FALLAS DE LA BIBLIA 19

FALLAS DE LA BIBLIA
por Dennis McKinsey

Número 19
Julio de 1984

COMENTARIO

MOISÉS Y EL PENTATEUCO (Parte 1 de 2)

Muchos defensores de la Biblia sostienen con vehemencia que Moisés escribió los primeros cinco libros del Antiguo Testamento (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio, conocidos comúnmente como el Pentateuco). No sólo basan esta creencia en datos históricos, sino en frases dichas por Jesús en el sentido de que Moisés había escrito la ley judía: “¿No os dio Moisés la ley, y ninguno de vosotros hace la ley?” (Juan 7:19) y “Porque la ley por Moisés fue dada…” (Juan 1:17). Pero Moisés no pudo haber sido el autor, debido a un gran número de versos que se oponen a la idea. Los siguientes son los principales ejemplos:

a) “Y pasó Abram por aquella tierra hasta el lugar de Siquem (…) y el cananeo estaba entonces en la tierra.” (Génesis 12:6) “… y el cananeo y el ferezeo habitaban entonces en la tierra.” (Génesis 13:7) Ambos versos afirman que los cananeos habitaban [tiempo pasado] esa tierra. La labor de expulsar a los cananeos no empezó hasta los días de Josué, después de Moisés, y no terminó hasta los días de David. Como Génesis 12:6 y 13:7 no pudieron haberse escrito sino después de que los cananeos abandonaran esa tierra, lo que ocurrió 450 años después de la época de Moisés, él no pudo haberlos escrito.
b) “Y los reyes que reinaron en la tierra de Edom, antes que reinase rey sobre los hijos de Israel, fueron éstos…” (Génesis 36:31) Este pasaje sólo pudo haberse escrito después de que empezara a gobernar el primer rey de Israel, Saúl (ver 1 Samuel 10:24-25), de modo que no pudo haber sido escrito por Moisés.
c) “No será quitado el cetro de Judá, y el legislador de entre sus pies, hasta que venga Siló…” (Génesis 49:10) Estas palabras no pudieron haberse escrito antes de que Judá recibiera el cetro, lo cual no ocurrió hasta el ascenso al trono de David, casi 400 años después de la muerte de Moisés.
d) “… También Moisés era muy gran varón en la tierra de Egipto…” (Éxodo 11:3) Lo usual es llamar grandes a las personas después de que han muerto, y difícilmente habría podido Moisés decir algo semejante acerca de sí mismo.
e) “Así comieron los hijos de Israel maná cuarenta años, hasta que entraron en (…) la tierra de Canaán.” (Éxodo 16:35) Moisés murió en el desierto antes de cruzar la frontera de Canaán. ¿Cómo pudo haber sabido lo que pasaría después de que los israelitas cruzaran? ¿Cómo pudo haber sabido cuándo dejaron de comer maná? Más aún: de acuerdo con Josué 5:12, todavía comían maná después de cruzar el río Jordán y estar acampados en Gilgal.
f) “Las primicias de los primeros frutos de tu tierra traerás a la casa de Jehová tu Dios.” (Éxodo 23:19) Esto no pudo haberse escrito antes de la época de Salomón, pues Dios no tenía una casa antes de la construcción del templo, 447 años después de la época de Moisés. Cuando David propuso construir un templo, Dios se lo prohibió y le dijo que desde la salida de Egipto no había tenido una casa (2 Samuel 7:6: “Ciertamente no he habitado en casas desde el día que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que anduve en tienda y en tabernáculo”).
