La magia del mito

LA MAGIA DEL MITO

“Por todo el mundo ha surgido, en el transcurso de los milenios, una enorme flora de explicaciones míticas a las cuestiones filosóficas. Los filósofos griegos intentaron enseñar a los seres humanos que no debían fiarse de tales explicaciones”

Jostein Gaardner en “El Mundo de Sofía”

No resulta novedoso afirmar que la estructura que se encuentra en los relatos míticos de la antigüedad se ha repetido exitosamente a lo largo de la historia literaria del hombre. Existe una secuencia de símbolos y sucesos que se encuentra en los mitos y que ha sido replicada una y otra vez con resultados parecidos. Esta estructura mítica ha sido descrita por estudiosos como Villegas quienes han analizado su presencia en la literatura de este siglo. Es recurrente la idea de un héroe que tiene que llevar a cabo una transformación, tiene que salir de su entorno, tiene que enfrentarse a obstáculos (internos y/o externos) y que finalmente demostrará ser digno de ser llamado “héroe”. A continuación analizaremos cómo los distintos “mitemas” característicos de esta estructura mítica se presentan tanto en Harry Potter como en La Guerra de las Galaxias y cómo se puede relacionar su importancia dentro de cada una de estas obras. No resultará sorprendente darnos cuenta de que el hecho de que dos elementos literarios cumplan el mismo rol dentro de una estructura subyacente común a dos obras distintas, los relaciona casi unívocamente y hace que el uno nos evoque al otro cada vez que los tratamos de imaginar por separado.

Como la comparación de los elementos de la estructura mítica de las dos obras se hace principalmente respecto al héroe que protagoniza la historia, vale la pena aclarar que se tomará en cuenta fundamentalmente la relación entre Luke Skywalker y Harry Potter. Si bien es cierto que en La Guerra de las Galaxias la estructura se repite para varios héroes (Han Solo, Leia Organa, etc.), debido a su rol protagónico y su similitud con el niño mago, el personaje que se tomará como “héroe” para la comparación será el joven Skywalker. También se debe aclarar que la estructura mítica dentro de la saga de Harry Potter que se analizará no sólo se ve en la historia como un todo sino que se repite recursivamente en cada libro por lo que podría valer la pena mencionar los distintos mitemas que se presentan en cada uno de los tres primeros libros.

La vida que se abandona, el mitema del llamado

Luke Skywalker es un joven granjero que ayuda a sus tíos en las labores de la finca en un aislado y desértico paisaje en un planeta solitario y tranquilo. Harry Potter vive bajo la estricta vigilancia y represión de sus tíos muggle que lo tratan como a un animal que estorba en su monótona y cotidiana vida “normal”. En ambos casos existe una vida inicial que el héroe debe abandonar y olvidar para que pueda iniciarse la aventura, de hecho, el propio héroe no sabe ni conoce su condición especial y es influenciado por el adoctrinamiento de los que lo rodean en esta vida “mundana” que le reafirman su naturaleza común y normal por lo que no existe ninguna razón para que el héroe se de cuenta de su historia pasada ni de su condición sobrenatural. Más allá de la marca en forma de rayo en la frente de Harry, él es un niño normal alrededor del cual siempre ocurren “cosas extrañas”. Luke sólo se preocupa por la cosecha y por buscar “convertidores de poder” con sus amigos. El héroe mítico generalmente proviene de algún extremo de la vida: o es un príncipe (o princesa) o es un pobre vagabundo o reprimido. Harry es un niño maltratado y despreciado (duerme generalmente en una alacena, bajo las escaleras) y el joven Skywalker vive humildemente en una granja en el medio de la nada.

