“EL COMPLEJO DEL CRIOLLISMO”

“EL COMPLEJO DEL CRIOLLISMO”

    INTRODUCCIÓN

    La historiografía oficial ha establecido un supuesto principal para consolidar su teoría. Este supuesto hace referencia a que “la conquista española de América Latina ha sido concebida como el inicio de una mezcla racial y biocultural”[1]. Bajo este argumento se han consolidado en la actualidad dos conceptos ampliamente aceptados por los sectores oficiales. El primero habla de que América fue conquistada y colonizada, en otras palabras, que fue vencida y aculturizada. Y el segundo, que se ha formado una nueva cultura, en donde lo blanco-mestizo es lo predominante, de ahí la denominación oficial de latinos o hispanos, y de América Latina o Latinoamérica.

    Por el contrario, voy a intentar demostrar que América (Norte, Centro y Sur) fue tan solo ocupada o invadida, concepto contrario al de conquistada, pues este tiene una significación de que América en su propio proceso de más de 30.000 años fue extinguida en estos 500 anos. Mas por el contrario, voy a oponer la teoría de que América milenaria y cosmica ha permanecido y sigue existiendo en su esencia básica. Que un hubo proceso violento de enajenación pero cuyas raíces siempre han estado vivas y nuevamente están creciendo y volviendo a germinar en nuevos aromas[2] para tejer u! n nuevo proceso, esta vez a nivel de toda la especie humana.

    Sostengo que América en estos 500 años procedió a absorber[3] los elementos bioculturales occidentales traídos por los europeos, y no al contrario. Hablar de absorción es diferente al de mezcla, pues la idea de mezcla asociada con conquista, nos da el concepto de superposición y de superioridad, de uno sobre otro. Al mismo tiempo es un cuestionamiento al concepto de cultura mestiza, pues si bien ha habido un encuentro, este es de impregnacion donde la cultura asentada geograficamente dentro de un territorio asimila a largo plazo a aquella que es contraria a la naturaleza pro! pia. Es decir, sostengo que la cultura en un ultima instancia la hace la naturaleza. Nadie puede crear nada mas alla de las leyes de la naturaleza o de la creación. No es de equilibrio, vivir como esquimal en el Africa. Entonces, opongo el criterio de que es la madre tierra la que hace a sus hijos. De que somos hijos de la tierra y no al contrario, pues es la madre naturaleza la que nos va configurando con su carga particular en cada region del planeta. Las formas culturales son humanas, el contenido cultural es del cosmos.

    Y por otro lado, el concepto de cultura mestiza sigue siendo racial y excluyente, no es realmente un puente enlazador que ponga relatividad y equilibrio. El mestizo es ante todo occidental antes que nativo. El mestizo es principalmente descendiente de europeos y su objetivo es vivir, pensar y actuar occidentalmente, pues lo originario americano es para los indigenas. Esto significa, delimitar y poner clara distancia entre blanco-mestizos e indígenas. El mestizo prefiere que lo confundan como blanco antes que como indio. La cultura mestiza tiene el propósito de dividir y separar claramente a los dos grupos. Ayer era lo blanco contra lo indigena hoy es lo mestizo contra lo indigena. Es decir, no hay una vision transcultural sino impositiva donde lo europeo es lo principal y lo aborigen es lo subsidiario. El blanco-mestizo es heredero de lo europeo y el indigena de America primitiva.

    Al mismo tiempo, también es un cuestionamiento a los autodenominados pueblos indígenas actuales, pues ni genetica ni culturalmente sobreviven indígenas autenticos. Con el proceso de absorción y cruce genetico todos somos un nuevo proceso de integración, unos mas que otros. Por otro lado, estos pueblos llamados indígenas desde la invasión europea ya no viven dentro de la cultura ancestral, pues la esencia de la cultura originaria esta guardada en sus corazones y en sus genes. Los indios de ahora han olvidado todo el conocimiento sagrado, casi todas las formas culturales espirituales, y principalmente su relacion con la conciencia cosmica. Hoy la mayoria esta atrapada en los valores y prejuicios de la sociedad postcolonial, y otros en los alardes de la sociedad de consumo.

    La cultura ancestral y cósmica solo siguió viva en algunas personas y en ciertos pueblos escondidos. Ellos fueron los responsables de guardar la tradición durante 500 años y de hoy sacarla paulatinamente para despertar a todos sus hermanos y a toda la humanidad. Ellos saben que durante estos 500 anos se ha estado gestando un nuevo renacimiento de la humanidad. Conocen que ya estamos preparados para recibir y comprender la ciencia sagrada y los saberes cosmicos. Saben que la humanidad esta lista para un nuevo nivel de conciencia. La nueva conjunción que se ha constituido, es el hombre del quinto estado de conciencia, la quinta humanidad, el Quinto Sol, es la Amerindia del Nuevo Tiempo o de Nueva Conciencia; tal como lo planificaron los Abuelos Guardianes de los Conocimientos Sagrados y Misterios Iniciaticos.

