FALLAS DE LA BIBLIA 13

FALLAS DE LA BIBLIA
por Dennis McKinsey

Número 13
Enero de 1984

COMENTARIO

LOS PATRIARCAS

Millones de personas en todo el mundo, en especial los niños, adoptan ciertas figuras como modelos para imitar. Esto no sólo sucede en los deportes, la política y la actuación, sino también en la religión y el terreno ideológico. Y en ninguna parte de la religión son más numerosos los modelos para imitar que en la Biblia. Del Génesis al Apocalipsis abundan individuos notable. Pero, ¿de verdad merecen nuestro respeto y admiración? ¿Fue su comportamiento uno que querríamos enseñar a nuestros niños los domingos por la mañana? La mejor manera de contestar esa pregunta es describir las actividades de cada uno de ellos. Primero tenemos aquéllos cuyas maquinaciones tuvieron un ámbito más bien limitado:

ABSALÓN: ordenó matar (2 Samuel 13:28-29), tuvo sexo en público (2 Samuel 16:22).
ABIMELEC: mató a los habitantes de una ciudad (Jueces 9:45), asesinó gratuitamente (Jueces 9:5).
AMNÓN: violó a su hermana Tamar (2 Samuel 13:11-14).
AOD: asesinó al rey Eglón (Jueces 3:21-22).
ELÍAS: cometió asesinato (1 Reyes 18:40).
ELISEO: mintió (2 Reyes 6:19, 8:10), maldijo de muerte a 42 muchachos por burlarse de su calvicie (2 Reyes 2:23-24).
GEDEÓN: mató (Jueces 8:16-17), asesinó a prisioneros (Jueces 8:21), fue polígamo (Jueces 8:30).
ISSAC: mintió (Génesis 26:6-7), intentó sacrificar a su esposa para salvarse (Génesis 26:9).
JACOB: le robó a Esaú sus derechos de nacimiento (Génesis 25:31-33), estafó a su padre y a su suegro (Génesis 27:19, 30:40-43), le mintió a Raquel (Génesis 29:12).
JEFTÉ: masacró pueblos (Jueces 11:33), mató a su propia hija (Jueces 11:39).
JEHÚ: mató (2 Reyes 9:24, 27, 10:11, 17), ordenó matar (2 Reyes 10:6-7, 14, 25), mintió (2 Reyes 10:18-19).
JEREMÍAS: mintió (Jeremías 38:24-27).
JOAB: mató (2 Samuel 3:27, 18:14, 20:10).
JOIADA: ordenó un asesinato (2 Reyes 11:15-16).
JONATÁN: mató (1 Samuel 14:13-14), mintió (1 Samuel 20:28).
JOSÉ: engañó a sus hermanos (Génesis 42:7), cometió nepotismo (Génesis 47:11).
JOSUÉ: cometió masacres sin descanso (Josué 6:21, 8:25-28, 10:1, 20, 26-28, 30, 32-33, 35, 37, 39-41, 11:17-18, 21, 12:7), asesinó a prisioneros (Josué 8:29), lisió caballos (Josué 11:9).
LABÁN: engañó (Génesis 29:15, 20-25).
LOT: ofreció sus hijas vírgenes a una turba (Génesis 19:8).
SAMUEL: asesinó (1 Samuel 15:33).
SANSÓN: mató (Jueces 14:19, 15:8, 15), tuvo sexo con una prostituta (Jueces 16:1), le mintió a Dalila (Jueces 16:10, 13).

A continuación, los personajes que no sólo son bien conocidos, sino que perpetraron un surtido más vasto de acciones nefastas:

ABRAHAM: le dijo a su esposa que mintiera (Génesis 12:13), embarazó a Agar, su sirvienta (Génesis 16:4), la mandó con su hijo a vivir en el desierto (Génesis 21:14), mintió (Gen. 20:2) y se casó con su media hermana (Génesis 20:11-12).
SAÚL: ordenó apostar (1 Samuel 14:42), mató (1 Samuel 15:7-8, 20, 22:18-21), se desnudó y mostró una conducta inestable (1 Samuel 19:24), admitió haber mentido y cometido torpezas (1 Samuel 26:21), entregó la esposa de David a otro hombre (1 Samuel 25:44), desobedeció a Dios consultando a una pitonisa y faltando a la fe (1 Crónicas 10:13-14).