Para sacar al héroe de su vida cotidiana -que le queda pequeña a su grandiosa naturaleza heroica- es necesaria la llegada de un llamado. El destino debe llamar al héroe para que cumpla con su función dentro de la historia que está por escribirse y como éste no conoce su condición sobrenatural y heroica, debe ser “despertado” y llamado explícitamente para que comience su aventura. El llamado inicial de Harry Potter es bastante obvio (más que todo por lo insistente y perseverante). En la historia del niño mago se hace ver muy explícitamente que el llamado es extremadamente importante y debe llegar al héroe a como dé lugar, sin importar la oposición que haya a la entrega del mensaje. Por otro lado, en A New Hope (una nueva esperanza, el primer capítulo de SW) la princesa Leia Organa envía un mensaje a su viejo conocido Obi-Wan (Ben) Kenobi pidiendo desesperadamente ayuda para cumplir los planes de la rebelión en contra del imperio galáctico. En este caso es el destino (los designios de La Fuerza) el que hace que este llamado (que dentro de la historia está dirigido a Obi-Wan y no a Luke) llegue a manos del protagonista y héroe cumpliéndose así este mitema.

Los personajes que cumplen con el rol de entregar el mensaje también tienen una importancia fundamental en este símbolo. En el caso de La Guerra de las Galaxias, la intención de la princesa no sólo era pedir ayuda a su viejo amigo, sino transmitir los planes de la monstruosa estrella de la muerte que habían sido robados por la rebelión. Los “mensajeros” son dos personajes que se caracterizarán en la historia por su papel de apoyo a los héroes: los androides R2-D2 y C-3PO. En el caso de Harry Potter las lechuzas siempre tienen la tarea de enviar los mensajes, pero en el caso de la carta de aceptación de Harry en Hogwarts (el mensaje del llamado) hace falta la utilización de la magia como medio para pasar por encima de los obstáculos puestos por los tíos muggle de Harry y es necesaria la intervención del mensajero Hagrid quien finalmente logra vencer los intentos de Vernon de que su sobrino no reciba la importante carta. También hay que destacar el papel que juega en el mitema del llamado el maestro o despertador. El destino hace que Luke reciba el mensaje dirigido a Kenobi y que luego se encuentre con éste, quien le explicará el mensaje de la princesa y le pedirá que lo acompañe a cumplir con lo que el destino a dispuesto para su futuro. Por otro lado, es Hagrid quien explica a Harry cómo él es un niño mago que debe ir al colegio de magia y hechicería y quien incluso lo acompaña a buscar sus útiles y a prepararse para su primer año escolar en Hogwarts -su aventura- así como Kenobi le entrega a su nuevo discípulo la espada que perteneció a su padre para que empiece su entrenamiento Jedi (más adelante analizaremos cómo esto también se puede relacionar con la entrega que Dumbledore hace misteriosamente a Harry de la capa de invisibilidad de su padre).

También existe en esta estructura mítica, la figura de los guardianes del umbral, aquellos personajes cuya función es tratar de impedir que el héroe salga de su mundo habitual e inicie la aventura. Como menciona Henderson , algunos guardianes pueden ser “benignos” y protectores pero representar por esto mismo un obstáculo al inicio de la aventura. Es sorprendente la similitud que hay en este caso entre HP y SW. Es obvio que si en ambos casos nuestro héroe es huérfano, debe estar “protegido” por algún familiar como sus tíos por lo que son éstos los que cumplirán el papel “maduro” de convencer al héroe de no dejar su vida habitual por el riesgo que esto significa (o por lo extraño que esto pueda parecer). Así que en este caso se puede afirmar que los guardianes del umbral tanto para Harry como para Luke son sus tíos (los Dursley y los tíos Owen y Beru respectivamente). También en ambos casos es necesaria una influencia externa para que el héroe pueda superar este obstáculo. En el caso de el héroe intergaláctico es el destino que hace que los soldados imperiales liquiden su granja lo que lo convence de iniciar su viaje. En el caso del niño mago, es la intervención de Hagrid quien logra derrotar los intentos de Vernon de que Harry no sea llamado a la escuela. También en ambos casos el héroe desconocía su condición especial por haber sido engañado por sus tíos. A Luke le hicieron creer que su padre era un piloto de naves de carga (un camionero que no podría involucrarse en aventuras intergalácticas ni ser padre de un héroe) mientras que Harry estaba convencido, por las falsas explicaciones de sus tíos, de que sus padres habían muerto en un accidente de tránsito y que la cicatriz en su frente se debía a este incidente.

