El poder de la voluntad

¿Por qué hay personas que creen que la evolución es un acto de voluntad? ¿Qué con decir tres veces soy feliz, ya lo son?
Respuesta:
La pregunta es excelente y te la voy a contestar para que comprendas el mecanismo o la dinámica de la vida.
Primero, no todos, tienen la evolución en sus manos. Cuando conscientemente evolucionas, significa que estás comprendiendo la razón por la que estás viviendo. Muchos no tienen ni la menor idea de que han nacido, así que, ¿cómo van voluntariamente a tomar la evolución en sus manos?
Segundo, el evolucionar conscientemente no quiere decir que digas, “soy feliz”, tres o un sinnúmero de veces. El decir o pronunciar un deseo, si no lleva consigo el poder de la ‘voluntad’ para dirigir nuestros pensamientos hacia la meta “deseada”, es como si no se dijera nada. Eso es absurdo. La ‘voluntad’, la maravillosa voluntad que a nivel físico y mental se usa para tantas cosas como, adelgazar, estudiar u obtener un objetivo en general, se puede usar, se debe usar, y se usa, para dirigir nuestros pensamientos en el camino de la evolución. Esa voluntad como la llamas tú, cuando está desarrollada lo suficiente, verás que no es tu voluntad, sino la del Señor a través de ti. ES LA VOLUNTAD DIVINA. Ya que Él es el Único y no hay un segundo o ningún otro.
Y tercero, sin esa voluntad de alcanzar el Divino, la Gracia del Señor, no puedes evolucionar más allá de lo que lo has hecho hasta ahora.
Sri Aurobindo dice,
“Sólo hay dos poderes que pueden, aunados, lograr ese algo grandioso y difícil que es el fin de nuestros esfuerzos”:

* una firme e imperturbable aspiración (el poder de la voluntad) que clama desde abajo y la Gracia suprema que desde arriba responde.

Debe haber una total y sincera entrega; debe haber una apertura única del yo personal al Poder divino; debe haber una constante e integral elección de la Verdad que está descendiendo, un permanente e incondicional rechazo de la falsedad de los poderes mental, vital y físico, y de las Apariencias que aún rigen la Naturaleza terrenal.
Ese sometimiento o entrega debe ser total y abarcar todas las partes del ser. Es preciso que mantengamos el templo limpio, si es que queremos instalar en él a la Presencia Viviente.”

Esa ‘ aspiración’ de la que Sri Aurobindo habla, es una voluntad, firme, fuerte e inquebrantable, que ha de surgir por la comprensión de la tarea que tenemos que desarrollar y trabajar al concedérsenos el nacimiento en el plano físico. ¡La tarea de nuestra evolución! Primero, esa aspiración se desarrollará inconscientemente; más adelante iremos comprendiendo… llegando a estar conscientes de quienes somos, y de esa forma se trasmutará en un acto volitivo, participando así en tan bella labor. La labor de la que El Buda y Jesucrito hablan.

No me acuerdo quién fue el autor de la frase siguiente, pero es una gran verdad:
“NINGÚN CONOCIMIENTO PUEDE SER ALCANZADO SIN SER BUSCADO, NI LA TRANQUILIDAD SIN AFANARSE POR ELLA, NI LA FELICIDAD SINO A TRAVÉS DE TRIBULACIONES. TODO INVESTIGADOR, EN UN MOMENTO U OTRO, TIENE QUE SUFRIR UN CONFLICTO DE DEBERES, UN VUELCO DEL CORAZÓN…”
Con todo mi cariño, y deseándoles la Paz Divina,
Su Compañera de Camino,
Rev. Hortensia De la Torre (Yin Zhi Shakya, OHY)

La anterior pregunta-respuesta, corresponden a uno de los mensajes que la Respetable Rev. Hortensia de la Torre, tiene con sus alumnos -virtuales- de su escuela de Budismo.

La pregunta y más aun la respuesta, me es muy interesante, ya que sin voluntad no puede haber ni siquiera un movimiento, – La Voluntad de Dios,- algunos nos atrevemos a decir…-que se cumpla la voluntad de Dios,-…¿pero realmente hemos hecho conciencia que es a través de nosotros que se manifiesta la voluntad Divina, que es perfección,…?

Milarepa

Milarepa

Milarepa (1052-1135) De la provincia de Gungthang en Tíbet occidental, cerca de a Nepal, Milarepa (1052-1135) tuvo una niñez dura y una juventud oscura. Cuando su padre murió sólo tenía siete años. Sus parientes le arrebataron las propiedades que le había dejado su progenitor y privadamente maltrataron a la familia. Su madre, amargada, envió a Milarepa a aprender magia negra para vengarse de aquellos que habían destruido su vida. Finalmente logró su deseo: Milarepa demostró ser muy diestro en las prácticas que le enseñaron. Desató una ola de destrucción que mató a muchos. No obstante, arrepentido de sus acciones, buscó ayuda para librarse del mal karma generado en su vengativa adolescencia. Conoció a Nyingmapa Lama Rongton, quien dándose cuenta de que Milarepa tenían afinidad con Marpa, lo remitió para que lo esperara en su retorno del viaje. El premio de Milarepa fueron años de duras pruebas a manos de su maestro. Entre otras, construyó una torre de nueve pisos según las especificaciones de Marpa. Finalmente, Marpa le dio la transmisión completa de todo lo que aprendió de Naropa y de sus maestros hindúes. Practicando las enseñanzas por muchos años, Milarepa alcanzó la iluminación y se volvió famoso por sus cantos. De sus estudiantes, Gampopa llegó a ser el sustentador del linaje.

¿Porqué hablar de Milarepa?

Estoy colocando una texto, bastante amplio sobre los MANTRAS, su poder y su origen, -curiosamente- se menciona a Milarepa; la verdad no le había prestado tanta atención, yo pensé…-ha de ser algún monje budista-,…el caso es que esta tarde me encontraba estudiando una leccion del M.Morya, descargadas a través del Summit University, y -curiosamente- hace una ejemplificación de Milarepa; asi que me dije, es tiempo de saber quien es este personaje…os lo dejo ahi, por si alguno de ustedes tenía la curiosidad.

La reecarnación segun el budismo

La reencarnación según el budismo.

Las teorías que conciernen a la supervivencia y a los sujetos que las conocen, y que encontraremos en el Tíbet, no son totalmente extrañas a los occidentales. El Tíbet, cruce donde se encontraron y mezclaron inmigrantes venidos de los cuatro puntos cardinales y también, según ciertas leyendas, de regiones extraterrestres, ofrece una notable diversidad de estas creencias, ya que cada grupo de inmigrantes trajo consigo concepciones sobre el tema capital de la perennidad indefinida, universalmente deseada, de la vida individual.

El budismo no cree de la existencia de un alma individual y eterna.

El ser humano es sólo el transmisor de un incesante flujo, de una energía ininterrumpida, de una corriente, siempre cambiante, de “fuerzas” acumuladas durante existencias anteriores. El sufrimiento proviene del absurdo deseo de querer ser “yo” en el seno de un mundo donde todo es ilusión (maya).

Este deseo de permanencia, de estabilidad, de individualidad es la causa de los renacimientos en el mundo del dolor.

Existe un medio de liberación, el que encontró el propio buda (Buda significa “el despierto”)

Primero es preciso conocer la verdadera naturaleza del mundo, saber que todo es ilusión y suprimir cualquier deseo para alcanzar la liberación y fundirse en lo Absoluto: el Nirvana.