    EUROCENTRISMO.-

    Las ambiciones de muchos españoles que llegaron a América, determinó que algunos se quedaran para tratar de ser “reyes” en las nuevas tierras posesionadas, ya que en su patria jamás podrían serlo. Los que optaban por quedarse en tierras “salvajes” y para diferenciarlos de los de alcurnia, se les dio el apelativo de Chapetones. Una mayor distancia tuvieron los hijos de los Chapetones que nacian en América, pues era diferente nacer en la “madre patria” que nacer en tierras “primitivas”, y para diferenciarlos se les dio el calificativo de Criollos.

    Como consecuencia de las demás vinculaciones que fueron surgiendo a partir de los deleites sexuales de los machos españoles y de su poder economico, se fue configurando el sistema de segregación racial, politico y cultural, tanto en el “apartheid” real (Virreyes, Oídores, Encomenderos Reales, Gobernadores, Capitanes…), como en el de los plebeyos (soldados, mercaderes, cazadores de esclavos, bodegueros, cantineros, capataces, caciques…), y finalmente el de los naturales (mestizos, castizos, ladinos, sambos, cholos, indios, indígenas, aborigenes, primitivos …).

    El hecho de que los territorios americanos fueron anexados a la Corona no fue suficiente para que los Chapetones y los Criollos se sientan plenamente europeos, y por el contrario se fue configurando una actitud psico-social de inferioridad hacia los otros europeos. Un complejo de desarraigo, una suerte de auto-exilio forzado que se fue transmitiendo de generación en generación, en mayor o en menor grado, y de acuerdo a cada situación en el poder económico y cultural bajo el cual se desenvolvían. Muchos ambicionaban almacenar alguna fortuna y regresar a Europa, a la que les habían enseñado a considerar como la cuna de la civilización y el conocimiento universal. Algunos, al menos aspiraban poder enviar a sus hijos a educarse en la fina cultura europea o viajar por un tiempo para asimilar el roce cultural, la belleza y fineza de la Europa Real.

    Pretender ser europeo en America era muy difícil, pues los criollos y sus descendientes se vieron obligados a incorporar y empaparse de todo aquello que sirviera a sus propósitos de perpetuación y dominio, a mas de la necesidad de sobrevivencia a las nuevas realidades territoriales y culturales. Como de igual manera lo hizo el indígena, por la violencia impuesta o por su inteligencia de resistencia incorporó o se revistió de algunos elementos, no para desaparecer sino justamente para mantenerse y perpetuarse.

    Los europeos intentaron dar movimiento a su cultura en las nuevas tierras, pero como ésta era otra realidad geográfica y social, tuvieron que adaptarla y adecuarla a las nuevas condiciones y situaciones. Descubrieron para ellos, una serie de nuevos productos y elementos, de los cuales se nutrieron pero no solo física y economicamente, sino que además alimentaron su cultura primigenia incorporando una serie de nuevos elementos culturales propios de estas tierras, con lo cual la cultura europea en América adquirió nuevas dimensiones. Así sucesivamente con diferentes elementos propios de estas tierras, por lo que la cultura española en América se transmutó adquiriendo nuevas y diferentes configuraciones. Como igualmente ha sucedido con la Europa que invadió el Africa, Asia y Oceanía.

    A medida que los españoles se internaban más en América, más se diferenciaban de los españoles de Europa a pesar de su intento por mantenerse puros. Los españoles de América paulatinamente se fueron americanizando (lease indianizando) de una u otra forma. Obviamente los descendientes de los españoles jamás aceptaron esta indigenización sino por el contrario hablaron de la europeización de América, y por muchos años convencieron a la gran mayoría de que se había producido la culturización y la civilización de la América inculta e incivilizada. Por eso, han hablado de conquista y desarrollo del “Nuevo Mundo”.

    La exaltación por la tierra añorada y el sentimiento de sentirse extranjeros, se fue ahondando paulatinamente hasta crear un sentimiento de menosprecio y de minimización de tierras indigenas y todo lo que implicaba ser fruto de ella. Asi por ejemplo, Alcides Arguedas llegó a ser el escritor más famoso de la sociedad criolla de Bolivia por calificar este país de pueblo enfermo de dos males: indio y altura. Hace años dijo: “Si se eliminase el elemento indígena de algunas ciudades como La Paz, Quito o Arequipa, por ejemplo, todo su elemento sociable y distinguido podría caber fácilmente en un solo edificio de New York, en el Woolworth, pongo por caso, donde viven 30.000 personas” [4].

    Este complejo cada vez fue mayor con el pasar del tiempo y se ha mantenido hasta la actualidad a través de distintas maneras, especialmente en aquellos con más rasgos físicos europeos, los cuales se esfuerzan por identificarse y aproximarse lo más posible al prototipo cultural europeo. Incluso algunos pretendiendo ser más europeos que los propios europeos. Su único y válido referente es todo lo que venga desde Europa y sus extensiones en el mundo entero. El referente histórico, académico, científico, político será todo aquello que responda al modelo y concepto europeo, pues todo lo demás implica -como eufemísticamente se dice ahora- en vías de desarrollo.

