en el Erubin de la Mishná -la ley oral- y una definición interpretativa en la hoja de su diccionario, pero, ¿dónde están el capítulo y verso que solicité? Los documentos que me ha estado enviando se componen de opiniones, creencias y conclusiones académicas variables sobre lo que constituye el camino de un sábado, pero, ¿dónde está la evidencia que muestra que el camino de un sábado que estamos discutiendo es algo más que una tradición oral? Dice usted en su carta que estas leyes, tanto la ORAL como la ESCRITA, SON VINCULANTES. ¿Quiere decir que la Mishná tiene el mismo peso que los cinco primeros libros de la Biblia, la Torá? ¡Incluso los papeles que me envió niegan eso! Parte de su libro, la Mishná, hace varias afirmaciones cruciales al respecto: a) “La Mishná, o la compilación de leyes orales hecha a finales del siglo segundo D.C., está en segundo lugar sólo frente a las Escrituras Hebreas como creación nacional-religiosa judía…” b) “La Mishná es comparable en importancia a la literatura apócrifa y pseudoepígrafa, así como a las obras de Josefo…” c) “La Mishná es, después del Sinaí, el hito más grande de la historia del judaísmo”. Su documentación también muestra que los saduceos no consideraban igualmente vinculantes la ley escrita y la oral. En las páginas 19 y 20 de la Introducción aparecen los siguientes comentarios: “… los saduceos dicen que debemos valorar como obligatorias las observancias que están en la Palabra Escrita, pero que no debemos observar las que se derivan de la tradición de nuestros antepasados” y “… los saduceos presentan la tesis de que sólo la Ley Escrita tenía autoridad, y que la ley tradicional no era vinculante”. Todas estas citas muestran claramente que la Mishná, la tradición oral, era de importancia secundaria frente a la ley escrita. La cuestión, entonces, viene a ser el decidir a quién seguir cuando estas leyes chocan. Éxodo 16:29 hace parte de la ley escrita y prohíbe cualquier viaje durante el sábado. Usted, del otro lado, confía en la Mishná, que parece autorizar viajes de hasta dos mil codos, aunque esa cifra varía de un erudito a otro. Así que, en esencia, usted se enfrenta con tres problemas, V. T. 1) ¿Dónde está la ordenanza escrita que pedí en el número 35? 2) ¿Dónde está su evidencia de que la ley escrita y la oral son igualmente vinculantes, en especial cuando sus documentos le dan a la ley oral un peso comparable a los libros apócrifos y los escritos de Josefo? 3) Si puede encontrar una ley escrita real que defina el camino de un sábado, ¿cómo, entonces, la reconcilia con la Torá -la ley suprema- que prohíbe cualquier tipo de viaje en ese día? La carta contra Fallas de la Biblia que le envió la Christian Jew Foundation tiene graves defectos que me gustaría exponer en un número posterior si usted puede demostrar que alguien más estaría interesado.

CARTAS AL EDITOR

De S. O. en Tallahassee, Florida (Parte 1)

[…] Me gustaría mencionar algunas de mis contradicciones bíblicas favoritas. Como usted, llevo un registro de errores bíblicos, así como una lista de las respuestas fundamentalistas correspondientes. Aquí sólo mencionaré dos y añadiré las racionalizaciones más comunes que me suelen dar los creyentes. Primero una del Antiguo Testamento. Esta contradicción es entre 2 Reyes 23:29-30 (“salió contra [el faraón] el rey Josías; pero aquél así que le vio, lo mató en Meguido. Y sus siervos lo pusieron en un carro, y lo trajeron muerto de Meguido a Jerusalén…”) y 2 Crónicas 35:23-27 (“Y los arqueros tiraron al rey Josías flechas; y dijo el rey a sus siervos: Quitadme de aquí, porque estoy herido gravemente. Entonces sus siervos lo quitaron de aquel carro, y le pusieron en otro segundo carro que tenía, y le llevaron a Jerusalén, y murió; y le sepultaron…”). La pregunta es dónde murió el rey Josías. 2 Reyes dice que Josías fue muerto en Meguido y transportado muerto por sus siervos, en un carruaje de Meguido a Jerusalén. 2 Crónicas, del otro lado, dice que Josías sólo fue herido en Meguido y que no murió hasta su regreso a Jerusalén. Ésta es una contradicción clara y precisa a menos, por supuesto, que uno ya esté convencido de que la Biblia está totalmente libre de errores […] La respuesta que a menudo oigo es la usada por el venerable John Haley, quien sostiene que 2 Reyes interpreta incorrectamente la palabra “meth” como “muerto”, cuando realmente debería decir “moribundo”. Así, sostienen los creyentes, no hay contradicción con 2 Crónicas. ¿Sabe usted de alguna réplica a esta evasión de los fundamentalistas?