Estar libre de pasiones, deseos, de la individualidad, de las ilusiones del mundo, éste es el estado de bienaventurado (bodhisattva) que puede alcanzarse en este mundo y en vida, sin hacer intervenir las nociones de paraíso e infierno. Sin embargo, esta ascesis física e intelectual no basta para la liberación: También deben practicarse un conjunto de obligaciones rituales.

La ley del Karma es, también ahí, fundamental. Es el factor determinante de la existencia de un individuo. El hombre que muere renacerá en un estado agradable o desagradable, según las acciones que haya cometido en su vida aquí abajo. Pero -y es esencial comprenderlo bien- el que renace nada tiene que ver con el muerto, puesto que no hay preservación alguna de la individualidad. Es una entidad espiritual ligada al cuerpo material, pero no enteramente dependiente de él, que se separa cuando éste muere y cesa de ser utilizado por ella. Este Namshes entonces emigra, para ir a vivir a otro cuerpo.

De todas maneras, el Namshes no es libre de elegir a su gusto el nuevo cuerpo en el que vivirá. Este le es impuesto por el juego automático de las causas y de los efectos: el “juego de la acción” (Karma).

Sin embargo, el grueso de los tibetanos ha hecho del Namshes un equivalente del Jîva indio, que desempeña el mismo papel. Este Jîva no debe ser considerado como el equivalente del alma de la que hablan las religiones occidentales. No es creada, particularmente, para cada individuo en el momento de su nacimiento.

Ningún poder supremo regula la reencarnación del Jîva-Namshes; éste es automáticamente conducido hacia el nuevo cuerpo que debe habitar. Solo los actos que realizó por intermedio del individuo al que estuvo unido, será la causa de su nueva reeencarnación.

En esta atmósfera de superstición se lee, el la mayoría de los hogares tibetanos, el Bardo todol, poema simbólico filosófico escrito por letrados para letrados y que sirve todavía, en nuestros días, de tema de estudio y de meditación a ciertos pensadores del alto “País de la nieves”.

El Bardo todol indica que el fallecido es un ser liberado si ha sabido reconocer la Luz fundamental y unirse a ella. En el preciso instante en que la fuerza psíquica escapa por la cúspide de la cabeza. El Principio Consciente elige su futuro receptáculo. Eso es, al parecer, lo que ocurre y permite comprender esta reencarnación que sigue siendo tan misteriosa como la vida misma.

Antigua pintura china que representa el séptimo infierno budista, donde las almas de los condenados son perseguidas por demonios y perros feroces hasta que se precipitan en un mortífero río.

Abstenerse de toda accion erronea

Solo tres palabras, algo muy simple: Sabba papassa akaranam.

Abstenerse de toda acción errónea.

Ésta es la enseñanza de todos los Budas. Este es el corazón del Budismo. Pero la gente sigue saltándoselo,no quiere eso. La renunciación de toda acción errónea, grande y pequeña, de las acciones físicas, verbales y mentales… ésa, es la enseñanza de los Budas “Buscar Merito” es la frase tailandesa usada comúnmente. Se refiere a la costumbre tailandesa de ir a monasterios, o “wats”, ofreciendo sus respetos a maestros venerados y haciendo ofrendas. Si tuviéramos que teñir una tela tendríamos que lavarla primero. Pero la mayoría de la gente no hace eso. Sin mirar la tela, la sumerge en la tintura de buenas a primeras. Si la tela está sucia, el teñirla la hace salir aún peor que antes. Pensad sobre ello: Teñir un harapo sucio y viejo,¿se vería bien eso?

¿Lo veis? Así es como enseña el Budismo, pero la mayoría de la gente lo pasa por alto. Prefiere realizar solo buenas obras, pero no desea abandonar la ‘acción errónea’.

Es como decir “el hoyo es muy profundo”.

Todos dicen que el hoyo es muy profundo, nadie dice que su brazo es muy corto. Tenemos que volver a nosotros mismos. Con esta enseñanza tenéis que dar un paso atrás y veros a vosotros mismos.

A veces van en busca de méritos de a montones. Quizás hasta discutan en el ómnibus, o estén borrachos. Preguntadles adonde están yendo y dirán que están buscando mérito. Ellos quieren mérito pero no abandonan el vicio. ¡Nunca encontraran mérito de esa forma!

Así es la gente. Vosotros tenéis que miraros de cerca, miraros avosotros mismos. El Buda enseño a tener concentración y conciencia de uno mismo en todas las situaciones.

El mal surge de las acciones físicas, verbales y mentales. La fuente de todo bien, mal, bienestar y daño está en las acciones, las palabras y pensamientos. ¿Habéis traído vuestras acciones, palabras y pensamientos con vosotros hoy? ¿O los habéis dejado en casa? Ahí es donde tenéis que mirar, justo ahí. No tenéis que mirar muy lejos. Mirad para ver vuestras acciones, palabras y pensamientos. Mirad para ver si vuestra conducta es defectuosa o no.

La gente no mira realmente estas cosas. Como el ama de casa fregandolos platos con el ceño fruncido. ¡Está tan dedicada a fregar los platos que no se da cuenta que su propia mente está sucia! ¿Habéis visto alguna vez esto? Ella sólo ve los platos.

Está mirando demasiado lejos, ¿no es cierto? Algunos de vosotros probablemente habéis experimentado esto, diría yo. Aquí es donde tenéis que mirar. Las personas se concentran en fregar los platos pero dejan que sus propias mentes se ensucien. Esto no es bueno, están olvidándose de ellas mismas.

Hortensia de la Torre

Orden del Budismo Chan

Los impedimentos mentales

Los Impedimentos Mentales

Supongamos que un hombre fuera a tomar un prèstamo y su negocio prosperara de tal manera que pudiera pagar todo el dinero del préstamo y le quedara suficiente dinero como para mantener una esposa; tiempo después cuando considerara esto, se sentiría muy feliz y lleno de alegría.

Supongamos que a un hombre lo fueran a enviar a prisión pero después de un tiempo lo dejaran libre, sano y salvo, sin haber perdido nada de su propiedad; tiempo después, cuando considerara esto, se sentiría feliz y lleno de alegría.

De la misma manera, cuando los impedimentos mentales (avaricia, ira, aburrimiento, preocupación, duda) se han abandonado, uno experimenta como si se pagará una deuda o como si lo liberaran de la prisión.

Buda Gautama

Cuatro formas para enfrentar las cosas

Cuatro formas para enfrentar las cosas.

¿Cuáles son éstas cuatro formas?

Hay una forma de enfrentar las cosas que es placentera en el presente, y en el futuro madura en dolor.

Hay otra forma de enfrentar las cosas que es dolorosa en el presente, y en el futuro madura como dolor.

Hay una forma de enfrentar las cosas que es dolorosa en el presente, y en el futuro madura en una placentera.

Hay una forma de enfrentar las cosas que es placentera en el presente, y en el futuro madura como placentera.

M. Buda Gautama

El triple entendimiento

El Triple Entendimiento

* La observación de una genuina moralidad
* El cultivo de la mente.
* El desarrollo de la Sabiduría

* Una genuina ética

O auténtica moralidad nada tiene que ver con la moralidad convencional, cambiante según las épocas, latitudes, y gobiernos. La genuina ética consiste en poner los medios para que todos los seres sean felices y en evitar en lo posible daño a cualquier ser sintiente. Todo ser sintiente busca la felicidad y a ninguno le gusta el sufrimiento. Cuando una persona comprende vivencialmente esa realidad, se identifica con las otras criaturas y las respeta profundamente.