Como se advirtió anteriormente, este mitema del llamado se cumple en cada uno de los años de estudio de Harry (cada uno de los tres primeros libros) ya que la estructura mítica se cumple en cada historia y se cierra finalmente en donde empezó: en casa de los Dursley. En Harry Potter y la cámara de los secretos el llamado podría decirse que, aunque estaba implícito por el hecho de que Harry tendría que regresar a clases luego del verano, se hizo explícito con la llegada de Dobby que juega el papel tanto de llamador como de guardián del umbral. Es Dobby quien hace que se inicie la curiosidad (si se quiere con “orgullo”) de Harry para ir a como dé lugar a la escuela y es Dobby el que obliga a Harry a salirse de su casa estrepitosamente para iniciar su viaje anual al colegio. También es el elfo doméstico el que trata de evitar que el niño salga de su casa donde es reprimido por los Dursley y el que busca que éste sea castigado para que no vaya a la escuela (con la intención de protegerlo, por lo que se podría considerar un “guardián benigno”). En el caso de Harry Potter y el prisionero de Azkabán, el mitema del llamado se hace menos evidente por el hecho de que Harry huye de su casa indignado por la humillación de la que es objeto (lo que evidencia además su edad caracterizada por la rebelión). Incluso se podría decir que la aventura se inicia por la virtud del héroe de buscar su dignidad y condenar cualquier ataque en contra de sus valores aunque esto no cuadre dentro del concepto del mitema del llamado. Esto podría compararse con la decisión de Luke de iniciar su aventura en el momento en que se da cuenta del efecto de la tiranía del imperio cuando se queda sin familia en Tatooine.

Otro elemento interesante en la iniciación del héroe y del inicio del viaje que éste emprenderá es la presencia de ciertos amuletos y de la guía del sabio despertador. Es Hagrid quien explica a Harry cómo funciona el mundo en el que él vivirá sus aventuras que había sido un mundo desconocido hasta ahora (el mundo de los magos) y quien le muestra el arca de riquezas que sus padres dejaron para él en Gringotts (el banco de los magos). Igualmente, es Kenobi el que le explica a Luke el significado de La Fuerza, la labor de los caballeros Jedi y lo enseña a utilizar el arma de estos caballeros que una vez perteneció a su padre.

El Encuentro

El mitema de “el encuentro” se refiere a la aparición de ciertos personajes en el camino del héroe que van a formar parte de la aventura. En este sentido es interesante la analogía entre los tríos protagonistas de las obras (Luke, Han y Leia vs. Harry, Ron y Hermione). Al iniciarse el viaje de cada uno de los héroes empiezan a agregarse personajes que se convertirán en sus compañeros de aventura. En el caso de la historia de Luke, el inicio de su viaje hace necesaria la contratación de algún piloto espacial que lleve al héroe a donde el destino lo ha llamado. En el puerto de Mos Eisley Luke (junto con Obi-Wan) conoce a Han Solo, uno de sus compañeros más importantes en la saga. Han representa el héroe apasionado y guerrero (no piensa mucho antes de actuar y actúa en respuesta a situaciones que lo amenazan) El primer paso en la aventura de Luke es buscar y rescatar a la princesa Leia Organa, quien se convertirá en su segunda compañera de aventuras (y su hermana, por cierto) En el caso de Harry Potter, existe la presencia de dos compañeros de clase muy especiales: Ron y Hermione. Ron también es el personaje apasionado y guerrero, muy fiel a su amigo Harry y su confidente (hay pocas cosas que Harry no confíe a Ron) Hermione es la cabeza del grupo, es la intelectual que estudia mucho y lo sabe todo y la que brinda la información necesaria para resolver los problemas en los que se involucra el trío protagonista. Incluso se podría comparar a la estación espacial de Mos Eisley con la estación ferroviaria de King’s Cross. Ambos puertos representan el umbral entre el mundo habitual del héroe y el mundo de la aventura. De hecho, se podría comparar directamente a la cantina donde se encuentran con Han Solo (poblada de toda una serie de seres espaciales y extraños) con “El Caldero Chorreante” donde los magos se reúnen y ciertos personajes apuestan y juegan juegos de magos. Es en el tren que sale de King’s Cross que Harry conoce a sus inseparables compañeros y es en la cantina donde Luke y Obi-Wan se juntan con Han Solo para iniciar su aventura.