SALOMÓN: ordenó asesinatos (1 Reyes 2:25, 2:34, 46), trató de matar a Jeroboam (1 Reyes 11:40), hizo esclavos (1 Reyes 9:21), desobedeció los mandatos de Dios (1 Reyes 11:11), hizo maldades (1 Reyes 11:6), le mintió a su madre (1 Reyes 2:20-21, 2:24).

Para terminar, dos individuos de gran fama, o gran infamia: Moisés y David. Los dos ocupan lugares especiales entre los líderes del Antiguo Testamento.

Según 2 Crónicas 30:16, Moisés era un hombre de Dios. Sin embargo:

– Mató a un egipcio (Éxodo 2:12).
– Ordenó un ataque armado (Números 31:3, 6).
– Ordenó asesinar prisioneros (Números 31:17).
– Ordenó retener a jóvenes prisioneras por varias razones (Números 31:18).
– Dirigió matanzas de mujeres y niños (Deuteronomio 2:34, 3:3, 6).
– Ordenó matar (Deuteronomio 13:15, 20:13).
– Blasfemó al escribir que era un profeta mayor que Jesús (Deuteronomio 34:10).
– Tuvo un hijo ilegítimo (Éxodo 2:21-22).
– Y Dios le prohibió entrar a Canaán por no tener fe (Números 20:12), rebelarse (Números 27:12-14), desobedecer (Deuteronomio 32:51-52) y hablar duramente (Salmo 106:32-33.

Y, por último, David. A pesar de todo lo anterior, ninguna persona de la Biblia tiene un historial más vergonzoso y escandaloso. Aunque se le elogió muchas veces como el hombre que nunca hacía el mal (1 Samuel 25:28), seguía a Dios enteramente (1 Reyes 11:6), era como un ángel de Dios (2 Samuel 19:27), obedecía sus mandamientos (1 Reyes 3:14) y tenía un corazón perfecto ante Dios (1 Reyes 15:3), David exhibió un comportamiento excepcionalmente corrupto:

– Mató (1 Samuel 17:50-51, 18:7, 27, 19:8, 23:5, 30:17, 2 Samuel 8:5, 13).
– Ordenó asesinatos (2 Samuel 1:15, 4:5-12).
– Ordenó matar prisioneros (2 Samuel 12:29-31, 1 Crónicas 20:3, 2 Samuel 8:1-2).
– Cometió matanzas sin provocación (1 Samuel 27:8-11, 2 Samuel 5:20, 25).
– Entregó a la muerte a siete hijos de Saúl (2 Samuel 21:1-6, 9).
– Exigió la muerte de Joab (1 Reyes 2:5-6).
– Orquestó la muerte de Hurías para tomar a su esposa (2 Samuel 11:14-17).
– Disgustó a Dios (2 Samuel 11:26-27).
– Embarazó a la esposa de otro hombre (2 Samuel 11:2-5).
– No se le permitió construir el templo de Dios por haber sido un hombre de guerra (1 Crónicas 22:7-8).
– Mintió (1 Samuel 21:1-2, 8-10).
– Le dijo a Jonatán que mintiera (1 Samuel 20:5-6).
– Admitió haber pecado al hacer un censo (2 Samuel 24:10, 17, 1 Crónicas 21:8, 17).
– Chantajeó (1 Samuel 25:2-8).
– Profetizó falsamente (1 Samuel 27:1).
– Envió espías (2 Samuel 15:36).
– Lisió caballos (2 Samuel 8:4).
– Encerró a diez concubinas sin razón aparente (2 Samuel 20:3).
– Fue bígamo (2 Samuel 3:2-3) y polígamo (2 Samuel 5:13).
– Rechazó la palabra de Dios (2 Samuel 12:9-11).
– Admitió haber pecado al causar la muerte de Hurías y tomar a su esposa (2 Samuel 12:13-14).
– Se expuso indecentemente (2 Samuel 6:20).

Y a pesar de todo esto se espera que creamos que éste fue un hombre que obró conforme al corazón de Dios (Hechos 13:22). Quien busque en la Biblia bondad, decencia, y modelos de moral lo hace bajo su propio riesgo.