La genuina moralidad lleva consigo los preceptos morales básicos adecuados, como no matar ni robar, y el correcto sustento de vida, evitando modos de sustento que dañen a los otros, comoel tráfico de armas o la venta de tóxicos. Pero la genuina moralidad por si misma no es suficiente para recobrar la naturaleza búdica. Es de gran ayuda para la mente pura y favorecer incluso la meditación y la sabiduría, pero no basta con observar genuina moralidad para completar la evolución interna. No obstante, la observancia de la genuina ética evita ulteriores corrupciones mentales y nuevos condicionamientos.

* El Cultivo Metódico de la Mente

Es la meditación,o sea un definido y preciso adiestramiento psicomental para reorganizar la psiquisa un nivel más saludable y sabio y para erradicar las raíces de lo negativo, superar las trabas mentales y desencadenar la visión lúcida. Toda mente humana está llena de condicionamientos que producen desdicha y empañan la visión. Sólo mediantela meditación se van erradicando los condicionamientos y modificando el eje de la mente para ésta pueda conquistar la visión esclarecida y la percepción iluminadora. En la esenañanza del M. Buda se le concede primordial importancia a la práctica de la meditación, para superar así los condicionamientos que generan ofuscación y esclavitud de la mente. Sólo en la medida en en que la mente se va purificando, surge la visión cabal.

* La Senda hacia la sabiduría

La Sabiduría no es conocimiento ordinario, ni erudición, ni cultura, ni saber libresco. Todo ello no libera ni afloja los grilletes que encandenan a la mente. La comprensión intelectual sólo es válida si nos permite entender que hay que hallar otro modo de comprensión más existencial y fiable. La sabiduría consiste en ver las cosas como son desde la pureza de la mente. Es la captación directa de las tres características de la existencia y de la Cuatro Noble Verdades. Así como el conocimiento no tiene capacidad liberadora,
la Sabiduría integra y libera.

Cada vislumbre de comprensión real, modifica la mente y el comportamiento.

Genuina ética y cultivo mental conducen a la Sabiduría, el practicante comprende mejor la necesidad de una genuina ética y del cultivo de la mente. Por ello genuina moralidad, cultivo mental y Sabiduría se ensamblan y conforman el denominado triple entendimiento. Los tres factores son necesarios.

El Triple Entendimiento o Triple Disciplina conduce al practicante a la visión supraconsciente de que “Todo lo constituido entraña sufrimiento, todo lo constituido es sin entidad”. Libre de ofuscación, avidez y odio, resueltos los condicionamientos y superadas las trabas, el practicante degusta el sabor sublime de la libertad total.

En la medida que ha ido recorriendo el camino de la purificación, su mente se ha ido desempeñando y su visión se ha ido clarificando.
Esta la visión liberadora y denominada por Buda…”Vipassana”; es la visión pura, que desencadena todos los condicionamientos y da la comprensión clara

La observación del Triple Entendimiento
es la clave y el secreto. Estos factores de Iluminación son los grandes aliados y auxiliares en la ruta hacia lo incondicionado.

Budismo para principiantes

EL BUDISMO (Buda Sasana)

“En el budismo, según sus varias formas, se reconoce la insuficiencia radical de este mundo mudable y se enseña el camino por el que los hombres, con un espíritu devoto y confiado, pueden adquirir, ya sea el estado de perfecta liberación, ya sea la suprema iluminación, por sus propios esfuerzos o apoyados en un auxilio superior. (N.A.2)

Introducción

01.jpg (38750 bytes)Concebido en Asia y extendido por toda ella, el budismo es la expresión histórica de un ideal humano universal. Ofrece al individuo y a la sociedad un sistema de pensamiento y de conducta, basado en el análisis de la existencia influida y limitada por las circunstancias exteriores. Su sistema requiere el máximo esfuerzo humano para lograr la libertad y alcanzar así una existencia perfecta.

Los budistas del sur hablan del “Buda Sasana” (o enseñanza, doctrina, disciplina o religión de Buda) que es lo equivalente a la palabra moderna “budismo”.

El pensamiento de Buda no es totalmente original. Durante siglos aparece en la India una lucha entre concepciones que se esfuerzan para abrirse paso. Existe una cierta “budificación” de las instituciones, ideas o sentimientos que eran plenamente de carácter hindú y que influyen en la doctrina de Sakhyamuni (el Buda). La misma doctrina de la Transmigración de las almas, y de la acción y recompensa de las acciones, son una refundición de las doctrinas brahmánicas.

Al lado de esas dependencias un planteamiento totalmente reformista hará del budismo una doctrina fascinante. Su anti-ritualismo, su negación de Dios, su alta moralidad, su pensmiento pesimista, su reacción anti-casta lo harán universal ya que rompe con muchas de las instituciones hinduístas (típicamente nacionales).

02-Stupa_Laos_JPEG.jpg (25276 bytes)El pensamiento de Buda ha sido interpretado de diferentes modos y maneras por parte de sus seguidores por lo que en el espacio de 25 siglos ha tomado diferentes modos o familias marcando fuertes diferencias y aun contradicciones. La fascinación que ejerció fue tal que se expandió con fuerza por toda Asia y saltó al Japón hizo que los hombres convirtieran al mismo Buda de un mero hombre “iluminado”, un maestro, en un dios. Las familias y escuelas budistas son numerosas lo que hacen del movimiento budista algo apasionante.

El hombre occidental, de todas formas, tiende a considerar el Budismo como una filosofía o una ética de la vida, debido a su fuerte preocupación humanística y su nula referencia a los dioses. Entiende mejor el Buda primitivo que las derivaciones posteriores.

1. El fundador

1.1. Siddharta Gautama, el Sakyamuni.

1buda.jpg (27534 bytes)En el año 563 a J.C. nace en Kapilavastu (Norte de la India) dentro de la familia Gautama, Siddhartha que más tarde se le conocería por los sobrenombres de Sakhyamuni (el asceta de la tribu de los Sakhyas), que llegará a ser conocido universalmente por “Buda” (el iluminado).

La infancia y la juventud de Siddharta transcurrieron dentro de un ambiente de lujo, molicie y opulencia, propio de una familia de la alcurnia de los Gautama. A los 29 años abandonó todo, familia, riqueza, carrera… y se lanzó a una apasionante búsqueda de la verdad, como asceta errante por los polvorientos caminos de la India.

“Me educaron mal, muy mal. Me ungía solamente con sándalo de Benarés, y sólo vestía telas de Benarés. Día y noche tenía abierta sobre mí una sombrilla. Tenía un palacio de verano y otro de invierno, y otro más para la temporada de lluvia. Durante los cuatro meses de lluvia no dejaba el palacio para nada y allí permanecía rodeado de mujeres que tocaban música.”

La tradición explica tan radical decisión debido al fuerte impacto que le produjo el encontrarse con la cruda realidad de la muerte, la vejez, la enfermedad. Los cuadros de la miseria tan típicos en la India se le revelaron con virulencia y le hicieron pensar. Pero en una nueva salida se encontró con un asceta mendicante que pedía limosna dentro de una tranquilidad y serenidad sin límites. El asqueo de la vida sin sentido, el fuerte impacto de la miseria humana, y la alternativa del mendicante le decidieron a buscar su propio camino como mendicante y asceta.