g) “Y la tierra no os vomitará, por haberla contaminado, como vomitó a la gente que fue antes de vosotros.” (Levítico 18:28) ¿Cómo pudo haber escrito esto Moisés, si él nunca vio la tierra prometida y las demás naciones terminaron de ser expulsadas hasta la época de David?
h) “Y estando los hijos de Israel en el desierto, hallaron un hombre que recogía leña en día de sábado.” (Números 15:32) ¿Cómo pudo haber escrito esto Moisés, si presupone que los israelitas ya no estaban en el desierto? El verso dice que estaban en el desierto; el autor lo escribió después de que salieron de allí. Así que no pudo haber sido Moisés, quien murió en el desierto.
i) “Y estando los hijos de Israel en el desierto, hallaron un hombre que recogía leña en día de sábado. Y los que le hallaron recogiendo leña trajéronle a Moisés y a Aarón, y a toda la congregación. Y encerráronlo, porque no estaba declarado qué le habían de hacer.” (Números 15:32-34) Aquí dice que no sabían qué hacer con un hombre que recogía madera en el séptimo día, porque todavía no se les había declarado la norma. Pero la verdad es que Éxodo 31:15 (“cualquiera que hiciere obra el día del sábado, morirá ciertamente”) declaraba lo que habría de hacerse, y Moisés mismo había recibido esta ley. Por eso Moisés no pudo haber escrito Números 15.
j) Los siguientes versos parecen haber sido escritos por alguien distinto de Moisés:
“Y cuando errareis, y no hiciereis todos estos mandamientos que Jehová ha dicho a Moisés, todas las cosas que Jehová os ha mandado por la mano de Moisés…” (Num. 15:22-23)
“… como Jehová había mandado a Moisés.” (Éxodo 39:7, 40:19, 27, 29, 32)
k) El nombre de Moisés se menciona en tercera persona, lo que muestra que el Pentateuco es una biografía y no una autobiografía: “Y habló Jehová a Moisés…” (Números 2:1, 5:1, 31:1) “Y ésta es la bendición con la cual bendijo Moisés varón de Dios a los hijos de Israel, antes que muriese.” (Deuteronomio 33:1)
l) “Para echar de delante de ti gentes grandes y más fuertes que tú, y para introducirte, y darte su tierra por heredad, como hoy.” (Deuteronomio 4:38) Este verso debió haberse escrito después de la muerte de Moisés, pues antes los israelitas no poseían tierra alguna.
m) “Dentro de tus puertas los comerás…” (Deuteronomio 15:22) La frase “dentro de tus puertas” aparece 25 veces en el Pentateuco. Se refiere a las puertas de las ciudades israelitas, las cuales no habitaron hasta después de muerto Moisés.
n) “Y Jehová te hará tornar a Egipto en navíos…” (Deuteronomio 28:68) ¿Cómo pudo haber escrito esto Moisés, si antes, en Deuteronomio 17:16, había dicho: “No procuraréis volver más por este camino”? Si Moisés escribió la totalidad de Deuteronomio, entonces se contradijo.
o) “Y ésta es la bendición con la cual bendijo Moisés varón de Dios a los hijos de Israel, antes que muriese.” (Deuteronomio 33:1) Este verso no sólo se refiere a Moisés en tercera persona, sino en términos elogiosos. Además, narra su muerte como un evento ya sucedido.
p) “Esto dará cualquiera (…) medio siclo conforme al siclo del santuario…” (Éxodo 30:13, 24) Ingersoll percibió que Moisés no pudo haber escrito estos versos, pues no existieron siclos del santuario hasta mucho tiempo después de la muerte de Moisés.