Por supuesto que el encuentro no se limita al trío protagonista. Se podría decir que hay otros personajes (que tienen su papel también dentro del discurso literario) que se agregan a la historia y forman parte también del grupo “protagónico”. Por ejemplo, los androides (R2-D2 y C-3PO) y Chewbacca son los compañeros inseparables de Han, Luke y Leia. Ellos apoyan y ayudan directamente a los héroes y son los que ayudan a que se solucionen muchas situaciones dentro de la trama. Otros personajes como Lando y Yoda así como Sirius Black, el profesor Lupin, Hagrid y otros ejemplifican el encuentro con otros seres que ayudarán al héroe a iniciar y resolver su aventura.

El laberinto

El mitema del laberinto representa una de las dificultades que el héroe debe superar en su aventura generalmente para cumplir su objetivo (rescatar a la princesa, conseguir el objeto preciado, capturar al asesino). Según Villegas “En la novela moderna [el mitema del laberinto] se da preferentemente en la forma de instancia de la aventura; por lo tanto, como obstáculo”. Este mitema se puede observar tanto en Harry Potter como en La Guerra de las Galaxias de esta manera: como un obstáculo. En ambos casos cuando aparece el símbolo que representa este mitema (la estrella de la muerte, “bajo la trampilla” donde se guarda la piedra filosofal, la cámara de los secretos, el sauce boxeador) los protagonistas se encuentran confundidos y necesitan trabajar juntos. Un factor particular que se puede encontrar en común es el hecho de que en este caso el laberinto obliga a los compañeros a separarse. Cuando los héroes salen del hiperespacio y se consiguen con la estrella de la muerte en La Guerra de las Galaxias, tienen que separarse: Han y Luke deben buscar a la princesa y Obi-Wan debe liberar el Millenium Falcon, incluso R2-D2 y C-3PO deben ir a una sala de controles para tratar de encontrar a la princesa (y en cierto momento ayudar a Luke y Han cuando están en “la barriga de la bestia”) Cuando Ron, Harry y Hermione entran “a través de la trampilla” en Harry Potter y la Piedra Filosofal se ven forzosamente separados porque Ron se queda en un tablero de ajedrez y Hermione debe tomarse una de las botellas del problema lógico que se le presenta. En este caso esto también tiene la utilidad literaria de dejar al héroe solo para que enfrente sus temores y salve al mundo. La cámara de los secretos también fuerza la separación de los compañeros. Hermione estaba petrificada por efecto del basilisco y Ron se quedó en el camino a la cámara cuando Lockhart causó un derrumbe que los aisló de Harry, quien quedó del otro lado. Lo importante es que los personajes se separan sólo para ser unidos luego que el héroe hizo lo que tenía que hacer a solas.