De ese primer contacto con el dolor Gautama concluyó:

“La existencia del hombre está llena de sufrimiento.
Incluso el más feliz de los hombres se ve continuamente amenazado por el dolor y la muerte”.

Una vez regresado a su palacio Gautama sintió una torturante preocupación. Le inquietaba con fuerza la pregunta:

“¿Cómo puede el hombre liberarse del sufrimiento?”

2buda.jpg (32451 bytes)Pero no encontraba respuesta. Más tarde descubrió que el fasto de su vida le impedía hallar la respuesta. Y se decidió a marchar, abandonando esposa, hijo y palacios. Dejó las vestiduras de príncipe y se vistió como los anacoretas, se cortó el cabello y comenzó la vida de un monje mendicante.

1.2. Buda, el iluminado.

3buda.jpg (32948 bytes)Pero Siddharta Gautama, ahora convertido en el asceta silencioso de los Sakyas (“Sakyamuni”), buscará en el Brahmanismo ortodoxo y en otros movimientos heterodoxos como el Jainismo (el culto y la reflexión intelectual) y los abandona por su tremenda frialdad teórica. Busca luego en el yoga (en la dura ascesis de dominio del cuerpo) que le pusieron al borde de la muerte por sus durísimos ayunos.

Los monjes mendicantes y los ermitaños se oponían públicamente al sistema de las castas. Estaban en contra de la división de los hombres en diversos grupos sociales y raciales, en contra de la doctrina por la que no se podía cambiar de casta. Predicaban en cambio la igualdad de derechos para todos los hombres.

Dentro del fenómeno social de las castas existía el dominio religioso de los brahmanes, quienes decían: La salvación de los hombres se efectúa de manera decisiva mediante ritos, las ofrendas, sacrificios y magia que realizamos nosotros los sacerdotes. Por eso la salvación de cada hombre se halla en nuestras manos”. Los monjes y eremitas, también se oponían a esa teoría y opinaban : “Cada hombre realiza él mismo su salvación mediante el esfuerzo personal por una vida espiritual y moral, independientemente de los ritos y ofrendas y las magias de los sacerdotes”

Un tercer punto que se oponían los monjes a los brahmanes era el de que las castas altas disfrutaban de sus riquezas con opulencia. Decían los brahmanes: “nuestros bienes terrenales, y el haber nacido en esta casta, son méritos que hemos contraído en la vida anterior”. Los monjes mendicantes y eremitas contestaban diciendo: “Todas las cosas de este mundo no son más que apariencia, que apartan al hombre de Dios. Hay que despreciarlas. Hemos de subyugar nuestras pasiones, castigar nuestro cuerpo, dirigir nuestro espíritu solamente a Dios”.

Gautama vivió durante siete años entre los eremitas. En este tiempo su actitud quedó definitivamente marcada por un absoluto rechazo del brahmanismo. Junto con ellos buscaba la respuesta a la pregunta: “¿Cómo puede el hombre liberase del sufrimiento?”. Con ellos ayunaba, renunciaba a los placeres del mundo de forma que casi llegó a morir de hambre. Pero no encontraba respuesta satisfactoria. Desengañado dejó de ayunar. Los cinco ascetas que le habían acompañado escandalizados le abandonaron. Gautama siguió solo su búsqueda.

Se da cuenta que ninguna de estas vías le lleva a la liberación y ensaya la “vida media”, una conducta, tan alejada del intelectualismo y de la molicie como de las mortificaciones extremas. Los otros discípulos lo abandonan. El sólo, con sus 35 años, ensaya bajo una higuera a las afueras de la ciudad de Bodh-Gaya, y durante 49 días, esta línea de moderación y reflexión profunda.

Su meditación se basa en buscarle una salida a la existencia ya que Siddharta Gautama comprendió que el sufrimiento era universal (“todo es dolor”). Había que forzar una salida a esa situación, una liberación (“¿Cómo puede el hombre liberarse de su sufrimiento?”). Bajo aquella higuera (la higuera de la sabiduría de la ciudad de Bodh-Gaya), Sakyamuni llegó a la iluminación, a la extinción de todo deseo de vivir esa vida y alcanzó el “nirvana” (la beatitud) mediante el control total de sí mismo, por “la vía media”.

De todas formas Buda no quiso quedarse para él sólo el camino que había encontrado y dedicó 45 años en dar a conocer su descubrimiento, el “dharma” (la verdad, la doctrina, la ley). Lo primero que hizo fue ir a Benarés en busca de sus antiguos compañeros que permanecían en las prácticas del ascetismo del yoga. Allí predicó su primer y famoso sermón “el Sermón de las cuatro nobles verdades”

“He hallado la verdad. Ahora tengo ya respuesta a la pregunta de cómo puede el hombre librarse del sufrimiento”

Acto seguido Gautama dirige a los cinco ascetas la primera predicación de su nueva doctrina. Cuando hubo terminado, los cinco ascetas le rodearon con entusiasmo y le saludaron como el “iluminadísimo”, al hombre que enseña el camino de la liberación del sufrimiento. Desde ahora Gautama será llamado “Buda”, es decir “El Iluminado”.

Los discípulos se le van uniendo a medida que predica por la llanura del Ganges. Las túnicas azafrán de sus seguidores empiezan a ser populares y dicen mucho del impacto que obtuvo. En las épocas de las lluvias Buda organiza la comunidad (“Shanga”) de los “bhikkhus” (o ascetas errantes o como diríamos en occidente, los monjes) que esperaban obtener la liberación por el camino transmitido por el maestro Buda.

Buda murió en Kusinagara (cerca del Nepal) en el año 483 a J.C., a los 80 años de edad, alcanzando el “paranirvana” o extinción completa y definitiva. Su cadáver fue incinerado, siguiendo la tradición india, y sus cenizas repartidas entre sus seguidores que las guardaron como reliquias, enterrándolas y cubriéndolas con un túmulo o “stupa”, lugares que más tarde se convertirían en centros de peregrinación budista.

2. La doctrina

2.1. “Las cuatro nobles verdades”

Buda es hijo de su tiempo y de su cultura. En el “Sermón de las Cuatro Verdades” (centro del Budismo) usa la metodología tradicional de un médico indio. Diagnóstico, busca del origen de la enfermedad, curación y terapia que debe seguir el paciente. Buda se presenta así como un médico universal para curar la enfermedad que aqueja a la humanidad:

Parte doctrinal:

-El dolor y el sufrimiento (primera verdad)

-Cuya causa es el “ansia de vivir” y de gozar (segunda verdad)

-La curación consiste en el cese de esta ansia (tercera verdad)

Parte práctica:

-La terapia a seguir será el “óctuplo camino” (cuarta verdad).

08-mini_Buda_JPEG.jpg (6188 bytes)• Primera verdad: “DUKKA” (Todo es dolor…)

El dolor, el sufrimiento, la imperfección es “Dukka”. El dolor lo invade todo y es universal. No niega la existencia de felicidad sino que ella es impermanente y por lo tanto está incluida en el dolor (“Dukka”). El hombre en este estado de sufrimiento debe liberarse de dicho dolor (del dolor físico, vejez, enfermedad, preocupaciones de la vida…; del dolor del cambio: la felicidad pasajera…; del dolor del egoísmo…)

El dolor minimiza al hombre y lo destruye. Es la causa de toda la infelicidad. Ahí radica la fuente. Quien se da cuenta de todo eso se da cuenta de que todo le habla de frustración, todo es “Dukka”.