    Este sentido del desarrollo ha tenido las mas variadas tendencias, desde las posiciones intelectuales, científicas y culturales más extremas del conservadurismo y liberalismo hasta las más ortodoxas marxistas y comunistas, cuyos auspiciantes y promulgadores se han dedicado a reproducir los conceptos y teorias generadas en Europa para reajustarlos en América. Están plenamente convencidos que el pensamiento mas avanzado, en cualquier nivel del conocimiento y de la vida en general, esta en Europa. En esa medida, el avance o desarrollo de nuestros pueblos, dependerá de lo que digan esas esferas. En otras palabras, nuestro progreso será consustancial a lo que los economistas, científicos, artistas, intelectuales delimiten en Europa y en la medida de que seamos capaces de reproducirlas acá. Es por eso que todos ambicionan, sean de cualquier vertiente ideológica o profesional, ir a Europa o todo lo que es su expansión, a educarse (l! éase civilizarse más) y a ampliar su currículo europeo en idiomas, filosofías, ciencias, tecnologías, cultura…

    Pocos, muy pocos en estos 500 años se han sentido verdaderamente hijos de estas tierras americanas, que significa tratar de descubrir, aprender y vivir de acuerdo a los conocimientos y sabidurias que han surgido en estas tierras. De comprender y asimilar los saberes propios, fruto de un desarrollo natural, autentico y profundo de sus pueblos. Máximo se han acercado como antropólogos o sociólogos que estudian y analizan a las sociedades originarias y a pueblos primitivos pobres culturalmente. Pero siempre su análisis desde los valores, principios y categorías occidentales en los cuales han sido formados oficialmente, y de la que se encargan de reproducirla y de educar a los “pobrecitos indios”. No se han preocupado de estudiar y descubrir la filosofia y conocimiento de estos pueblos, mas por el contrario estan convencidos de que no existia ciencia, literatura, tecnología en los pueb! los ancestrales. De ahí, que hoy casi nadie se plantea o aspira retomar y desarrollar el conocimiento americano milenario.

    Están casi todos convencidos que los europeos nos trajeron la cultura y la civilización; y por el contrario, califican de folclóricos o de renegados a aquellos que intentan aprender o reasumir los valores y costumbres propias, en un intento por vivir en armonía y coherencia con su medio y con los valores filosoficos y culturales originarios de estas tierras. “Eso es de indios”, dicen, cuando alguien utiliza o se identifica con lo ancestral. Muchos quisieran ser franceses, alemanes, ingleses; o si al menos fuera posible, retornar a la “madre patria” en calidad de hijos pródigos, como de alguna manera ha sucedido con la cantidad de emigrantes que existe actualmente en Europa. Este complejo de la “madre patria” está tan arraigado, que para identificarse -especialmente en lo físico- como de ascendencia blanca, recurren hasta la cirugía plástica, si es que al menos no se tinturan el pel! o o buscan alguna otra forma que les acerque al estereotipo del “gourmet” europeo.

    Los pocos que han querido asumirse como americanos, lo han hecho desde un punto de vista referencial político más no cultural y filosófico ancestral. El propio José Martí que ya habló de Nuestra América en 1891, reivindicaba a ésta pero tan solo en un sentido de autonomia e independencia cultural occidental, más no porque asumiera que el conocimiento y el saber de los pueblos ancestrales de América pudiera ser válido como el europeo. Y peor que pudiera pensar, que América originaria tenga igual o mayor sabiduría. Hasta el dia de hoy, no se acepta que puedan haber otros conocimientos tan validos y desarrollados como el conocimiento occidental. Actitud eurocéntrica, que se aplica de igual manera a otras regiones del mundo, en distintos componentes y facetas de la actividad humana. Su calificativo a todo lo que no corresponda al molde occidental, es de conocimientos anticientíficos, sugestionados, especulativos, mitologicos…

    Este complejo de inferioridad o del criollismo, está tan arraigado en la psiquis de los pueblos actuales de America, que justamente actúan asi y se ponen a la cola del mercado, tecnología, arte occidental. En algunos casos llegan al extremo de recurrir al plagio, copia y reproducción de los pensamientos, valores y actitudes occidentales para intentar insertarlos y adaptarlos -hasta por la fuerza- a la realidad. Esta baja autoestima los ha llevado a despreciar y rechazar todo lo propio, lo nativo, lo autóctono. Solo lo extranjero, lo de afuera, lo blanco es bueno, válido y bonito. Al nivel de quedarse como simples observadores y reproductores de lo que hacen y generan los paises desarrollados y avanzados.

    En este complejo del desarraigo, de la falta de pertenencia a un lugar, se han creado mecanismos para clasificar los roles y papeles que juegan los individuos en la reproducción socio-cultural. Los denominados blancos-mestizos, son los educadores que deben alfabetizar (léase culturizar) al mundo inculto representado por todo lo que implique o se parezca a lo nativo. Son ellos los que deben sacarnos del subdesarrollo para llevarnos al progreso industrial y tecnológico occidental, a partir de lo cual podremos salir de la miseria y el atraso, en que hemos “vivido milenariamente”.