INTERVENCIÓN RADIAL

El domingo 20 de julio de 1983, el editor de Fallas de la Biblia apareció en la estación de radio WING en Dayton, Ohio, por dos horas y media. El formato de llamadas ofrecía un excelente foro para revelar y debatir las falacias bíblicas ante una amplia audiencia. Aunque no tengo espacio para presentar todo lo que se debatió, un punto predominó: la interpretación cristiana de la Biblia tiene grandes dificultades filosóficas. Para mostrarle a un apologeta su error, sólo se necesita hacer preguntas como:

a) Si Dios es justo, ¿por qué se castiga a la humanidad por lo que hizo un hombre hace miles de años?
b) Si Dios es perfecto y todo lo que hace es perfecto, Adán debió de haber sido perfecto. ¿Cómo, entonces, pudo Adán, un hombre perfecto, pecar? Es irrelevante que hubiera tenido libertad o no. Es imposible que haya cometido un pecado. Los seres perfectos no pueden pecar.
c) Si uno debe recibir a Jesús para “salvarse”, ¿qué pasa con los millones de personas que han vivido y muerto sin tener ningún contacto con Jesús, la Biblia o el cristianismo? ¿Cómo puede ser Dios justo, si esas personas son condenadas simplemente por el lugar donde nacieron? No se les dio oportunidad de obtener la “salvación”. Millones de personas no han recibido misioneros. De hecho, millones murieron antes siquiera de que naciera Jesús.

Éstas son sólo algunas de las preguntas que generan diálogos intensos pero productivos. Por mucho que traten, los creyentes no pueden solucionar estos problemas.

RESEÑA

Fallas de la Biblia recibió un folleto titulado “La Ciencia, la Biblia y Dios”, de un hombre llamado M. B., en Ohio. El autor sostiene que la Biblia no sólo es un libro científico, sino que “se adelanta mucho a su tiempo”. Los versos que utiliza para probarlo son débiles. Por ejemplo, Job 38:33: “¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos?”. El autor concluye de aquí: “Dios le preguntó a Job si conocía las numerosas leyes de la naturaleza. Piénsenlo: hace más de tres mil años, la Palabra inspirada le decía al hombre que el universo operaba sobre leyes naturales. Y hoy la ciencia sigue investigando ‘las ordenanzas de los cielos’, o las leyes naturales”. Uno sólo puede preguntarse por cuál método llega el autor a esta conclusión. El Antiguo Testamento está lleno de ordenanzas de los cielos o de Dios, y nada podría llevar a creer que esto es sinónimo de ley de la naturaleza. La mayoría son leyes de índole moral, social, religiosa y ceremonial, y de poco peso científico.
Para apoyar su argumento, el autor citó varios versos bíblicos y los hechos “científicos” que demuestran. El Salmo 19:6 dice, refiriéndose al sol: “Del un cabo de los cielos es su salida, y su giro hasta la extremidad de ellos”, lo que supuestamente refleja el hecho de que el sol tiene que recorrer un curso con circunferencia de 338.000 años luz. En primer lugar, el cielo no tiene extremos de donde salga o adonde llegue el sol. Segundo, el autor, siguiendo la tradición de Pablo, omitió muy convenientemente el resto del verso, que dice: “Y no hay nada que se esconda de su calor”. Es difícil ver cómo podría alcanzar el calor del sol a cada objeto de un universo infinito.
Job 26:7 dice: “Extiende el alquilón sobre vacío, cuelga la tierra sobre nada”. Si esto es científicamente exacto y prueba que la Tierra flota libremente en el espacio, entonces, ¿cómo podría la Tierra tener también bases, como dice el Salmo 104:5 (“El fundó la tierra sobre sus bases; no será jamás movida”)?
Eclesiastés 1:6 dice que los vientos fluyen en un patrón circular, lo cual es científicamente correcto, aunque no es particularmente profundo. ¿Por qué no citó el autor el verso siguiente, que dice: “Los ríos todos van a la mar…”? Quizás porque cientos de ríos del mundo desembocan en lagos y otros cuerpos interiores de agua. Es importante anotar que el autor también se basa en otros versos tan oscuros que permiten la interpretación que dicte la conveniencia. Por ejemplo, según él, Job 38:14 dice que la Tierra rota sobre su eje, Job 38:31 enseña la ley de la atracción entre cuerpos celestes, y Job 28:25 dice que el aire tiene peso. Estas partes de las escrituras son sencillamente demasiado ambiguas como para saber qué querían decir.