“Ahora, ¡oh, bhikkhus!, esta es la noble verdad que se refiere al sufrimiento: el nacimiento va acompañado de dolor, la destrucción es dolorosa, la enfermedad es dolorosa, la muerte es dolorosa.

La unión con el desagradable es dolorosa, dolorosa la separación del agradable; y cualquier deseo ardiente que no ha sido satisfecho, también es doloroso. En suma, las condiciones corporales que surgen de la adhesión, son dolorosas.

Esta es pues, ¡oh bhikkhus!, la noble verdad respecto al sufrimiento” (Mahavagga I ,449)

09-mini_Hilera de budas_JPEG.jpg (5930 bytes)• Segunda verdad: “TAÑHA” (El ansia o sed de vivir…)

“Tañha” es el ansia de vivir (el deseo, el apego por los placeres de los sentidos, la codicia de riqueza y de poder, las ideas e ideales…) Es la auténtica causa del dolor. Todo es sed, todo es “Tañha”.

Esa ansia nos induce a actuar, acumulando “karman” que nos arrastrará al devenir de la rueda de las reencarnaciones (“samsara”).Esa imprevisión o ignorancia debe desaparecer.

Hay que atacar el mal en la propia raíz para verse libre del insoportable ciclo de la transmigración del alma. Si no se logra hacer desaparecer la causa, la enfermedad durará y aun más, crecerá. El dolor (“dukka”) será potenciado por esa ansia ignorante, ese espejismo que es “tañha”.

“Ahora esta, ¡oh bhikkhus!, es la noble verdad respecto del origen del sufrimiento: Verdaderamente, es aquel deseo que causa la renovación de la existencia, acompañado por el goce sensual, buscando la satisfacción ora allí, ora allá, el deseo por la satisfacción de las pasiones, el deseo por una vida futura, y el deseo por la felicidad en esta vida.

Esta, pues, ¡oh bhikkhus!, es la noble verdad concerniente al origen del sufrimiento” (Mahavagga I ,449)

10-mini_Stupa Bangkok_JPEG.jpg (3698 bytes)•Tercera verdad: “NIRODHA” (El cese del dolor, la libertad)

¿El dolor (“dukka”) puede dejar de existir? ¿El hombre se puede liberar de esa realidad?.

“Nirodha” significa cese y a la vez conquista de la libertad. Es como un fuego que llega a extinguirse cuando los carbones se extinguen.

“Ahora ésta, ¡oh bhikkhus!, es la noble verdad respecto de la destrucción del sufrimiento: Verdaderamente, es la destrucción de las pasiones, de esta sed tan real; es el apartarse, el estar libre, el no detenerse por más tiempo cerca de la sed.

Esta, entonces, ¡oh bhikkhus!, es la noble verdad respecto de la destrucción del sufrimiento” ((Mahavagga I ,449))

El estado de cesación de esta llama o dolor es el “nirvana” o estado de cesación del dolor. Tiene dos estadios: la cesación del dolor en esta vida o “nirvana” y la fase definitiva después de la muerte física que es la fase de “paranirvana”.

Para llegar a esa situación de felicidad permanente hay que pasar por la lucha del “Nirodha” o cesación del dolor por rompimiento de la concatenación causal: Tañha-Dukka-Nirhoda-Nirvana.

Pero hay que precisar que el Nirhora no es nihilismo sino autocontrol interno, serenidad y ascesis.

11-mini_Monjes tailand_JPEG.jpg (5468 bytes)• Cuarta verdad: “MAGGA” (El óctuple sendero…)

“Magga” es el camino para llegar al “nirvana”. El camino posee ocho sendas (el “óctuple camino”) y no es más que una ética de la liberación, un proceder para llegar al “nirvana”. Es un camino lleno de exigencia y moderación. Buda huye de las mortificaciones y penitencias exageradas, que nada logran, y de la vida “instalada” y muelle que te embota y destruye. Entre ambas se abre la alternativa equilibrada que se formula así:

“Esta es, ¡oh bhikkhus!, la noble verdad respecto al camino que guía a la destrucción de la pena. Verdaderamente, este es el noble camino óctuple, es decir:

La verdadera opinión; la verdadera aspiración; el verdadero lenguaje; el verdadero comportamiento; la verdadera subsistencia; el verdadero esfuerzo; los verdaderos pensamientos y la verdadera contemplación.

Esta, entonces, ¡oh bhikkhus!, es la noble verdad respecto de la destitución de las tristezas’. ((Mahavagga I ,449))

~2.2. “Tri-Sikkha” (o Triple Ejercicio u Óctuple Camino)

Ejercicio 1º : Conducta ética (“Sila”) :

14-Buda_bn_JPEG.jpg (42184 bytes)(1)-Rectas palabras

(2)-Recta acción

(3)-Rectos medios de vida

El respeto a los seres vivos (mandamiento “Ahimsa”), a la propiedad de otros, a su dignidad humana y un comportamiento de dominio de sí mismo es básico en el budista. La ética budista es un comportamiento social basado en la finura y la delicadeza, en el respeto al otro y al pacifismo.

Ejercicio 2º: Disciplina mental (“Samadhi”)

(4)-Recto esfuerzo

(5)-Recta atención

(6)-Recta concentración

Este estrato toca más de lleno a la interioridad individual de la persona. Es la lucha del corazón, la lucha por la serenidad interior y la concentración religiosa. Es un instrumento para elevarse a la perfección del nirvana.

Ejercicio 3º : Introspección (“Pañña”)

(7)-Recto pensamiento

(8)-Recta comprensión

Es la adquisición de la más alta sabiduría y de la emancipación espiritual. Culmina en la extinción completa de las causa de la transmigración (la rueda de las reencarnaciones) y nos lanza a la inmortalidad o “nirvana”. Este estrato sólo es posible cuando dominamos toda ignorancia, fuente de todo dolor.

Este Óctuple Camino, brindado por Buda a toda persona que quiera seguirlo (disciplina corporal, verbal y mental) es capaz de autodesarrollar y purificar al hombre.2.2. El “Nirvana”

15-Buda acostado_nirvana_JPEG.jpg (50138 bytes)Toda la doctrina de Buda está identificada con este problema. Este constituye el centro donde conectan todas las demás explicaciones. Así pues estudiar el “nirvana” es estudiar el budismo.

Pero es un término difícil de explicar con claridad. El mismo Buda tuvo que recurrir a parábolas sibilinas para intentar explicarlo.

La palabra proviene del brahmanismo hindú y significa “extinción”. Al igual que se extingue una lámpara al faltarle el aceite, el hombre que no alienta sus deseos apaga la causa de sus males y estos se apagan definitivamente. Entonces el hombre logra librarse de las reencarnacione (entra en un estado de “nirvana”).

La liberación se puede obtener aquí en la tierra, en vida (“Nirvana”) y se puede obtener más allá de la muerte física del cuerpo una vez alcanzado el primero (“Paranirvana”). Son como dos fases de un mismo proceso, una provisional y otra definitiva.

De todas formas más que entender qué es el “nirvana” lo que importa es buscarlo. Por eso el budismo es más una concepción fenomenológica , una disciplina ética para alcanzar la suprema serenidad.