    Lo anotado anteriormente nos configura, que mientras más uno se alegue de lo nativo u originario y se acerque a lo europeo estará mejor catalogado, y por tanto con mayores probabilidades de entroncarse en el espacio cultural y económico de los sectores de “status y de mayor roce social”. Reproducción cultural, que cumple el papel de mantener el poder y de continuar heredando a quienes fueron los beneficiarios del gran sacrificio civilizador de América. Implica indirectamente, rendir pleitesía al agraciado dia en que los nobles europeos pisaron el primitivo suelo americano y bendijeron estas tierras con su sola presencia. Significa de alguna manera continuar pagando el tributo (deuda) por el vasallaje de la cultura europea. En el fondo, actuar como buenos súbditos y rendir honores al señoraje de quienes durante 500 años han luchado por llevarnos al camino del progreso y el desarrollo. La ONU, OTAN, FMI, BID, BM son nuestros pa! dres y nosotros sus hijos adoptivos. Ellos son los que deben decirnos qué hacer y cómo hacer, y nosotros simplemente cumplir como buenos hijos obedientes.

CULTURA MESTIZA?.

¿Quienes somos?. Esa ha sido la pregunta recurrente desde los primeros años de la invasion hasta la actualidad, pues durante todo este tiempo todos han sabido, abierta o sesgadamente, directa o inconscientemente, que después de la unión genetica y cultural, ya no habian blancos ni indígenas: física, emocional, mental y espiritualmente autenticos. Especialmente los llamados blancos no lo han querido aceptar y se han definido historicamente asi, e incluso algunos grupos lo mantienen hasta la actualidad a pesar de que hoy se habla de mestizaje. Son pequenos grupos los que se resisten pues hoy la gran mayoria se asume como mestizos; como de igual manera sucede en ciertos grupos indígenas, que en una actitud inversa se reclaman como los unicos descendientes de los pueblos originarios e incluso con expresiones racistas buscan “doblar la tortilla”.

Esta máscara occidental que lleva actualmente América ha sido confundida como la cara principal, hoy bajo la figura de sincretismo[5] o de cultura blanco-mestizos o de latinoamericanos.; donde obviamente lo fundamental es lo latino y subsidiaramente lo americano ancestral y relegado a folclor o leyenda. Sin embargo, el hablar de mestizaje en la actualidad es un avance en el pensamiento descolonizador que estamos viviendo últimamente, y que seguramente se acelerara en los próximos anos. Hasta hace 50 anos, en la practica solo habian blancos e indios, y no se reconocia abierta! mente la union. Hoy se habla de fusión pero se lo confunde con mestizaje, que es un concepto separatista y discriminatorio antes que unificador o integrador, como se lo ha manejado desde los primeros hijos hasta la actualidad. En la realidad y en la practica ha sido tan solo un reemplazo de lo denominado blanco por el de mestizo, pero se mantienen las mismas condiciones y caracteristicas.

“Mestizo educado, diablo encarnado”, rezaba un dicho extendido por todo el continente. El Inca Garcilazo de la Vega señalaba que el término mestizo fue “impuesto por nuestros padres” y que en las Indias lo tienen por menosprecio. Esta fue la razón que obligó a que la mayoría de aquellos mestizos tratasen de asumirse paulatinamente como blancos, para lo cual buscaron “mejorar la raza” de generación en generación como de igual manera acumular riqueza, en el objetivo de borrar toda “mancha de color vario”. [6] Físicamente era más complicado! y a más largo plazo, la manera más segura de blanquearse fue aprendiendo y asimilando al máximo la cultura occidental, con el propósito de limpiar todo vestigio cultural de identificación con lo indigena. Por el contrario, muchos de ellos en las primeras etapas se convierten en brazo armado (capataces) de los criollos contra los indígenas. Situacion que en muchos casos y por distintos medios sobrevive hasta la actualidad, es decir, solo fue un cambio de formas con la llamada independencia de Europa; pero que sin embargo fue un avance en el proceso de autoafirmación de America.

Este proceso de revalorización mestiza tuvo sus primeros pasos a principios del siglo 19 con las luchas de independencia política de Europa, por lo que hasta finales de ese siglo todavía existía con relativa fuerza la división racial entre los denominados indios y blancos. Estos últimos, todavía esmerándose en apuntalar los cánones de la mentalidad Real ante los “independentistas”, como hoy los nuevos reyes lo hacen ante los “progresistas”. Fue a partir de la revolución mexicana de principios del siglo 20 en que se comenzó, aunque tibia pero nuevamente, a hablarse de lo mestizo. Concepto que intentaba distanciarse de lo blanco y de lo indio, o de mediar entre lo indio y lo blanco, según otros.