Respuesta del Editor (Parte 1)

Leí Alleged Discrepancies of the Bible de John Haley hace años y estoy enterado de la racionalización que se encuentra en la página 326: “Davidson, Fuerst, Gesenius y Rawlinson concuerdan en que la palabra “meth” en 2 Reyes 23:30 puede significar moribundo o en curso de morir. Josías fue sacado del campo de batalla en curso de morir; expiró en el camino a Jerusalén”. En efecto, se nos está pidiendo que le creamos a un puñado de académicos a quienes les parece que “meth” debería significar moribundo en vez de muerto, en contra de lo que dicen todos los traductores de las versiones bíblicas que tengo. La King James, Revised Standard, Modern Language, New International, New American Bible, Basic English, New American Standard y New World Translation dicen, todas, que Josías murió en Meguido. Ya estaba muerto antes de salir. El ejemplo que usted nos presenta es representativo de una de las tácticas más comunes pero más débiles del arsenal apologético. Cuando los dilemas se vuelven irresolubles, simplemente se reescribe el texto. Cada una de las versiones que mencioné fue creada por un comité de expertos en griego y hebreo y todos concuerdan en lo que el texto debe decir. Pero los apologetas como Haley quisieran hacernos creer que su propia interpretación o la de unos cuantos colegas suyos representa mejor el griego y el hebreo que la de hombres que han dedicado décadas a la investigación bíblica y han escrito las versiones más ampliamente aceptadas en el mundo angloparlante. Si “meth” significa “moribundo” en vez de “muerto”, entonces alguien tiene problemas con sus lecciones de hebreo, pues la diferencia es tremenda. Tratar de volver sobre el texto y reescribirlo, en especial cuando las versiones más ampliamente aceptadas coinciden, es una treta débil, porque quienes la intentan están queriendo aparecer como más versados en griego y hebreo que los expertos reconocidos en el campo. Si alguien con seis años de estudio de hebreo me dijera que la traducción correcta de una palabra o verso es diferente de la que había estado usando, entonces lo referiré al comité de expertos que estudió hebreo por mucho más de seis años y le dio esa interpretación a la palabra o verso en disputa. Es su versión, no mía. Siempre me intriga el experto autoproclamado que se considera lo suficientemente estudiado en idiomas bíblicos como para decir: “Eso es lo que dice, pero no es lo que quiere decir” o “Eso es lo que dice, pero así no era el original”. Si lo que afirma es cierto, entonces gran parte de las traducciones más ampliamente usadas no son tan confiables como se nos ha hecho creer. De ser así, sugiero que las desechemos y hagamos que alguno de nuestros expertos autoproclamados escriba una versión propia que podamos discutir.

(Parte 2)

La otra contradicción que me gustaría mencionar es el famoso caso de Jesús y la curación del siervo del centurión. Aquí el problema, desde luego, es si Jesús habló en persona con el centurión, como dice claramente Mateo 8:5-8, o si Jesús sólo se encontró con enviados del centurión, como dice Lucas 7:1-7. Ya conozco varias racionalizaciones para ésta. La que se usa con más frecuencia es que Mateo está usando una figura literaria aceptada, la metonimia, cuando dice que el centurión hizo tal cosa a pesar de que la conversación con Jesús involucró realmente a sus enviados. Así piensan los creyentes que han eludido el dilema apelando a alguna vaga noción de metonimia usada por Mateo […] Estoy un tanto inseguro sobre cómo refutar el argumento de la figura literaria.

Respuesta del Editor (Parte 2)

La mejor refutación de la mayoría de las defensas apologéticas es sencillamente leer el texto como uno lee el periódico. Mateo 8:5-7 dice: “Y entrando Jesús en Cafarnaum, vino a él un centurión, rogándole, y diciendo: Señor, mi mozo yace en casa paralítico, gravemente atormentado. Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré”, mientras que Lucas 7:1-7 dice: “Y como acabó todas sus palabras oyéndole el pueblo, entró en Cafarnaum. Y el siervo de un centurión, al cual tenía él en estima, estaba enfermo y a punto de morir. Y como oyó hablar de Jesús, envió a él los ancianos de los judíos, rogándole que viniese y librase a su siervo. Y viniendo ellos a Jesús, rogáronle con diligencia […] Y Jesús fue con ellos. Mas como ya no estuvieran lejos de su casa, envió el centurión amigos a él, diciéndole […] ni aun me tuve por digno de venir a ti.” La claridad de los textos y las contradicciones entre ellos son de lo más obvio. Mateo dice: “vino a él un centurión”, que habló con Jesús. Está claro que el centurión vino por sí mismo. Lucas dice que el centurión “entió a él los ancianos de los judíos” y “viniendo ellos a Jesús, rogáronle”. Ellos, no él. También dice que Jesús “fue con ellos”, no con él, y “envió el centurión amigos a él” cuando Jesús se acercaba a la casa. El punto más fuerte es el comentario del centurión: “ni aun me tuve por digno de venir a ti”. Es difícil imaginar cómo el texto podría ser más claro. La defensa de la metonimia no es más que una variación sobre el común argumento apologético que mencionamos antes: Eso es lo que dice, pero no no es lo que quiere decir. El relato es demasiado simple como para que un observador objetivo concluya otra cosa. El libro dice lo que quiere decir y quiere decir lo que dice. Los apologetas nos harán creer en círculos cuadrados si no tenemos cuidado.