Muchos han llegado a la conclusión de que el Nirvana es la nada. Pero esta conclusión es falsa. El Nirvana no es de la tierra; por esa razón fallan todos lo conceptos terrenales que intentan describirlo. Del nirvana sólo podemos saber una cosa:

“Quien consigue el nirvana, lo experimenta como una felicidad indescriptible. Pero si en la hora de la muerte el deseo todavía influye sobre el hombre, éste no consigue llegar al Nirvana, sino que los elementos agregados que constituyen su cuerpo pasan a formar otro cuerpo que ha de vivir nuevamente y volver a sufrir”

Todo esto entendió Gautama en la iluminación recibida bajo el árbol Pippala. Al principio guardó para sí estos conocimientos, pero más tarde sintió el impulso de compartir con otros hombres la verdad salvadora. Pasados unos días después de la iluminación Gautama se fue a Benarés. En un parque de la ciudad santa encontró a aquellos cinco.

3. Las fuentes

17-Canon Palí(ti-pitaka)_JPEG.jpg (31427 bytes)Buda no escribió nada. Sus discípulos recogieron sus máximas y dichos, su enseñanza y los guardaron en su memoria. Solo cuando se empezó a debilitar el recuerdo se pusieron por escrito.

Durante mucho tiempo se ha considerado el Canon Palí (“Theravada”) como el transmisor auténtico y fidedigno del pensamiento y dichos de Buda. El Canon Palí se divide en tres partes o cestos llamadas “pitakas” (tri-pitaka):

3.1.- SUTTA-PITAKA:

Cesto o colección del “Discurso”, en el cual están compilados los dichos de Buda. Constituye la colección dogmática del budismo. Se divide en cuatro colecciones secundarias o “nikayas” donde se recogen las enseñanzas de Buda: De esta larga obra se ha hecho popular en occidente el “Dhammapada” o “camino de la verdad” (especie de resumen o antología de dichos y sentencias donde se expone lo más esencial del budismo para llegar al “nirvana”)

3.2.- VINAYA-PITAKA: Normas o disciplina de la cofraternidad o monacato budista. Muy útil para la descripción de las reglas monásticas, las ceremonias, las devociones, las sanciones …etc. Esta sección no alcanza el interés de los laicos que siguen las enseñanzas del maestro pero sin una reglamentación precisa.

3.3.- ABHIDHAMMA-PITAKA: Constituye una investigación supletoria. Una serie de tratados más detallados donde se hace una explicación de más alto nivel a base de diálogos entre discípulos y maestros, como en los catecismos clásicos.

4.LOS MONJES BUDISTAS

monjes.jpg (81918 bytes)Los cinco ascetas, que pasaron a la posteridad como los primeros discípulos de Buda, constituyeron el núcleo de una comunidad monacal que día tras día iría aumentado. Sin duda alguna el tipo ideal de los budistas sigue siendo hoy el monje, en oposición al brahmanismo que tiene como ideal al brahmán: el hombre rico y dominador, orgulloso de su casta que, primorosamente ataviado, realiza las ofrendas. Los monjes budistas viven retirados en sus monasterios. No pueden tomar parte en danzas profanas, sesiones de teatro, fiestas en general. No pueden llevar adornos, no pueden usar ungüentos y perfumes.

Ataviados con su típica túnica azafrán, con algún utensilio para la reparación del vestido, rasurada la cabeza y con un cordón de 108 bolas para rezar y una escudilla para mendigar el alimento… el monje caracteriza al budismo.

El monje ha de mendigar el alimento de cada día. Al pedir limosna hace un favor al laico pues le ofrece ocasión de realizar una buena obra. Por esa razón es el laico quien le da las gracias al monje a la par que le ofrece el alimento.

El ideal de vida de un budista no es llegar a ser hombre santo, sino hombre “iluminado”. Toda la austeridad se encamina sólo a apagar el deseo interior con el fin de poseer la ansiada libertad por el ejercicio de la meditación.

Es esta meditación por donde llegará a la experiencia profunda del yo y del no-yo. La perfección consiste en que el monje pierda conciencia de todo. Entonces sobreviene la liberación. Así llega a percibir cómo el mundo y su cambio constante, con todo el sufrimiento, no es más que una apariencia. De este modo llega a pregustar la alegría eterna del Nirvana. Cuando despierte de la meditación a la vida normal, volverá al mundo del sufrimiento, pero habrá experimentado un poco la felicidad del Nirvana. Con la repetición irá anulando dentro de si todo deseo. Si al morir está libre de los afanes de la vida, entrará definitivamente en el Nirvana.

Los que no tienen fueras para una forma de vida tan difícil y tan llena de renuncias viven en familia como unos laicos budistas. Estos, sin abandonar la vida del mundo, deben atenerse a los cinco preceptos morales de Buda:

-No matarás ninguna vida;

-No cogerás lo que no se te ha dado;

-No practicarás la impureza;

-No dirás mentiras;

-No tomarás bebidas fuertes ni licores intoxicantes que causen somnolencia.”

5. El “A-Teísmo” de Buda

Buda nunca dio respuesta a la pregunta sobre Dios. Cuando le preguntaban si había o no Dios, si había o no alma… su respuesta siempre fue:

“Nada digo sobre las dos cosas. No diré ninguna respuesta sobre ello, porque yo no sé nada seguro sobre Dios y sobre el alma”.

19.jpg (29507 bytes)Buda es un ateo frente a la religión brahmánica ya que no acepta la doctrina del “Alma Universal”(Brahma) y la identidad del alma individual con Brahma, porque -según aquella- se logra la liberación de la Rueda de las Reencarnaciones

Buda sin embargo, no niega la existencia de los dioses. Pero éstos nada pueden hacer por el hombre ya que ellos también están sujetos a la Ley del Karman y a la transitoriedad. Estos dioses son para él una de las cinco posibilidades de las reencarnaciones (plantas, animales, espíritus inferiores, hombres y dioses)

Los Devas o dioses son así seres inferiores al “nirvanado” (aquellos que han logrado liberarse del Dolor mediante las enseñanzas de Buda). Los dioses “sienten envidia del ‘arhant'”. Por eso Buda aconsejó a sus discípulos que no tuvieran pensamiento alguno sobre esas cuestiones. Les decía:

“¿Por qué no he enseñado a mis discípulos si el mundo acabará o no acabará, o si el santo después de la muerte continuará viviendo o no?. Porque el conocimiento de estas cosas no aporta ningún provecho en el camino de la liberación ya que no sirve para la paz y para la iluminación. Mirad, lo que Buda ha enseñado a los suyos es la verdad sobre el sufrimiento y sobre la liberación del sufrimiento. Por tanto a vosotros monjes, queda como no revelado lo que no os ha sido por mi revelado.”

6. La expansión del Budismo

20-Expansión Budismo_Mapa_JPEG.jpg (36019 bytes)Para la época en que murió Buda, a la edad de 80 años, el budismo había echado raíces y se había convertido en una fuerza moral efectiva en la India. El rey Asoka fue uno de los grandes propulsores en el s. III a J.C. Y esa fuerza duró mil años. Cuando el propio hinduismo instituyó, por fin ciertas reformas, reconquistó su primitivo dominio en el pueblo y la influencia del budismo en la India empezó a disminuir. Por ese tiempo el budismo había penetrado en Ceilán, Birmania y Tailandia (Hinnayana), China, Corea y Japón (Mahayana), y Tíbet (Tántrico). desde el final de la II Guerra Mundial parece que el budismo se recupera en la India sobre todo desde el VI Concilio Budista celebrado en Rangún de 1954 al 56.

Cada país en donde penetraba el budismo sentía el impacto de la fuerza moral de esta religión, pero a la vez recibía influencias de las condiciones locales con que se topaba, cambiando así sus ritos, culto y monacato. Poco a poco las escisiones se fueron haciendo patentes no solo en lo cultual sino también en las interpretaciones de las enseñanzas de Buda. Dichas escisiones nunca afectan a los dogmas básicos. Vemos pues la enorme capacidad de adaptación que tuvo el budismo a los ambientes y a las épocas diferentes.