Algunos grupos nacionalistas enarbolaron esta salida, creando un híbrido entre lo blanco y lo indígena. Sabían que no eran europeos pero tampoco les resultaba fácil reconocerse como indios, que era la denominación impuesta por los españoles a los indígenas. Mas por el contrario seguían teniendo cierta vergüenza de ese ancestro, al cual lo soslayaban solapadamente. En ese contexto, se configura conceptualmente este tercer ente, en que son los intelectuales marxistas quienes toman la posta y enarbolen la cultura mestiza pero desde una visión también occidental y de corte marxista, para intentar configurarla teóricamente. Pero serán algunos sociólogos y antropólogos, los que la van configurando como pensamiento postmoderno y empiezan a hablar de que está en ciernes la cultura mestiza. Y que es actualmente, lo que se intenta convencer a todos, incluso desde ciertos sectores oficiales.

Este planteamiento de cultura mestiza, emerge todavía desde una visión racista de la vida, es decir, principalizando las cargas formales de los individuos. No se rebasa el concepto racial clasificatorio de indios, mestizos, latinos, hispanos, blancos, para mirarlo transculturalmente y peor geoculturalmente. Si bien, los sectores llamados progresistas son los mayores propulsores en la actualidad de la cultura mestiza, también ciertos sectores denominados de derecha se han ido incorporando a este planteamiento de mestizos, o de “chagras” como se denominan en el Ecuador ciertos grupos de hacendados. Especialmente desde que se ha remarcado por investigadores y genealologos, que todos los habitantes de América tienen genes indigenas, a partir de lo cual han comenzado a reivindicar y reformular el concepto de cu! ltura mestiza. Pero donde, siempre lo indígena es visto como un “mal necesario” o algo de fuerza mayor.

Todas las culturas del mundo en esencia son producto de integraciones mutuas, por la interrelación cultural entre los distintos pueblos. Si siguiéramos el punto de vista de las corrientes marxistas o progresistas, todas las culturas del mundo – hoy mucho más acelerado con la globalización y la mundialización – serían culturas mestizas o híbridas. Lo cierto es que ninguna de estas se reclama como mestizas, siendo la única excepción los llamados pueblos latinos o hispanos. No nos olvidemos que los españoles fueron invadidos por los moros durante 800 años, asimilaron elementos culturales árabes e incluso de los judíos, hasta que lograron su autonomía y con los nuevos elementos incorporados fueron consolidando su propia cultura, sin que hoy se llamen pueblos mestizos aunque reivindiquen su autonomia cultural y política dentro del espacio soc! ial europeo.

El concepto de cultura mestiza en el fondo entraña un prejuicio hacia lo indigena mas no hacia lo blanco, es parte todavía del colonialismo cultural imperante en el pensamiento de muchos sectores de la oficialidad, a los que les interesa decir: Tú eres indígena, yo soy blanco-mestizo, y las implicaciones que ello significa. Hoy el concepto de lo mestizo es una transposición y una supremacía de lo blanco sobre lo indigena. En cambio al hablar de integralidad estamos hablando de que la cultura geo-ancestral integra transpersonalmente lo exterior y nos brinda nueva armonia y equilibrio natural interior, en un proceso paulatino.

Entonces el mestizo asume principalmente la cultura europea y deja para el indio lo ancestral, y lo poco que lo asume es tan solo folclóricamente. Es decir, repite el complejo originado hace 500 años, sintiendose principalmente descendiente de europeos y forzadamente de indígena. Es un reconocimiento implícito de valoración y aceptacion a todo lo que es producto blanco-europeo, y por el contrario de “mal menor” a lo nativo. Si un mestizo se viste y vive como indio, es visto sin identidad y queriendo asumir la que no le corresponde. Por el contrario, un indio que se viste como occidental, es muy bien apreciado y significa que esta progresando.

Por ultimo, la palabra indio es otra piedra de tope tanto para los llamados blanco-mestizos como para los llamados indigenas. Los españoles acuñaron la palabra indio a los indígenas americanos al pensar que habian llegado a la India. A su vez ciertos grupos denominados indigenas se siguen resistiendo al termino por las implicaciones xenofobias que ello implica, especialmente por el papel de los llamados mestizos que se asumen como patrones y superiores a lo indio. Los mestizos a lo máximo -aunque implícitamente se reconocen como tales- utilizan la palabra indio para insultarse o menospreciarse, a igual que las palabras longo o runa en el caso de los pueblos andinos. Es decir, el compejo del criollismo es el complejo de lo indio, tanto para los llamados indígenas como para los llamados blanco-mestizos, quienes han minimizado y peyorizado la palabra INDIO[7], para rechazarla y hasta casi odiarla.

AMARUKA?, AMERICA LATINA?, AMERINDIA?

En estos 500 años han habido importantes cambios y avances, en el anhelo de nuestros pueblos de reasumir nuevamente una plena autodeterminación en todos sus ambitos. Proceso de autonomía que se irá consolidando paulatinamente, a medida que se vaya recuperando el conocimiento propio de estas tierras, para guardar un equilibrio y armonia natural, ancestral y conciencial de vida. Esto significa despertar a la filosofia, ciencia, arte, espiritualidad de America ancestral y se la reintegre al mundo contemporaneo.