El exterminio del dragón

Si se entiende la figura del dragón como el terrible monstruo que el héroe debe vencer para lograr lo que busca, este motivo del exterminio del dragón se puede considerar bastante común y clásico. Siempre que el héroe ha culminado su iniciación debe probar su valentía y poder confrontando los obstáculos que se le presenten. A lo largo del viaje del héroe existen varios obstáculos y, por lo tanto, varios “dragones” por lo que las analogías pueden ser variadas. Lo que resulta interesante analizar es el símbolo de los “grandes dragones” que aparecen como el último obstáculo que se debe vencer para solucionar la trama. En este caso el exterminio del dragón representa la victoria final del héroe sobre la fuerza maligna a la que se tenía que oponer. En el capítulo IV (A new hope) de La Guerra de las Galaxias, la estrella de la muerte es el monstruo final que debe confrontar el héroe (incluso respira fuego y se traga a los aventureros). El exterminio final del dragón se da en un clásico estilo de David y Goliat ya que sólo el disparo preciso de Luke en las entrañas de la bestia pueden desencadenar su catastrófica destrucción (con la ayuda y protección de su compañero Han Solo, por supuesto) Este mitema es igualmente aplicable a las bestias que representan la última confrontación de Harry en cada uno de los libros. Quizá el más interesante de analizar entre los tres que se están tomando en cuenta para este estudio es el Basilisco de Harry Potter y la Cámara de los Secretos. Harry debe enfrentar solo a una serpiente gigante que aniquila a sus víctimas con sólo mirarlas y termina venciéndola con la ayuda (simbólica) de su protector y maestro Dumbledore. Harry recibe una ayuda externa de un amigo y debe confiar en sus instintos porque no puede abrir los ojos (como Luke en la estrella de la muerte que atina cuando apaga la computadora y confía en La Fuerza). Es importante esta confrontación final con el basilisco ya que le confirma a Harry el hecho (y la moraleja de la novela) de que el lugar donde esté depende de sus decisiones más que de lo que haya heredado o esté de acuerdo a sus “potenciales”.

Podemos ver también con el exterminio del dragón cómo se ponen a prueba los valores y virtudes de los héroes. Por ejemplo, Han Solo termina su transformación heroica ya que, a pesar de que antes de iniciar su aventura era una persona muy materialista y egoísta, al final regresa a salvar a Luke demostrando su gran compasión, “the adventure evoked a quality of his caracter he hadn’t known he possessed” (la aventura despertó una cualidad de su carácter que él no sabía que tenía). De igual forma Harry, luego de recuperar la piedra filosofal en Harry Potter y la piedra filosofal y de conversar con Dumbledore, comprende un poco más su pasado y empieza a llamar a lord Voldemort por su nombre (en vez de llamarlo “quien-tu-sabes” como lo hacen los que le temen).

Existen otras instancias de este mitema como por ejemplo el caso del perro de tres cabezas Fluffy. Fluffy era el perro guardián del sitio donde se escondía la piedra filosofal (que sustituye a “la princesa” que está siendo cuidada por el dragón) y sólo pudo ser vencido tocando música con la flauta que Hagrid le dio a Harry. Aquí nuevamente aparece la ayuda de un amigo como necesaria para completar la aventura y vencer al “dragón”. En El Imperio Contraataca Luke vence la tentación de unirse al lado oscuro de la fuerza (un “dragón espiritual”) prefiriendo lanzarse al vacío (vacío de lo desconocido, del no tener rumbo, de la confusión) a irse con Darth Vader y es rescatado nuevamente por la ayuda de sus amigos (Leia en este caso) que oyen su llamado hipersensorial (La Fuerza, al igual que el efecto de la magia en HP) y lo rescatan de estar “entre el cielo y la tierra” en una pequeña antena de Cloud City.

La experiencia de la noche

Tal como lo plantea Villegas, la experiencia de la noche “En los ritos de iniciación puede corresponder al aislamiento del iniciante en algún lugar solitario y oscuro”. La aparición de este mitema se hace más evidente en la trilogía de La Guerra de las Galaxias en El Imperio Contraataca cuando Luke viaja a Dagobah (dagobah = un repositorio de reliquias de Buda, un templo). Es en su experiencia de entrenamiento que Luke entra en una cueva donde se encuentra con sus temores y se da cuenta de que parte del mal está en él (al igual que Harry Potter), ésa es su “experiencia de la noche”. Simbólicamente, la superación de los temores que se le presentan al héroe (al iniciado) en su experiencia de la noche, representa que éste es capaz de dominar su mundo conflictivo interior. Aunque no tan importante como en el caso de la experiencia de Luke, Harry también tiene que pasar por este tipo de circunstancias. Tanto en el primer como en el tercer año en Hogwarts Harry tiene que salir al bosque en la noche y encontrarse con temibles obstáculos para continuar con su aventura. En Harry Potter y la cámara secreta Harry debe “descender a los infiernos” y enfrentarse con una araña gigante para descubrir cómo entrar a la cámara secreta.