DIÁLOGO Y DEBATE

[cartas que Biblical Errancy recibió durante la época de su distribución original en inglés]

De D. R. M. en Wilberforce, Ohio

En respuesta a una carta en la que, según usted, la Biblia afirma ser perfecta: ¿Puede documentar su alegato? Nos ayudaría si primero definiera la “perfección” y luego mostrara qué apoya su argumento. También discrepo de la afirmación de que “dos versiones diametralmente opuestas y mutuamente excluyentes del mismo evento no pueden ser simultáneamente exactas” (Número 2 de Fallas de la Biblia). Si el evento es una bola que sige las leyes de la gravedad y una persona en la azotea de un edificio de diez pisos dice: “Solté la bola”, y otra persona en el suelo dice: “La bola me golpeará”, uno diría que tenemos dos versiones diametralmente opuestas, mutuamente excluyentes y simultáneamente exactas del mismo evento. “Solté” es opuesto a “Me golpeará”, pues el uno es pasado y el otro es futuro. Son mutuamente excluyentes. ¡Intente soltar y ser golpeado al mismo tiempo! Las dos son descripciones exactas del suceso.
Para terminar, especulo que usted le hace las preguntas equivocadas a la Biblia. Las Escrituras son un sistema de registro para un pueblo a lo largo de varios períodos. Para las personas que se encuentran inmersas en esa tradición de significados, las Escrituras siguen siendo una fuente de inspiración y verdad. Inspiración en términos de lo que es significativo en la vida. Verdad en términos de las preguntas definitivas sobre la vida. Si reducimos la verdad hasta que es sólo afirmaciones verificables defendidas por el positivismo lógico, entonces la Declaración de Independencia miente cuando dice que “todos los hombres son creados iguales” y el esposo le miente a su esposa cuando le dice que la ama.

Respuesta del Editor

Hay que contestar tres de sus comentarios. Para empezar, su primera pregunta se la está haciendo al lado equivocado. No soy yo, sino los apologetas de la Biblia, quienes le atribuyen perfección. Utilizan 2 Pedro 1:21, 2 Timoteo 3:16 y otros versos para demostrarlo. Su desacuerdo es con ellos, no conmigo. Yo me limito a mostrar evidencia de que la Biblia no es perfecta como alegan ellos, quienes definen “perfección” como carecer de errores, estar sin tacha alguna. Su segundo comentario muestra una lógica pobre. Luego de relatar dos observaciones acerca de la caída de una bola, usted comenta: “uno diría…”. Para empezar, no son ni diametralmente opuestas ni mutuamente excluyentes. La persona en la azotea del edificio no está haciendo dos afirmaciones simultáneas y opuestas. Lo que diga la persona en el suelo es irrelevante, pues su perspectiva es otra. Él se refiere a lo que ocurrirá, mientras que quien suelta al bola dice lo que ha ocurrido. De ninguna manera son comentarios mutuamente excluyentes. Los dos son correctos porque el paso del tiempo cambió las condiciones y están involucradas dos perspectivas diferentes. Estas afirmaciones son complementarias, no opuestas. Tercero, no le hago a la Biblia más pregunta que ésta: ¿cuál es su base para decirse infalible? Puede ser fuente de inspiración para muchos, pero de ningún modo es la fuente de la verdad para todos. Según usted, la Biblia es “verdad en términos de las preguntas definitiva sobre la vida”. Si la Biblia realmente es una fuente de verdad, ¿cómo explica, entonces, el tremendo número de problemas que contiene? Generalizar no prueba nada. La Declaración de Independencia sería inexacta si dijera que todos los hombres son físicamente iguales. Pero todos sabemos que lo que quiso decir fue igualdad ante la ley.

CARTAS AL EDITOR

De F. M. en Novato, California

En el número 7, la carta de S. S. menciona sacrificios humanos en Levítico, Jueces y 2 Samuel. Hasta ahora, en una lectura fugaz de los primeros dos libros, no he podido encontrar esas referencias. ¿Podría proporcionarme capítulo y verso?

Respuesta del Editor

Puede haber referencias a sacrificios humanos en Jueces y 2 Samuel, pero yo sólo las he encontrado en Éxodo, Levítico y Ezequiel. Tal vez S. S. nos quiera ayudar. Fallas de la Biblia no se compromete con la exactitud de la información en las cartas que recibe.