De R. G. B. en Grand Junction, Colorado

Dennis, ¿por qué hace esto? Quiero decir: estoy metido en esto y me gusta leer sobre la religión cristiana. ¿Pero qué lo motiva a meterle a este tema lo que obviamente es un montón de esfuerzo?

Respuesta del Editor

Porque se necesita terriblemente y nadie está llenando el vacío. Decenas de millones de personas están recibiendo una presentación totalmente parcializada de un tema que tiñe su visión sobre todos los temas, desde el tejido con aguja hasta las bombas nucleares. Todo el tiempo se debate sobre política, economía y sociología, pero el tema más importante para millones de personas -la Biblia-, el tema que controla su actitud frente a todo lo demás, permanece sin cuestionamientos, al margen, de cierto modo intocable. Cuando se une esto con el hecho de que el libro contiene una tremenda cantidad de inexactitudes y engaños, se vuelve obligatoria la necesidad de una crítica a fondo. Si hay algún tema que no debe ser sacrosanto, es la Biblia. A un número incalculable de personas se le está haciendo un enorme daño.

De J. B. en Tempe, Arizona

He terminado de leer los números del 1 al 37 de Fallas de la Biblia y me gustaría felicitarlo y ofrecerle todos los ánimos que pueda. Soy el presidente de los estudiantes de Americanos que Promueven la Ciencia Evolutiva (sigla APES en inglés). Fundé esta organización en respuesta a los esfuerzos de los grupos de “ciencia creacionista” que restringen la enseñanza de la evolución en Arizona. Específicamente, la ley habría exigido que la enseñanza de cualquier tema relacionado con el origen del hombre odel universo se hiciera de tal forma que “no disminuya la creencia en la religión”. La medida fue rechazada pero sólo porque uno de nuestros diputados sintió que se quedaba corta. Él quería exigir la enseñanza de “ciencia creacionista” junto a las clases de ciencia. Sé que su revista no tiene una postura sobre la cuestión creación-evolución, y lo felicito por su unidad de tema. Estoy seguro de que ya tiene suficiente material de trabajo. Hasta le recomendaría que, dentro de lo posible, se quedara con lo que tiene en las manos […] Dejarse arrastrar a la contienda creación-evolución sería un error con los fundamentalistas, y su revista me ha parecido muy, muy útil, tanto al debatir con los fundamentalistas como para mis propias ideas […] Nunca he sido cristiano y nunca lo seré, y en consecuencia muchas veces me he sentido excluido de nuestra cultura. Es revigorizante y emocionante encontrar gente como yo, que necesita explorar todas las creencias racionalmente[…]

De J. G. en Cincinnati, Ohio

[…] Me impresionaron por completo los números de 1985 y los tres primeros de este año […] Algunas ideas sobre el enfoque de Fallas de la Biblia: su universo es la Biblia, que pesa apenas un kilo o dos, pero es un universo muy grande. Su enfoque, minimizar los puntos extrabíblicos, es correcto. Es estrictamente cuestión de mantener en perspectiva el equilibrio, algo que usted parece estar haciendo muy bien […] Sus planes de expandirse al segmento de los indecisos me parecen muy buenos. Los fundamentalistas no piensan ni dudan, pero pueden ser maliciosos. He escoltado a clientes de clínicas de abortos, y algunos miembros de aquel grupo se portan como perros rabiosos. Quizás usted haya hecho un recorrido académico y su siguiente enfoque sea correcto al trabajar con los indecisos. Para dudar, primero hay que pensar. Si bien la atención se suele dirigir hoy a los fundamentalistas, yo supongo que el universo de los indecisos es muchísimo más extenso. Siga con su buena labor. Fallas de la Biblia es excelente.