Centrémonos en las dos grandes divisiones del Budismo: el Hinnayana (o pequeño vehículo de salvación) y el Mahayana ( o gran vehículo de salvación).

6.1. EL BUDISMO “THERAVADA” (o Hinnayana)

21-Stupa de Ananda_JPEG.jpg (32862 bytes)Extendido por el sur asiático (Ceilán, , Camboya, Tailandia y Vietnam) merece llamarse budismo estricto o literal. Es la práctica ortodoxa de las reglas de Buda, tal como habían sido fijadas por su discípulo preferido Ananda. Es el “Theravada” o doctrina de los antíguos que constituye la doctrina ortodoxa aprobada por los concilios de monjes, especialmente el Concilio de Pataliputra que fija el Canon Palí.

El Theravada preocupado por la salvación de los monjes cree que cada individuo debe buscar y hallar su propia salvación al modo de los “arhat” o santones solitarios). Su principal guía es la cabeza o capacidad racional y su camino es la sabiduría. Es, por lo tanto una vía más intelectual, propia de los monjes. Buda es considerado como un hombre santo y un maestro pero jamás se le deifica como acontece en el Mahayana. El pequeño camino evita los rituales y las plegarias. Es por lo tanto un ejercicio ético de exigencia muy personal.

Para el Hinnayana Buda es un hombre que, gracias su especial iluminación, conoció el misterio básico del mundo y ha enseñado el camino para conseguir la liberación del sufrimiento. Los santuarios erigidos lo son no para adorarlo sino para recordar a Buda (un hombre iluminado, un maestro a seguir)

6.2. EL BUDISMO “MAHAYANA”

25-Buda_tapìz meditacion_JPEG.jpg (60065 bytes)Las primeras manifestaciones del Mahayana (o vehículo que aspira a la salvación universal de todos los hombres) están fechadas alrededor del s. I a J.C. Al comienzo se denominó “Sendero de los Boddhisattvas” (Boddhissattva = persona que se halla muy cerca del Nirvana, modelo de bondad y de compasión que pospone indefinidamente su liberación personal para facilitar la salvación de los demás, como lo hizo Buda).

Un bodhissattva es, pues, un salvador. Un bodhissattva gana méritos para la humanidad practicando las «Seis Virtudes», o ÒParamirasÓ. limosna, moralidad, paciencia, coraje ante las dificultades, meditación y sabiduría. Una virtud es practicada a la perfección cuando se lleva a cabo con la mente libre de remordimientos, motivos ulteriores o egoísmo.

Los bodhissattvas pueden reencarnarse como humanos o, incluso, como animales. Pero los bodhissattvas más poderosos son los que están en el Cielo. E1 budismo mahayana desarrolló la idea de un cielo poblado de bodhissattvas a los que se podía adorar y hacerles peticiones mediante la plegaria. En los cielos hay también budas de tiempos anteriores (iluminados) y un barda del futuro Maitreya.

El boddhissattva no exige de sus devotos el camino austero del monje, sino que fomenta la devoción personal. Es el sendero de los laicos. La religión es así trabajo de todos ya que ningún hombre vive solo. La salvación personal debe estar involucrada a la salvación de los otros. Su principal guía es el corazón (la experiencia y el sentimiento interior) y su camino es la compasión. Es por lo tanto un camino menos estricto y más popular. Y como popular considera a Buda como un Salvador( un Boddhdissattva) llenando sus manifestaciones religiosos de un complejo ritual y de numerosos oraciones personales.

El Mahayana da una enorme importancia a la devoción laica y a las mitologías de liberación. Los Boddissattvas son venerados como maestros e incluso divinizados por la piedad popular. Algunos como Amitabda (venerado en la India a partir del s. I y después del s. VIII en el resto de Asia) propone el lograr la salvación (una especie de estado intermedio antes de llegar al nirvana, con sólo acordarse de él en el momento de la muerte. Una vez allí la liberación final está asegurada, sin mediar esfuerzo. Es pues el triunfo total de la devoción. Sus teólogos son muy audaces sobre todo si recordamos el rigorismo de la predicación de Buda.

A través de las dos escuelas las ideas del budismo mahayana ofrecían una religión de dos niveles. Una para los intelectuales , Yogakara, (exigente y minoritaria) y otra, Madyamika, a nivel popular basada en devoción a los budas y bodhissattvas. (más asequible para la mayoría). Hoy el Mahayana está extendido por China, Tíbet, Corea y Japón. En el Tíbet existe una variante muy interesante, el lamaísmo, y en el Japón triunfa con las variantes de las sectas Zen.

Diferencias entre el Budismo Hinnayana y el Mahayana
Tema Theravada (Hinnayana)

Mahayana
1. El ideal arhat bodhisattva.
2. La meta el Nirvana (Óctuple Camino) la budización (por la devoción)
3. Consecución de la liberación el esfuerzo individual la fe y la ayuda por la oración…
4. Buda un maestro humano con esencia divina
5. Movimiento principal la Sangha (monjes) el laicado (más popular)
6. El más alto atributo adquirir la sabiduría adquirir la compasión
7. Escrituras sólo Theravanda (en palí) añaden otros libros (en sánscrito)
8. Pensamiento religioso Una escuela (unidad) Varias escuelas (pluralidad)
9. Expansión Meridional Septentrional

6.3. EL BUDISMO Tántrico o “lamaísmo”

27-Mandala tibetano-1_JPEG.jpg (27485 bytes)Alrededor del siglo V de nuestra era surgió en la India una nueva variedad de budismo. Se llamaba Vajrayana, (“el rayo”) o budismo tántrico (“vehículo diamante”). La filosofía mahayana es la razón fundamental del Vajrayana, aunque éste utilizaba una nueva técnica para alcanzar la salvación: el tantra.

Tantra es el nombre con que se denominan los manuales o guías que contienen las técnicas para alcanzar la Iluminación. E1 tantrismo desarrolló un sistema de creencias y prácticas comprendidas sólo por sus adeptos, llamados gurus, los cuales eran expertos en el uso de manuales. Los tantras utilizaban hechizos mágicos (mantras), diagramas ocultos (mándalas) y gestos manuales simbólicos (mudras). La meta consistía en alcanzar una unión mística con la realidad más allá de la realidad cotidiana. Por eso se simboliza esta unión mística como la unión entre un bodhisattvas y su consorte femenino. A través de la meditación, el devoto alcanzaba una unidad interior con el bodhisattva, experimentando la felicidad y la Realidad Suprema.

El Vajrayana se extendió por el Nepal, China y Japón. Pero su gran desarrollo y elaboración tuvo lugar en el Tíbet donde a los budistas se les llamó “lamas” . Un lama no necesitaba ser monje. Los conocimientos del tantra eran todo lo que se requería. E1 lama llegó a tener tanta importancia en el Tíbet que a su religión se la llama a veces lamaísmo.

29-Dalai Lama-4 JPEG.jpg (34083 bytes)En el siglo XV, un líder religioso llamado Tsong-kha-pa fundó la escuela Ge-luk-pa que fue importante por que fundó monasterios cerca de Lhasa, la capital, e hizo de esta ciudad el centro de su grupo religioso, y porque de sus sucesores surgió el primer Dalai Lama (“Océano de Sabiduría”) que es a la vez jefe espiritual y político del Tíbet. (actualmente en el exilio desde que el gobierno comunista chino ocupó el país en 1959).