Orfandad y Amistad

El motivo de la orfandad en los dos textos resulta obvio para comparar. En la historia que trasciende cada uno de los episodios (cada uno de los libros y cada una de las películas), es fundamental el hecho de que el héroe no haya conocido a sus padres y estos estén -supuestamente- muertos. El conflicto interno del héroe está basado en su falta de identidad familiar y la ausencia de sus padres. Luke no conoce a sus padres y le cuesta aceptar, cuando le es revelado, que su padre es el mismo Darth Vader que apoya un régimen tiránico en el imperio. Así mismo, Harry se preocupa constantemente por conocer la historia de sus padres y cómo éstos murieron para salvarlo. Es tan evidente esta comparación que muchos han afirmado que en los futuros libros de Harry Potter se descubrirá que Lord Voldemort es el verdadero padre de Harry (aunque personalmente no me identifico con esa predicción) basados en la analogía de que Vader es el padre de Luke (¿será entonces Harry hermano de Hermione?, nooo…) Más adelante se analizará más profundamente este motivo como base fundamental de la historia como un todo.

Debido a la soledad que se asocia con la orfandad, se acentúa la importancia de la amistad como el recurso del discurso para brindar compañía al héroe. No hace falta analizar mucho las historias para que nos demos cuenta de que esto se cumple perfectamente en HP y SW. No hay ninguna travesura que Harry considere sin la participación de Ron y Hermione. No hay ningún rincón de la galaxia que Luke visite sin preocuparse por sus amigos a excepción de la necesaria soledad de su entrenamiento que sin embargo es impetuosamente interrumpido por la visión de sus amigos en peligro. La amistad se ve afianzada por una necesidad de llenar el vacío dejado por la orfandad y el pasado trágico del héroe. Luke se conmueve profundamente con la “muerte” de Obi-Wan como si fuera la de su propio padre (así como Obi-Wan llora la de Qui-Gon Jinn) más que todo por la conexión paternal del discípulo con el maestro.

La gruta sagrada

Existe también el motivo de “la gruta sagrada” que representa el lugar de entrenamiento, de introspección del héroe en el que puede ver su propio yo y descubrir la esencia de su conflicto interno. Resulta evidente la representación de este motivo en El Imperio Contraataca con la gruta en la que Luke se entrena en Dagobah y donde se encuentra con la visión de Vader que le demuestra que Vader es una sombra de sí mismo (¿o viceversa?), la otra cara de la moneda. Se podría también decir (un poco arriesgadamente) que el sombrero seleccionador de Harry Potter cumple esta función de introspección y de “ventana” hacia el conflicto interno del héroe. Harry siente la curiosidad de oír lo que el sombrero le dice y se angustia por la posibilidad de que lo envíen a Slytherin (donde van los de intenciones oscuras) Es el mismo sombrero el que le hace ver que sus acciones son las que determinan su situación y no sus habilidades heredadas.