La identidad de un pueblo está en su pasado, y no en el pasado inmediatamente anterior sino en el gran pasado, ese que se ha ido construyendo a través de los siglos, a la par de los demás componentes de la naturaleza, y que en su constitución va guardando una memoria genética, que no es solo física sino emocional y principalmente espiritual. En la oficialidad y en el discurso convencional poco a poco se va cediendo al aceptar conceptos como pluricultural y ciertos derechos indígenas. Pero que por ahora se lo quiere distanciar y dividir a través del concepto de culturas y pueblos mestizos e indigenas, para seguir manteniendo la distancia y la categorización entre unos y otros; fruto todavía de una “mentalidad colonizada” de ciertos circulos.

Todo proceso expansionista en una primera etapa asume una actitud de imposición y figuración pero finalmente termina siendo absorbida por la cultura madre o de raíces propias, a menos que ésta haya sido desaparecida como sucedió con los pueblos de las islas caribeñas y de norteamericana, en donde desaparecieron casi completamente a la población nativa. Pero ni siquiera así, pues es la geografía la que en última instancia configura la característica particular de sus habitantes, es la tierra la que va determinando la carga genetica y cultural, tal como hizo con los indígenas de America, o como lo ha hecho con cada ser humano en cada parte de este planeta. Asi, en estos apenas 500 años recorridos ya es posible observar diferencias entre los estadounidenses con los sudafricanos o los australianos, o cualquier! otro lugar donde invadieron los ingleses. Son todos de ascendencia inglesa pero hoy son diferentes en cada region, no solo cultural sino físicamente. Nadie es mas fuerte que la naturaleza. Proceso que obviamente no ha terminado, y que sera mas fuerte en estos próximos 500 anos.

Los blanco-mestizos al no tener clara su identidad, piensan que la “madre patria” comparte con la “madre tierra” al nuevo hijo, sin darse cuenta que la Pachamama es quien da la vida (alimentos), quien da forma (clima), la que construye la cultura base (solo el Quichua podia surgir en los Andes, como el ingles en Inglaterra, el espanol en Espana…). La “madre patria” en realidad es la hija adoptiva, a la que se le dio cuna y a la que America le ha ido dando su nueva forma particular. El propio encomendero Fernández de Oviedo se daba cuenta de ello hace 500 años, cuando escribía en su Historia General y Natural de las Indias: “Las cuales ha recibido esta tierra, no como madastra, sino como más verdadera madre que la que se le envió; pues en más cantidad y mejor que en España se hacen algunas dellas”.

La madre no es la cultura sino la tierra, por el contrario la cultura es hija de la tierra. Asi ha sido historicamente en todos los pueblos y en todas las regiones, es la geografia la que en ultima instancia hace a su gente. Ningun hijo puede hacer a la madre. Esa es la ley natural, todos dependemos de ella y de su determinacion. Nadie puede alimentarse al exterior de la naturaleza. Ahora la tierra America esta reconstituyendo a sus nuevos hijos, que a la larga tendran la misma carga energética y genetica que los antiguos habitantes de America que se fueron constituyendo en los mas de 30.000 anos de su existencia. Es decir, la evolucion es un proceso de geo-conciencia y no de cultura, y el desarrollo de la conciencia esta basada en leyes naturales, de acuerdo a la reciprocidad y correspondencia que establecio La Creación. Asi ha sido desde los primeros hombres que brotaron en el Africa, (según las teorias aceptadas por el mundo científico), los cuales emigraron por todo el planeta, y de ellos surgieron los blancos, amarillos, rojos… ¿Quien los transformo en esos nuevos seres?: La Madre Cósmica.

Las culturas no son procesos de simples mezclas, son consecuencia de procesos milenarios espirituales, emocionales, físicos, telúricos, magnéticos. ¿Qué son 500 años en un proceso de 20.000 años que tiene como mínimo el hombre en America?. Mucho y nada; al mismo tiempo. Mucho, en cuanto interrumpió un proceso natural y autónomo. Nada, porque las culturas sólidas sobreviven en el tiempo y en el espacio, y en ultima instancia porque la naturaleza se encarga de su proceso. Durante 500 años la civilización occidental ha tratado de borrar a la cultura ancestral, pero ésta se mantiene y paulatinamente va emergiendo para reacondicionarse en los nuevos tiempos. Proceso en el que seguirá tejiéndose con mayor plenitud y a voluntad propia, sin los complejos y los traumatismos de la invasión. Las culturas de tradición del mundo entero son culturas milenarias, iniciaticas, de una gran sabiduría, que no pueden sujetarse ni perecer fácilmen! te, y peor transformarse en un híbrido desmemoriado.

Este proceso no tiene final, la cultura no está concluida como ninguna del mundo, en el proceso de renacimiento espiritual que tiene que vivir toda la humanidad. Todas tienen una estructura, un basamento, un esqueleto básico; las cuales van creciendo, aumentándose, como las ramas de un árbol. Las culturas se expresan en forma interior y exterior, y cuando hay procesos violentos, las culturas impositivas se maquillan en la parte exterior de las culturas hasta que emerge la parte interior, que es la parte principal y básica de la cultura, al momento que va consolidando su ser propio, verdadero, libre.