De en B. A. Y. en Cincinnati, Ohio

Me parece muy educativa su publicación, pero tengo una queja. Como el título es Fallas de la Biblia, me parece que los temas que se debaten en sus textos o en las cartas sólo deberían referirse a la Biblia. Por supuesto, pueden admitirse al debate temas relacionados, y cuando esto pase creo que usted tiene la responsabilidad editorial de identificar qué material no pertenece a la Biblia. La razón de todo esto es la carta de S. S. en Vienna, Virginia. En el segundo párrafo, S. S. habla del Nuevo Testamento como “compendio de contradicciones tanto históricas como lógicas (…) lleno de paganismo y antiguas supersticiones. La pascua es una celebración de la antigua diosa de la primavera, Istar. La Navidad cae en el solsticio de invierno, que es cuando se solían celebrar los festivales de Saturno.” Posiblemente, usted y S. S. sepan que las palabras pascua y navidad no figuran en el Nuevo Testamento, como tampoco la fecha del nacimiento de Jesús. Como el contexto de la carta sugiere que éstos son problemas bíblicos, usted debió haber señalado esta falsa información.

Respuesta del Editor

Entiendo su argumento. El material de Fallas de la Biblia debería limitarse a lo que contiene ese libro. Pero muchas cartas tratan sobre temas extrabíblicos. Parecen interesar sobremanera a mucha gente y no quiero excluir información de esta naturaleza si hay un fuerte interés. Yo estoy de acuerdo con usted. La pascua, la navidad, el sudario de Turín, el solsticio de invierno, los festivales de Saturno y otros temas ajenos a la Biblia no pertenecen a esta publicación. A menudo recibo cartas extensas sobre la historia del cristianismo primitivo, la formación del canon bíblico, la masonería, las maquinaciones políticas de los papas, etcétera. Aunque todo ello es informativo e interesante, no es realmente relevante a la “infalibilidad” de la Biblia. Sin embargo, discrepamos en un par de puntos. No creo tener la responsabilidad de identificar conceptos ajenos a la Biblia ni me siento obligado a decirles a los demás que esos temas no aparecen en ella, a menos que sirva para exponer con más claridad las inexactitudes bíblicas. Si la información sobre los temas extrabíblicos es inexacta, entonces no estoy en mejor posición que los lectores. No puedo conocer sobre todos los temas, y yo, como usted, leo con ojo crítico todas las cartas que me llegan. Si para alguien una carta es inexacta, trataré de publicar refutaciones razonadas. Como sabemos los dos, los periódicos no pueden comprometerse con la exactitud de lo que digan las cartas al editor.

De R. R. en Murphy, North Carolina

Es obvio que su corazón está en el lugar correcto, pero si el Número 8 [esclavitud y machismo] fue un ejemplo de su enfoque, entonces temo que, intelectualmente, le ladra al árbol equivocado. Si desea demostrar las fallas de la Biblia, es inútil limitarse a señalar que sus doctrinas y costumbres sociales son moralmente repugnantes para los estadounidenses modernos de vistas amplias. “Repugnante” no significa “errado”. Al contrario: cuanto más represivas, neuróticas y contrarias a la humanidad sean estas doctrinas, más atractivas les parecerán a los miembros de la Mayoría Moral, cuya motivación básica es el odio de la libertad humana y un ardiente deseo de condenar, castigar y controlar a quienes no sean exactamente como ellos.

Respuesta del Editor

Estamos de acuerdo. Lo “repugnante” no demuestra lo “errado”. Por eso Fallas de la Biblia no se concentra en los apartes sexuales, inmorales o sanguinarios de la Biblia, como hacen muchas críticas que apelan más al corazón que a la cabeza. Tras años de experiencia, los apologetas han logrado desarrollar una amplia gama de respuestas para quienes apelan a la repugnancia. Es inútil valerse principalmente de este método y por eso Fallas de la Biblia se ocupa de una variedad más amplia de problemas. Usted ha hecho una astuta observación que merece una respuesta profunda. El Número 8 trató sobre la esclavitud y el machismo, no por los aspectos deplorables de la opresión, sino porque la Biblia los apoya en clara violación de versos como 2 Corintios 3:17. El tenor general de la discusión se basó en la lógica, la razón y la evidencia, no en la emoción o la moral. Tal vez desee leer números como el 1, 2, 3, 6 y 7, pues no apelan a la moral o la emoción. Es difícil formarse una opinión exacta tras haber leído un solo número.