El regreso del héroe

Para culminar el ciclo mítico, el héroe debe regresar a su vida tranquila y normal, regresar con lo que ha aprendido y con lo que ha vivido para disfrutar de su victoria y del reconocimiento de su valentía. Cada uno de los libros de Harry Potter cuenta con este mitema. Harry regresa siempre, terminado el año escolar, a casa de sus tíos los Dursley para volver al mundo en el que no tiene poderes mágicos (porque no se le permite usarlos) y en el que está reprimido en todo sentido. El regreso de Luke es más simbólico ya que él se va transformando a través de la saga y “regresa” generalmente al final de cada episodio como un soldado común y corriente de la rebelión. En la primera película sólo es condecorado por su actuación y aparece al principio de la segunda como un soldado normal en Hoth, en la segunda es rescatado por Leia y está confundido viendo su mano mecánica que le hace recordar a Vader y en la tercera finalmente se “reúne” con su familia (o por lo menos tiene una visión de sus maestros) en la celebración de la victoria de la rebelión y la desaparición del malvado emperador.

Así vemos que, sólo con la adecuación de estas dos historias a la estructura mítica que ha sido tan exitosa desde tiempos ancestrales, encontramos grandes similitudes que nos permiten ver que las aventuras de Harry Potter no son tan distintas a las de Luke Skywalker.

“Una mañana, la madre, el padre y el pequeño Tomás, de dos o tres años, están sentados en la cocina desayunando. La madre se levanta de la mesa y va hacia la encimera, y entonces el padre empieza, de repente, a flotar bajo el techo, mientras Tomás se le queda mirando. (…) Tomás se sorprendería, naturalmente, pero se sorprende muy a menudo. Papá hace tantas cosas curiosas que un pequeño vuelo por encima de la mesa del desayuno no cambia mucho las cosas para Tomás. Su papá se afeita cada día con una extraña maquinilla, otras veces trepa hasta el tejado para girar la antena de la tele, o mete la cabeza en el motor de un coche y la saca negra.”
“Ahora le toca a mamá. (…) Se le cae instantáneamente el frasco de mermelada al suelo y grita de espanto. Puede que necesite tratamiento médico cuando papá haya descendido nuevamente a su silla. (¡Debería saber que hay que estar sentado cuando se desayuna!)”

Jostein Gaardner en “El Mundo de Sofía”

SE VENDE:
MUNDO POSIBLE, COMPLETAMENTE AMOBLADO

Ya hemos visto cómo la estructura mítica del héroe ha resultado una fórmula estupendamente exitosa para la captación de la atención y el entretenimiento de las masas. Pero, ¿hay algo más que tengan en común Harry Potter y La Guerra de las Galaxias que los haya convertido en éxitos literarios tan abrumadores? Parece haber una respuesta inmediata a esta pregunta: la construcción y estructuración extremadamente detallada de un “mundo posible”. Tal como lo define Umberto Eco en Lector in Fabula, un “mundo posible”, es el mundo que el autor construye y se utiliza como referencia dentro de la narración, es lo que permite al lector hacer ciertas previsiones de lo que puede o no ocurrir y darse cuenta de lo que puede llegar a ser válido dentro de la historia. Por ejemplo, cualquier lector de una novela policial clásica (por ejemplo, alguna historia de Sherlock Holmes) no consideraría como válido (o por lo menos no lo esperaría como posibilidad) que el tan misterioso autor del asesinato del señor Drebber fuera un extraterrestre que utilizó magia negra para obtener el alma del individuo para estudiarla en su planeta; eso está fuera del mundo posible que el autor ha construido. El “mundo posible” de Eco no sólo está compuesto por esta “enciclopedia” que permite definir una referencia de lo que puede o no ocurrir sino que también está lleno o amueblado de “individuos” que definen también sus propiedades y lo caracterizan. En el caso de Sherlock Holmes, como el autor no ha hecho ninguna afirmación en contrario, valen las leyes del mundo de nuestra experiencia.