Entonces si paulatinamente es la natuaraleza la que forma a sus hijos, los nuevos hijos de America terminaran siendo completamente otros, especialmente en los próximos 500 anos. Estos nuevos seres estaran cargados genética, psicológica, energetica y culturalmente por las distintas configuraciones que se estan operando en America y en el mundo. De esta manera dar surgimiento al quinto hombre, como lo profetizaron los sabios ancianos que sucederia. En el proceso de evolucion del hombre, desde el hombre de las cavernas al homo sapiens actual, estamos ahora dando nacimiento al homo intuitivus, al surgimiento de la humanidad del Quinto Sol, del hombre del quinto estado de conciencia. Los Mayas, Incas, Aztecas y todos los pueblos de America lo comprendieron y hablaron del Retorno del Quetzalcoatl, Inkarri…

Ese retorno es lo que hoy podriamos llamar Indoamerika o Amerindia. Ni indígenas, ni blancos ni mestizos ni hispanos ni latinoamericanos porque son conceptos raciales, prejuiciados historicamente y discriminatorios. Somos amerindios como de hecho ya sucede en Europa y en todo el mundo, en que nos denominan asi: los Indios de America, para diferenciarnos de otros Indios. A muchos de ellos les parece ridículo y prejuicioso, lo de blanco-mestizos, pues en ultima instancia somos indios, unos mas que otros. Y cuando nos dicen los indios de America, no es despreciativo como sucede en nuestros paises sino simplemente otra denominación. Mas por el contrario, hoy en Europa hay muchos que quieren ser indios y vivir como indios, lo que significa una revalorizacion y un reconocimiento que hacen las nuevas generaciones de europeos, especialmente aquellos que tien! en inclinaciones hacia la naturaleza y a las formas culturales ancestrales. En general, el mundo entero avanza a una indianizacion, que significa en lenguaje iniciatico entrar “dentro de dios”, es decir, reencontrar concientemente nuestro ser espiritual en camino hacia el Gran Espiritu.

Somos amerindios, sin que importe el color de la piel para establecer categorias sino lo que esta tierra nos ha ido constituyendo. Desde una mentalidad colonizada y una actitud de dependencia económica y cultural al eurocentrismo, se seguira hablando de Latinoamérica o America Latina, pero desde un pensamiento independiente, autónomo y transcultural ha emergido una nueva definición que es Amerindia (no confundir con America Indigena).

Amerindia ha empezado a superar el concepto de que nuestra cultura, identidad, nacionalidad empieza hace 500 años, y que todo lo anterior es pre-historia, folclor, souvenirs, museografía. Ha entendido que nuestra cultura surge y ha crecido, transformado, ampliado desde hace más de 30.000 años en que estamos aquí y seguirá igual camino en adelante. Ha tomado conciencia de que por quinientos años estuvimos pasivos, copiadores, plagiadores de otras culturas. El Nuevo Tiempo le reclama a los amerindios ser actores, creadores, productores de su naturaleza propia, que es la cultura que se desarrolla en armonia con su equilibrio natural. En realidad ya existe, o siempre ha estado entre nosotros, solo hay que desentrañarla y quitarle la máscara de complejos y prejuicios.

Los amerindios y los indios de todo el mundo, tienen la tarea de retomar para el mundo la visión sagrada de la vida que desarrollaron los pueblos ancestrales y dar un nuevo aporte a la humanidad en la creación de una nueva etapa de conciencia. Es el tiempo de un nuevo renacimiento, de un nuevo despertar, y éste empieza por reconocer, aceptar, apreciar, valorar el pasado, es decir, el futuro. Pues, de acuerdo al desenvolvimiento ciclico en espiral en que nos desenvolvemos, cada cierto tiempo pisamos nuevamente nuestro pasado.

Se va terminando aquel período, donde el indígena que se reconocía como indio paulatinamente iba renegando de ello y pasaba a engrosar las filas de los mestizos, quienes en cambio ya estaban en la etapa de transformarse en blancos. Ahora, comenzamos el proceso de regreso, de retorno a ser runas (seres humanos) propios, auténticos con su medio, que eso en esencia es ser indígena, mas alla del color de la piel.

Se ha empezado a revolucionar el pensamiento neo-colonialista y neo-etnocéntrico, para dar un paso más allá del que diera Marti con su concepto de “Nuestra América”, al de Amerindia. Aporte que para 1891 fue grandísimo pero que ahora debemos entenderla más integral e interculturalmente. Primero por aquellos autodenominados indigenas, que han organizado instituciones, luchas y conceptos al estilo occidental para reivindicar al indio. Por los sectores progresistas, en que sus reivindicaciones siguen siendo básicamente políticas y económicas, todavía tienen recelo de revalorizar y peor de resaltar lo cultural, científico y filosofico ancestral americano. Si bien, los mestizos ya no se asumen estrictamente como europeos, tampoco se asumen como los continuadores o los prolongadores de la cultura ancestral americana. Es decir, políticamente son amer! icanos pero culturalmente siguen siendo europeos, en otras palabras, fisicamente son mestizos pero mentalmente son occidentales.

