¿Cuáles son los recursos de la medicina tradicional indígena?

43.- ¿Cuáles son los recursos de la medicina tradicional indígena?
 
Los párrafos en negro se refieren a: ” Medicina ”

Los recursos de la medicina tradicional indígena constituyen un vasto conjunto de elementos materiales y simbólicos adaptados a las características teóricas y prácticas de este saber médico. A diferencia de la medicina alópata, académica o científica, cuyos terapeutas se concentran esencialmente en el combate a un amplio número de padecimientos articulados en el eje salud/enfermedad, los médicos tradicionales indígenas amplían su campo de atención para concurrir a satisfacer una demanda estructurada en el binomio equilibrio/desequilibrio, y para ello emplean recursos materiales (plantas, animales, minerales, hidroterapia, etcétera) y simbólicos (ligados a rituales y a procedimientos de eficacia simbólica), además de sistemas de diagnóstico, clasificación y tratamientos de causas enfermantes y desequilibrantes asociadas a su particular cosmovisión. Por supuesto, el recurso principal siguen siendo los numerosos terapeutas tradicionales distribuidos por todo el país que asisten a varios millones de seres humanos, haciendo de la medicina indígena uno de los más importantes bienes culturales con que cuentan las comunidades.

Al estudiarla, es posible distinguir cuatro grandes campos en los que se ordenan los conceptos, creencias, prácticas y recursos:

a)El recurso humano, formado por miles de terapeutas conocidos popularmente como curanderos, hueseros, parteras, hierberos, sobadores, ensalmadores, graniceros, rezadores o rezanderos, viboreros o culebreros, y que en las lenguas indígenas reciben denominaciones específicas el h’ilol (de tzeltales y tzotziles), el h’men (de los mayas), el mara’akáme (de los huicholes), etcétera, nombres que pueden designar al “generalista” o al “especialista” local. Aunque no existen registros exhaustivos que nos den cifras precisas sobre el número de terapeutas tradicionales indígenas, y aunque las existentes se encuentren desactualizadas, disponemos de cierta información indicativa de su importancia: 1) En una encuesta realizada en 1984 en 3,025 comunidades en donde se ubicaban unidades médicas del Programa IMSS-COPLAMAR (actualmente IMSS-Oportunidades), se registraron 13,034 terapeutas tradicionales (es decir,había un médico por cada cuatro terapeutas tradicionales); 2) El propio IMSS y la Secretaría de Salud registraron en 1994 más de 23,000 parteras rurales;3) La CDI (ex INI) y el propio IMSS-Oportunidades mantienen contacto con alrededor de 200 organizaciones de médicos indígenas.

b)Los procedimientos y métodos diagnósticos y terapéuticos,donde se ponen en juego numerosos mecanismos que -en una medicina con escasísima tecnología- requieren de la observación refinada o de la aplicación de otros métodos (adivinatorios, por ejemplo) para detectar los fenómenos desequilibrantes, así como para efectuar los tratamientos recurriendo a un conjunto de maniobras (sobadas, masajes, manteadas, limpias; tallar, fajar, chupar la mollera, levantar la sombra, paladear, etcétera).

c)Las causas de demanda de atención, es decir, el conjunto sistematizado de factores que son responsables de las enfermedades propiamente dichas (gastrointestinales, respiratorias, músculo-esqueléticas, gineco-obstétricas, etcétera), pero también de síndromes de filiación cultural (es decir, fenómenos desequilibrantes que son reconocidos, interpretados y tratados conforme a las claves culturales del grupo) como el susto, el mal de ojo, los aires, el mal puesto, etcétera. Es preciso subrayar que muchas veces el terapeuta indígena es requerido para actuar en ciertos campos de la vida social que no se vinculan directamente con la enfermedad: “limpiar” una casa nueva que se va a habitar, conducir un ritual propiciatorio en la milpa para propiciar las buenas cosechas, participar en complicados rituales que se asocian a los elementos de la cosmovisión, interpretar fenómenos meteorológicos y astronómicos, participar en el sistema de cargos político-religioso, entre otros. Diversas investigaciones han mostrado que existen un número de causas bien definidas que se repiten a lo largo y ancho del país:

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LAS DIEZ PRINCIPALES CAUSAS DE DEMANDA DE ATENCIÓN
DE LA MEDICINA TRADICIONAL

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Causa de demanda de atención  %

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1. Mal de ojo  55.03
2.Empacho  49.26
3. Susto-Espanto 33.81
4. Caída de mollera
30.75
5.Disentería
22.57 
6. Aires
20.95
7.Diarrea
18.72
8. Torceduras (músculo-esqueléticas)  18.41
9. Daño (brujería)  14.04
10. Anginas  9.98

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Fuente: Programa de Interrelación de la Medicina Tradicional con la Medicina Institucional. Datos nacionales (1984). (ZOLLA et al.: 1988:12). Los porcentajes se obtuvieron conforme al número de menciones de cada causa en la encuesta.

d)Los recursos terapéuticos materiales y simbólicos. En la materia médica tradicional, al lado de los animales, los minerales y la hidroterapia, destaca el vastísimo campo de la herbolaria medicinal[16], una de las más ricas del mundo en variedad de especies botánicas medicinales, tanto de especies nativas como exóticas o introducidas. Junto a ellos, la medicina tradicional apela a recursos simbólicos de muy diversa naturaleza: limpias, mandas, rezos, ensalmos, etcétera.

En las áreas rurales del México indígena, la medicina tradicional indígena forma junto a las medicinas doméstica o casera, y a la medicina académica o alopática, lo que en otros escritos hemos denominado el “sistema real de salud”. (ZOLLA, 2000).

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[16] El lector interesado en la herbolaria medicinal de México puede consultar, entre otros materiales, los tres volúmenes dedicados al tema que forman parte de la Biblioteca de la medicina tradicional mexicana, publicada por el INI en 1994. Véase: ARGUETA VILLAMAR, Arturo (Coord. Gral.), Atlas de las plantas de la medicina tradicional mexicana, México, INI, 1994. La obra contiene mil monografías y una gran cantidad de referencias bibliográficas.