(Este tema continuará en el próximo número.)

RESEÑA

En “508 Respuestas a Preguntas Bíblicas” (p. 120-121), M.R. DeHaan atiende los problemas creados por Marcos 16:15-18, que afirma que los creyentes podrán manipular serpientes, beber venenos y curar a los enfermos imponiéndoles las manos:

“Éste, por supuesto, es un pasaje difícil, pero creo que cuando aprendemos a distinguir correctamente la Palabra de verdad, no debemos tener problema en absoluto. Creo que los versos 15 y 16 son una comisión general que el Señor Jesucristo nos dio para esta [era]. Pero los versos 17 y 18, que tienen que ver con los signos del apostolado, fueron sólo para un período en particular (…) Luego de que se completó el canon de las Escrituras y se hubieron escrito todos los libros del Nuevo Testamento, Dios espera que creamos en Sus promesas en vez de buscar señales y milagros, así que creemos que las señales y milagros que aparecen en el capítulo 16 de Marcos son cosa del pasado…”

DeHaan sostiene que la capacidad de los creyentes de coger serpientes y beber cualquier veneno pertenece sólo al tiempo de los apóstoles, aunque nada justifica hacer esta suposición. ¿Dónde está la evidencia? Él dice: “creemos”, pero las escrituras no apoyan esta creencia. ¿Dónde dice la Biblia que los poderes concedidos en Marcos 16:16-18 se aplican sólo a la gente de esa época? DeHaan prosigue con: “Siempre que complazca al Señor ejecutar estos milagros u otorgar estos dones, todavía lo puede hacer (Ibid. p.121).” No estamos discutiendo la habilidad de Dios de manipular serpientes y beber venenos; estamos discutiendo la habilidad de los creyentes de hacerlo, y la dificultad de encontrar a alguien que haya recibido estos dones. DeHaan continúa: “No creo que debamos tentar a Dios cogiendo serpientes de cascabel ni bebiendo venenos sólo para poner a prueba Su palabra. Eso es presuntuoso, y es tentar al Todopoderoso, y Dios no puede ser tentado (…) nada Le complace más que cuando Sus hijos están dispuestos a confiar en Su palabra y Su promesa sin más evidencia (Ibid. p. 121).” ¿Cómo tienta a uno Dios con sólo pedirle a un creyente que beba veneno? Durante una entrevista de 4 horas en WING Radio (Dayton, Ohio) el 4 de junio de 1984, el editor de Fallas de la Biblia fue acusado de tentar a Dios al pedirles a los creyentes que pusieran a prueba Marcos 16. ¿La Biblia es tan sacrosanta como para estar por encima de toda prueba? Es difícil creer eso, pues el mismo libro dice: “Examinadlo todo” (1 Tesalonicenses 5:21) y todo lo que yo buscaba era una prueba. DeHaan concluye: “Si todo Marcos 16:15-18 es para nosotros, entonces siempre debería cumplirse, y no sucede así, como verán fácilmente si beben venenos y manipulan serpientes (Ibid. 121-22).” La promesa no falla porque Marcos les esté hablando sólo a los de la época apostólica, sino porque el verso es simplemente falso.

En la página 111 de “508 Respuestas a Preguntas Bíblicas”, se le pregunta a DeHaan si la fe puede mover montañas literalmente, como enseña Mateo 17:20 (“… si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá: y se pasará: y nada os será imposible”). Su respuesta es: “Sí, creo con todo mi corazón que si tuviéramos suficiente fe podríamos mover montañas literales, si fuera para la gloria de Dios. Por supuesto, hemos de recordar que mover montañas por hacer una mera demostración no complace al Señor, pero si es para Su gloria y para ayudar a otros, creo que sería posible”. Con tal de escapar del dilema que se le presenta, DeHaan usó unos trucos comunes. Primero, discutió un verso que tiene un calificativo: la fe debe ser del tamaño de un grano de mostaza. Si el deseo falla, los apologetas siempre pueden decir que la fe no tuvo la medida requerida. ¿Por qué no discutió Marcos 9:23 (“Si puedes creer, al que cree todo es posible”), Juan 14:12 (“El que en mí cree, las obras que yo hago también él las hará; y mayores que éstas hará”) y Mateo 21:21-22 (“Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis”), que no tienen calificativos, que dicen solamente que hay que tener fe? Segundo, seguramente cualquier cristiano tiene al menos la fe de un grano de mostaza, pues éste es pequeñísimo. Entonces, ¿por qué no pueden mover todos montañas? Tercero, ¿dónde dice alguno de estos versos que no se puede cumplir la petición a menos que sea para la gloria de Dios? Este calificativo gratuito no tiene apoyo alguno en el texto. Cuarto, ¿por qué supone DeHaan que la gente sólo querría mover montañas “por hacer una mera demostración”? Tal vez de verdad quieran mover algunas. ¿Vamos a creer que la fe puede hacerlo? Quinto, ¿dónde dice la Biblia que las demostraciones no complacen a Dios? ¿No dice acaso: “Examinadlo todo” (1 Teslonicenses 5:21)? Y finalmente, ¿dónde dice alguno de estos versos que el acto debe servir para la gloria de Dios y para ayudar a los demás? Los versos dicen que podemos mover montañas si lo creemos. No mencionan ninguna limitante.