De A. I. C. en San Francisco, California (Parte 1)

¿Puedo comentar sobre los números que he recibido? En la primera página del Número 6 usted escribe: “podría sacársele un óvulo a una mujer virgen, unirlo con un espermatozoide en un tubo de ensayo y reinsertarlo al útero sin que haya contacto físico”. Ésta es una técnica muy reciente y no podría haberse considerado en tiempos bíblicos.

Respuesta del Editor (Parte 1)

Aprecio su enfoque científico, pero no ha captado mi argumento. La cuestión es: ¿embarazar a una mujer virgen es un milagro? ¿Es un evento contrario a la ley natural, es decir, algo sobrenatural y digno de admiración? La ciencia ha mostrado que no. Y si hoy no es milagro, en ese tiempo tampoco. Las mujeres pueden tener hijos sin haber tenido jamás contacto con un hombre. Es milagro que una vara se convierta en serpiente o que una mujer se convierta en sal porque esas cosas nunca pueden pasar. Pero si una mujer puede embarazarse ahora, sin ningún contacto, en ese tiempo también pudo haber ocurrido. El mecanismo es un asunto secundario. El hecho es que pudo haber pasado. Era algo posible.

(Parte 2)

[Luego de describir los detalles de la gestación y reproducción.] En el Número 7 usted escribe: “Si ellos realmente creen [que las cuatro narraciones de la resurrección concuerdan], los reto a escribir una historia coherente que incorpore las narraciones de los cuatro evangelios”. Ya se ha hecho. Es un libro extenso que se llama “El Evangelio Nazareno”, de Robert Groves y Joshua Podro. (…) No es una loca teoría, sino una obra académica. Revíselo y consiga un ejemplar si es posible. El reto que usted lanzó en esa frase se cumplió antes de que lo dijera. Aparte de esto, no tengo críticas que hacer sobre los cinco números que he visto. (…) Debo decir que usted ha hecho un LOGRO. Puede sentirse muy orgulloso de Fallas de la Biblia…

Respuesta del Editor (Parte 2)

Los defensores de la Biblia suelen aconsejarme libros para leer, y nunca he encontrado ninguno que merezca la recomendación. Le agradezco los elogios y veo que trata de ayudarme, pero ningún libro puede reconciliar los relatos de los evangelios. Las cronologías, los anuncios sobre el canto del gallo, y la hora a la que llegaron las mujeres a la tumba son apenas algunos de los problemas que ninguna racionalización y justificación puede resolver. Bien dijo Thomas Paine: “…creo imposible encontrar en historia registrada alguna tantos y tan claros absurdos, contradicciones y falsedades, como los que se encuentran en [los evangelios]. Son más numerosos y chocantes de lo que había esperado encontrar cuando empecé a examinarlos” (The Age of Reason by Thomas Paine, p. 67). Si me envía algún texto específico que reconcilie las contradicciones que Fallas de la Biblia ha señalado en los evangelios, con el mayor gusto lo comentaré en números futuros. Los creyentes nunca dejan de asegurarles a sus críticos que todos los problemas están resueltos y que es inútil seguir atacando la infalibilidad de la Biblia. Es una estrategia común y sólo engaña a quienes no están lo bastante versados en las escrituras. Quien no conozca el libro no puede conocer sus debilidades.

De M. J. G. en Ottawa, Canadá

Gracias por el número de muestra. Disfruté leerlo, aunque no sacudió mi fe en las Escrituras. Usted parece ser muy razonable, a diferencia de algunos agnósticos y ateos a quienes he leído. Por tanto, me interesaría suscribirme. (…) Creo que uno no debe tener miedo de la verdad, incluso si no es lo que uno preferiría. Espero que usted sienta igual. Todos tenemos mucho que aprender y entender.

Respuesta del Editor

¡Ojalá todos los creyentes tuvieran la mente tan abierta como usted! Todo lo que pide Fallas de la Biblia es poderse expresar abiertamente. No podríamos estar más de acuerdo. Todos nos equivocamos y tenemos mucho que aprender. Yo no soy excepción. Pero la mejor forma de proceder es con un diálogo franco que abarque todos los puntos de vista. Predicarles a los convertidos (sólo hay que ver las reuniones religiosas, fundamentalistas o ateas) puede consolar, pero no soluciona nada. Uno no convence a la gente de la noche a la mañana. Hace falta un proceso largo, lento y metódico de reeducación. La gente acepta la Biblia como la palabra de Dios después de meses y años de aprendizaje; para revertir el proceso se necesita un tiempo similar.