La doctrina tibetana reconoce tres caminos para alcanzar la meta final del budismo. Los métodos tienen en cuenta los diferentes niveles de preparación espiritual de los practicantes. El primero de estos métodos es el Theravada, el cual lleva al devoto, a través de su autodisciplina, al objetivo de la autoemancipación. Muchos monjes practican esta disciplina. El segundo es el Mahayana, que es el camino que lleva al discernimiento filosófico para la misión de salvar a otros. El tercero es el Vajrayana, camino de ritos tántricos y meditaciones místicas. En un nivel superior, se asumen los tres caminos como escalones para llegar al ÓVeh’culo ònico” (Ekayana).

Los lamas dedican gran parte de su vida a estudiar los primeros dos vehículos antes de considerarse preparados para abordar los tantras que explican los rituales, la meditación mística y la magia que puede llevar a la Sabiduría Suprema y aún así necesitan la guía de los grandes maestros para acceder a este grado tan sublime de sabiduría . Los tres caminos del Tíbet han hecho de este país un auténtico resumen vivo del budismo.

BIBLIOGRAFÍA:

*
* BUDA: Dhamapada.- Ed. Debate.- M. 1999
* Coomaraswamy, Ananda K.; Buddha y el evangelio budista.- Paidós, 1999
* Coomaraswamy, Ananda K. Hinduísmo y Budismo.- Paidós, 1999
* Glasenapp, H: El Budismo, una religión sin dios. Barral, 1974
* Hattstein, Markus: Religiones del mundo . Könemann, 1997
* Kotler, Arnold: Lecturas budistas ( I y II).- Paidós. Col. Orientalia. Barna. 1998
* Sangharakshita: Introducción al budismo tiebetano., Oniro, Barna. 1996
Schvon, Frithjof: Tesoros del budismo. Paidós. Col. Col. Orientalia. Barna, 1998

La espada de la sabiduria del discernimiento

El Bodhisattva con la Espada de la Sabiduría del Discernimiento

La percepción de la verdad no es para todas las mentes

Estas son condiciones que la excluyen forzosamente:
el deseo, la avaricia, la ignorancia y el orgullo,
la dicha en la sensación,
el amor al pasado,
el miedo al futuro,
la ira del presente,
la incapacidad de ver
con claridad.
Estas son condiciones que la hacen más próxima:
la esperanza, el gozo en el cambio, el amor a todas las acciones creativas,
el crecimiento individual,
la aceptación de nuevas ideas,
la capacidad de comprender
lo posible.
Estas son características de cuando la verdad está aquí:
la aceptación de que todas las formas tienen una idéntica realidad, una visión clara a través de la distancia,
amor por todo los que es y lo que no es, dicha en lo que existe
Con mi espada Yo derribaré a aquellos que presumen haber viajado a lugares que les son prohibidos.
Yo decido el mérito del discípulo, el talento del maestro, la distancia que ambos deben andar.
Mi libro registra el karma de cada uno de sus actos
y determina el mundo en que deben ellos habitar.

Yo custodio la puerta de la Verdad inextinguible.
Ni la misericordia ni el poder puede hacerme cambiar mis decisiones.
Yo llevo el atuendo del juez y del jurado.
A través del abismo sostengo mi dorada escalera para auxiliar al que es digno
mientras que el indigno que trata de cruzar
encuentra únicamente arenas movedizas a su alrededor.

Soy azul y dorado, y también soy blanco: no me doblo ni a la derecha ni a la izquierda.
Si deseas ascender a la verdad, entonces debe hacer esto:
Observa en lo profundo de tu corazón, siente todas las cadenas que te atan, que te detienen como un ancla
a los planos de la ilusión,
no dejaré que un solo eslabón cruce las puertas sagradas.
Un entendimiento imparcial, grandioso en la sabiduría de muchos mundos sólo a estos
Yo les permitiré pasar.
Que ellos puedan tener sabiduría para cambiarla
por La Verdad.

Yo no dejaré pasar a través mío ni dramas, ni mantras.
Aquellos que están listos pasarán.
El resto deberá seguir esforzándose, insatisfechos, peleando entre ellos,
dejando salir su auténtica naturaleza a la superficie;
y se preguntarán:
¿Por qué no fui yo escogido?

Tú que deseas ascender sigue el camino
a la cueva del recogimiento,
en las montañas del ‘yo’,
y cuando hayas encontrado lo Escondido vuelve a mí y
Yo te bendeciré y te señalaré
tu camino.

Excelente traducción al español por el estudiante y amigo Dr. Ricardo de León, de México.

Rev.Yin Zhi Shakya, OHY
Jueves, 14 de octubre de 2004

Diez toros (budismo zen)

DIEZ TOROS

por Kakuan 
Copiado por  Nyogen Senzaki y Paul Reps . 
Ilustrado por Tomikichiro Tokuriki
 
 
—– 
Prólogo 
 
por Nyogen Senzaki y Paul Reps 
 
La iluminación que busca el Zen, y por la que el Zen existe, viene de sí mismo. 
Como consciencia, no existe el instante, lo produce la sucesión. Pero el hombre físico camina en el tiempo igual que anda en el lodo arrastrando sus pies en su verdadera naturaleza. 
De la misma manera el Zen deber comprometerse y reconocer los pasos progresivos de la conciencia que conducen de forma progresiva al instante de la iluminación. 
 
De esto trata este libro. En siglo XII el maestro Chino Kakuan dibujó los cuadros de los diez toros, basándose en los anteriores toros Taoistas y escribió los comentarios en prosa y verso que aquí se han traducido.  Su versión era puro Zen, yendo más allá de las versiones anteriores, que habían terminado con la nada del octavo cuadro. Desde siempre ha sido una fuente constante de inspiración para estudiosos, y muchas ilustraciones de los toros de Kakuan se han hecho a  través de los siglos.   
 
Las ilustraciones que se reproducen aquí son las versiones modernas de Kyoto tomadas de notas del artista Tomikichiro Tokuriki, descendiente de una larga línea de artistas y propietarios de la casa de té Daruma-do (Daruma es el nombre Japonés para Bodhidharma, el primer patriarca Zen). Sus grabados son tan deliciosos, sugerentes y al mimo tiempo significativos como deben haber sido los cuadros originales de Kakuan. 
 
El texto es la adaptación y traducción de la primera edición de Nyogen Senzaki y Paul Reps. 
 
El toro es el principio eterno de vida, verdad en la acción. Los diez toros representan la secuencia de pasos en la realización de la verdadera naturaleza de uno mismo. 
 
Esta sucesión es tan potente hoy como lo era cuando Kakuan (1100-1200) la desarrolló a partir de trabajos anteriores e hizo sus cuadros de toros. En occidente desarrollamos un trabajo similar ocho siglos después para conservar el vigor de este proceso ilustrado por el toro. [Tal como en Kyoto,  hizo Tokuriki ocho siglos antes.] 
 
La comprensión del principio creativo trasciende cualquier tiempo o lugar. Los diez Toros son más que poesía, más que cuadros. Es una revelación espiritual que se manifiesta de forma paralela en cada Biblia de experiencia humana. Pueda el lector, como el patriarca Chino, descubrir las huellas de su potencial interno y, llevando su báculo y el odre de vino de su deseo más profundo, frecuentar el mercado y facilitar la iluminación a otros. 

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