Ante la pregunta de si podemos recibir todo lo que queremos si seguimos a Mateo 18:19-20 (“si dos de vosotros se convinieren en la tierra, de toda cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy en medio de ellos”), DeHaan dijo: “Aquí Jesús está hablando del ministerio de los creyentes, especialmente en la asamblea. Si pedimos cualquier cosa en nombre del Señor Jesús y concordamos con otro creyente y confiamos en el Señor, Él nos dará lo que pedimos, bajo esta condición: que lo pidamos conforme a Su voluntad (Ibid. p. 112).” Aparte del hecho de que la cita no dice nada sobre pedir “en nombre del Señor Jesús” o tener que confiar en Dios, la cuestión clave sigue sin respuesta. ¿Dónde están especificadas las condiciones? ¿Qué parte del verso dice algo sobre la voluntad de Dios?

DIÁLOGO Y DEBATE

[cartas que Biblical Errancy recibió durante la época de su distribución original en inglés]

De E. L. F. en Long Beach, California (Parte 4)

Volviendo a los cuatro versos que cita en apoyo a la Trinidad [1 Pedro 1:2, 1 Juan 5:7, 2 Corintios 13:14, Mateo 28:19], ésos tampoco prueban mucho. Mire, por ejemplo, los pasajes acerca del bautismo en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. En la historia estadounidense tenemos el famoso incidente cuando Ethan Allen exigió la rendición del Fuerte Ticonderoga “En nombre del gran Jehová y el Congreso Continental”. ¿Alguien puede decir que para Ethan Allen Jehová y el Congreso Continental eran idénticos, o parte de alguna “dualidad” divina?

Respuesta del Editor (Parte 4)

Ha dirigido sus críticas a la parte equivocada, E. L. F. Son los creyentes, no yo, quienes citan estos versos para demostrar la trinidad. En el número de marzo de 1984 dije: “los apologetas siguen basándose en cuatro versos principales para justificar su creencia en la Trinidad”. Su crítica apoya mi posición, no la de ellos.

(Parte 5)

En algunas partes logra insertar algunos comentarios sucios, como decir que 1 John 5:7 [“Porque tres son los que dan testimonio en el cielo, el Padre, el Verbo, y el Espíritu Santo: y estos tres son uno”] es una falsificación. Lo interesante es que la evidencia de que no hubo falsificación es abrumadora. Los trinitarios nunca usaron este pasaje en los debates sobre el arrianismo (¿quién falsificaría un texto porque sí, sin la intención de usarlo?). Tampoco los arrianos se quejaron de que el pasaje fuera falso, a pesar de que definitivamente data al menos de la época de esos debates. Lo que pudo haber pasasdo es que alguien escibió una nota al margen de un manuscrito, indicando el punto exacto en el texto al que se refería; mucho más tarde, el siguiente copista, sin otros manuscritos para comparar, pensó que hacía parte del texto y así lo copió. Por cierto, esto les pasó a muchos otros textos bíblicos, la mayoría sin importancia; en muchos casos, los académicos han podido comparar con otros manuscritos para eliminar las añadiduras.

Respuesta del Editor (Parte 5)

Dice usted que la evidencia en contra de la falsificación de 1 Juan 5:7 es abrumadora, pero se ocupa de demostrar lo contrario. Tiene razón, E. L. F.: no fue usado en los debates sobre el arrianismo, ni alegaron los arrianos que fuera falso. ¿Por qué? Porque ese pasaje no existió sino hasta siglos después. Dice que el verso “definitivamente data al menos de la época de esos debates”, pero luego demuestra que pudo haberlo insertado por error un copista que confundiera una nota al margen con una parte del texto. Y concluye diciendo: “esto les pasó a muchos otros textos bíblicos (…) en muchos casos, los académicos han podido comparar con otros manuscritos para eliminar las añadiduras”. ¡Precisamente! Y por eso las versione modernas (Revised Standard, Modern Language, Traducción del Nuevo Mundo, New American Standard, New International, New American Standard), que considera usted más académicas que tradicionalistas, han descartado el verso 1 John 5:7 de la versión King James.