Los vientos van cambiando y traen nuevas noticias, van renaciendo los sabios que libres de prejuicios raciales, familiares, nacionalidad o cultura, nos ensenan a convivir sin pretensiones y envidias. Europa tambien esta aprendiendo y realmente emergiendo como culta y civilizada. Los nuevos europeos y de mentalidad libre estan dando su reconocimiento, muchos van a aprender de los pueblos ancestrales americanos e incluso a casarse con sus hijos. Algunos han roto los complejos de superioridad y hoy se pueden parar frente a frente, sin animo de educar sino de aprender mutuamente, de compartir en igual de oportunidades.

En estos inicios de los nuevos 500 años o pachakutek según los pueblos andinos, ha empezado una pequeña aceptación y aprendizaje del conocimiento ancestral americano. Prácticamente recién empieza el descubrimiento de América, ahora libre de prejuicios y condiciones. Poco a poco van poniendo sus ojos en los saberes tradicionales como otra alternativa, los idiomas nativos van ampliándose a otros sectores, la medicina se va adentrando paulatinamente, la agricultura emerge más fuerte, la astronomia se proyecta como una nueva dimension del conocimiento, y asi sucesivamente. Ya hay tambien “mestizos”, quienes se asumen como hijos de estas tierras, como descendientes y continuadores de las culturas que emergieron aquí, y lo aceptan no a partir de los rasgos fisicos sino de los valores geo-culturales, como un camino de consolidación y reafirmación de nuestra identidad de pueblo sabio y de vision cósmica.

Este proceso ha sucedido tal como lo profetizaron nuestros antepasados hace 500 años. Este devenir para la gran mayoría todavía no está claro, pero a medida que crezca el sentimiento de amor hacia lo nuestro, aumente la autoestima y se refresque la memoria histórica, emergerá nuestra madurez y sabiduria más fresca y diáfana, para provocar otro renacimiento de América y del mundo entero.

——————————————————————————–

[1] Haboud Marleen, Quichua y Castellano en los Andes Ecuatorianos, Abya Yala, Quito, 1998, Pág. 36

[2] “Somos como la paja, que nos pueden cortar una y mil veces, que nuevamente volvemos a crecer”, Dolores Cacuango.

[3] Absorber: “Atraer un cuerpo de modo que se difundan en su interior, moléculas de un líquido o gas con el que está en contacto. Aspirar los tejidos orgánicos o las células las materias externas a ellos. Cautivar, atraer. Asumir, incorporar. Dícese principalmente de entidades políticas, comerciales, etc. Retener un cuerpo los fotones que lo atraviesan en forma de radiación. Consumir por entero”. Diccionario Aristos, Edit. Sopena, Barcelona, 1995.

[4] ARGUEDAS, Alcides: Pueblo Enfermo, La Paz, Puerta del Sol, /s f/ p 84).

[5] Aunque el sistema hispano ha prevalecido en el campo político y económico, en América Latina la mezcla de culturas se caracteriza por la presencia de un gran número de sincretismos en todos los aspectos: religioso, económico, tecnológico, lingüístico, hábitos alimenticios, cosmovisión y relaciones sociales en general”. Haboud M., Op. Cit.

[6] Un informe en las Naciones Unidas señalaba: “Cabe observar que el significado de los términos “indio” y “mestizo” varía de un país a otro, y a veces de una región a otra dentro de un mismo país. Así, en diversas partes del altiplano andino, un individuo deja de ser considerado como indio y se “vuelve” mestizo por el mero hecho de haber cambiado de indumentaria, o deja de ser considerado mestizo y pasa a la categoría de “blanco” por el hecho de haber adqu! irido una propiedad raíz. En algunas partes de Yucatán (México), el indio es designado como mestizo aunque el grado de su mestizaje biológico sea ínfimo o nulo. En ciertas regiones de América Central, el mestizo es denominado “ladino”, pero en otras se llama ladino solamente al indio que habla español. En diversas zonas de Guatemala se denomina comunmente ladino al indio que ha adoptado la lengua castellana y la indumentaria occidental, pero hay muchas personas para quienes el rasgo que define al ladino es solamente la indumentaria, aunque hable un dialecto indígena en su hogar y el castellano solamente en su trato con el blanco. En otras zonas es ladino el indio que vive y trabaja en la ciudad en calidad de artesano. En algunas partes de Chile, el mestizo que habla castellano, que es propietario de bienes raíces y que posee otras características “hispanas”, será considerado “blanco”, mientras que el mestizo que prefiera hablar un idioma autóctono y asociarse con indios será consider! ado a menudo como indígena. Con mucha frecuencia en América Latina, cuando el indio ha adoptado el idioma español, traje europeo y otras características nacionales, es clasificado como mestizo, aunque biológicamente sea indio puro”. (OIT, Poblaciones Indígenas, ps. 24 y 25).

[7] Indio en el conocimiento iniciatico significa: Dentro de Dios

[8] Revista La Familia- El Comercio, Quito, 20 Dic. 98.

ATAWALLPA OVIEDO FREIRE