De K. N. en Dallas, Texas

Un amigo mío, un ateo, me dio a leer su número 17. Su respuesta a E. L. F. me pasma. No cita ni una fuente primaria, pero dice con toda seguridad que la palabra hebrea “ratsach”, hallada en Éxodo 20:13 [“No matarás”] no significa “asesinar” sino sólo “matar”, y para probarlo se apoya principalmente en la Biblia versión Revised Standard. Pero el asunto puede solucionarse rápidamente volviendo al léxico hebreo estándar que se usa hoy en día, Hebrew and English Lexicon of the Old Testament, por Brown, Driver y Briggs. Hay tres palabras básicas en el Antiguo Testamento que significan “matar” en un sentido general. Son ratsach (asesinar, ejecutar), harag (matar) y shachat (masacrar, vencer). Aunque es cierto que las tres palabras pueden traducirse por el término general “matar”, un examen más refinado y exacto de estos términos hebreos revela las gradaciones de significado que enumero. Y en Éxodo 20:13 se usa “ratsach”. Su error fundamental, señor McKinsey, es que se interesa innecesariamente por la versión Revised Standard y otras traducciones inglesas. De hecho, me cuesta creer que piense que versiones como la New American Standard y la New International se basan “más en la conveniencia que en la investigación” (un insulto para más de un centenar de lingüistas), mientras parece sostener la exclusiva impecabilidad de la Revised Standard. Qué osadía (…)
En resumen, señor McKinsey, está claro que no ha investigado el asunto a satisfacción. Limitarse a decir que la palabra de Éxodo 20:13 SOLAMENTE significa “matar” es incorrecto. Al comparar en detalle con otras palabras hebreas que también transmiten el sentido general de “matar”, se perfilan las distintas connotaciones que cada una de ellas puede tener, y Éxodo 20:13 no es la excepción.

Respuesta del Editor

Entonces, le parece que las traducciones de la Biblia, en especial las recientes, no están influidas por la conveniencia, y mi investigación es débil. Huelga decir que no estoy de acuerdo. Primero, cita un léxico para probar que hay tres palabras básicas (ratsach, harag y shachat) en el Antiguo Testamento que significan, en general, “matar”. ¿Qué pasó con “nakah,” “muwth”, “tabach”, “chala” y “naqaph”? ¿No quería usted una investigación exacta? Segundo, la Revised Standard fue apenas una de varias versiones que cité y que traducían Éxodo 20:13 como “No matarás”. Como le dije a E. L. F.: “Su desacuerdo es con los hebraístas que tradujeron las versiones King James, Revised Standard, Catholic New American Bible, Jerusalem Bible, Geneva Bible y Douay”. ¿De dónde saca que me apoyé “principalmente en la Biblia versión Revised Standard”? Tercero, usted prefiere traducir la palabra hebrea “ratsach” como “asesinar” y cita como fuentes las traducciones modernas New American Standard y New International. Si ratsach significa “asesinar”, entonces, ¿por qué esas versiones la traducen como “matar” en Deuteronomio 4:42 y Números 35:27? ¿Y por qué el texto masorético judío lo traduce como “matar” en 1 Reyes 21:19 y Oseas 4:2? Hasta sus propias autoridades admiten que “ratsach” puede significar “matar”. Cuarto, me acusa de insultar a “más de un centenar de lingüistas”. Pero el número de lingüistas de los últimos 500 años que han escogido la palabra “matar” en vez de “asesinar” sobrepasa por mucho el centenar. Usted cuestiona el conocimiento que ellos tienen del hebreo y prefiere la traducción de un grupo menor. En efecto, alega tener un cuerpo de académicos que saben más hebreo que un grupo mucho más numeroso. Y por último, ¿dónde di a entender algo sobre la “exclusiva impecabilidad de la Revised Standard”?

CARTAS AL EDITOR

De M. E. P. en Tulsa, Oklahoma

… hace un par de años, un científico de computadores con un doctorado, que enseña en la Universidad de Tulsa, me dijo con toda seriedad que la Segunda Venida es inminente. Eso me hizo darme cuenta de que estamos perdiendo generaciones enteras en este país por culpa del oscurantismo. Por eso amo su poderosa revista; alguien tiene que retar a los cristianos en su propio terreno. [En otra carta, M. E. P. preguntó lo siguiente.] Si nos salvamos por fe, predestinación, o selección divina, ¿por qué Jesús y Pablo nos dieron todas esas normas para vivir? Los conjuntos de normas son coherentes sólo con una salvación por obras, algo que rechaza la mayoría de las sectas cristianas.

De J. K. en Poplar Bluff, Missouri

… me criaron en un ambiente similar a la situación descrita en la última carta del número de mayo de 1984. Como dijo usted, es razonable esperar que los “cristianos renacidos” de vieja guardia tengan bastantes problemas aceptando los puntos de vista de Fallas de la Biblia. Deshacerse de los efectos de la crianza de un ambiente fundamentalista es difícil, pero no imposible (…) Aprecio su trabajo y espero que continúe. Lo más interesante es cuando cita a los defensores de la Biblia tratando de explicar los “pasajes difíciles”. Esto sucedía con frecuencia en la iglesia en la que fui criado. Los fundamentalistas hacen una especie de “juramento mental” sobre la explicación que quieren aceptar. En el reciente número de mayo, me encantó el comentario sobre saber “qué pensaba Cristo”. Eso me trajo recuerdos de antaño, pues he oído muchas veces esa frase (…) No sorprende que los fundamentalistas hablen tanto a favor de la “fe”, pues sus opiniones ciertamente no resisten la prueba de la lógica y la razón. Pero eso es lo grandioso de la fe: no necesita lógica ni razón; de hecho, prefiere no tenerlas.

De B. B. H. en Miramar, Florida

Quisiera mencionar que, con bastante frecuencia, una pareja de esos “ancianos mormones” (siempre van de dos en dos) tocó a mi puerta para venderme el mormonismo, o lo que fuera que estuvieran vendiendo (…) Todos son jóvenes bien educados y de conversación muy amena. Lo que comienza planeado como una venta de unos momentos termina durando varias horas (…) por lo general les cuesta todo su esfuerzo defender sus puntos de vista (…) me preguntaba si existe algún libro dedicado a refutar el Libro de Mormón…

Respuesta del Editor

Cuando me escribe alguien con la intención de predicar, lo tomo como una oportunidad de darle información y ayuda que no sabe que necesita. Se vuelve una cuestión de quién está convenciendo a quién. Demasiadas personas racionales se conforman con hacerlos a un lado y mantener una postura de defensa exitosa. Eso explica en gran parte lo fuertes y numerosos que se han vuelto los evangélicos. Los fundamentalistas como Falwell están a la ofensiva, y su influencia está por todas partes, como demuestran los eventos recientes. Aunque Fallas de la Biblia no se enfoca en grupos cristianos específicos, mis notas sobre el Libro de Mormón podrían aparecer en algún número venidero. Si desea leer críticas, en las bibliotecas cristianas son notables los libros que critican al mormonismo como culto. Por supuesto, están escritos desde una perspectiva cristiana.

NOTA DEL EDITOR

Un par de lectores cuestionó la serie sobre Enseñanzas Ignoradas en los números de abril, mayo y junio. Según manifestaron, “En esos números sólo ha señalado contradicciones en las vidas de los cristianos”. Hay que darse cuenta de que Fallas de la Biblia no es un periódico técnico de miras estrechas, dedicado sólo a comparar verso contra verso, aunque ésa es una parte integral de todo el enfoque. Se trata de un análisis con bases filosóficas de todos los problemas internos relacionados con la validez de la Biblia. Esto no sólo puede involucrar errores técnicos, contradicciones, falacias y curiosidades filosóficas, sino también evidencia circunstancial. Cuando millones de los más devotos defensores del libro ignoran un gran número de enseñanzas bíblicas, es evidencia significativa de que el libro no es tan sacrosanto como ellos aseguran. Si lo es, ¿por qué no se adhieren con más rigor a sus principios? Cuando personas de dudosa moral citan un libro como la fuente de esa moral, uno debe preguntarse por la confiabilidad del libro. Si los testigos presenciales en un juicio son de integridad cuestionable, eso no habla muy bien de su defendido.