Pareciera que no fuera muy osado afirmar que la mayoría de la fanaticada de estas historias pasa la mayoría de su tiempo comentando los detalles y particularidades de las armas, naves, hechizos, objetos y otros “individuos” más que hablando sobre la historia de los personajes o particularidades de la trama. No son pocos los tratados que explican (algunos oficial y otros extraoficialmente) la estructura organizacional de un “Star Destroyer”, el funcionamiento de un “lightsaber” o la biografía de Dumbledore u otro mago. Así que se puede decir que en gran medida (sobretodo en las partes de la saga que sirven de función introductoria) la historia que se desarrolla en cada novela se utiliza sólo como una manera de introducir al lector en la alteridad creada por el autor y en ese mundo fantasioso que está totalmente amoblado y que es fascinante de describir, es decir, la historia es una “excusa” para mostrar el mundo que se plantea. En cierto modo, este elemento es un aprovechamiento del hecho de que el mundo que se crea con cada historia es atemporal y más perdurable que la historia de los protagonistas que se resuelve al final de cada libro (o al final de la saga…) Incluso la misma Rowling parece más emocionada con el Quidditch que con la importancia que pueda tener la resolución de los conflictos internos de Harry. Del mismo modo, Lucas ha dedicado su vida a desarrollar nuevas expresiones de su “universo paralelo” y nuevas maneras de incluir al espectador dentro de “el maravilloso mundo de la guerra de las galaxias” y es sólo ahora (cuando la tecnología le ha permitido realizar su sueño) que se está dedicando a desarrollar la historia del pasado de Luke Skywalker. Este elemento de “la historia como excusa” es inclusive “recursivo” dentro de cada una de las novelas de las sagas. Si vemos, por un lado, la saga de Harry Potter, podemos observar cómo cada libro presenta una aventura que bien podría presentarse independiente de las demás (aquélla que se describe con el título del libro: “la piedra filosofal”, “la cámara de los secretos” y “el prisionero de Azkabán”) pero estas historias son sólo (vistas desde una perspectiva bastante amplia) pequeñas aventuras que sirven para llevar a Harry en busca de la verdad de su pasado (la “columna vertebral” de la saga) A su vez (recursivamente) dentro de cada libro pareciera que esa “aventura del título” se olvidara por momentos para presentar los detalles de la vida de Harry en Hogwarts: el Quidditch, las materias, los exámenes, los pleitos con Malfoy siempre y cuando no tengan que ver con la trama fundamental del libro, etc. Por otro lado, en la historia espacial de Luke Skywalker encontramos una “columna vertebral” muy parecida a la de Potter (conflicto paternal y lucha bien/mal) que se esboza a gran escala en la saga como un todo (considerando los episodios IV, V y VI) Cada película presenta una problemática en particular: aparición y destrucción de la estrella de la muerte, entrenamiento de Luke y resurgimiento del imperio, fin del entrenamiento y conclusión de la guerra civil. Igualmente (recursivamente) en este caso existen momentos en las películas en los que el pasar a través de un campo de asteroides, el amarrarle las patas a un AT-AT, el aprender a jugar un ajedrez muy particular con un Wookie de 200 años o el entender por qué unos minúsculos animalitos le tienen devoción a C-3PO resulta más importante que el tema central de la película.

Otro factor que hay que aceptar que influye en la propagación de las novelas como fenómeno de las masas es una consecuencia de este “amoblamiento” del mundo posible: la posibilidad de mercadear una extensa gama de productos relacionados con las sagas. Resulta extremadamente rentable fabricar industrialmente una multitud de soldaditos de La Guerra de las Galaxias que podrán ser utilizados por los niños (y algunos adultos que los coleccionan) para identificarse con la historia y, ¿por qué no?, crear y dramatizar sus propias historias. De igual forma el mundo de los magos permite crear toda una plataforma de productos recreativos y con efectos mágicos en los bolsillos de los productores de la película, el juego de nintendo o las sábanas de Harry Potter. Estos “fenómenos” de las masas del siglo XX-XXI pueden verse altamente justificados por el ambiente capitalista en el que nacen y se desarrollan. Entonces los productores de las películas e historias pueden ver justificado el enorme esfuerzo que implica el nivel de detalle al que llegan en películas como la saga de La Guerra de las Galaxias (y que seguramente están justificando para la de Harry Potter).

Otra táctica comercial que mantiene al lector (o espectador) interesado en la historia como un todo es el hecho de que cada uno de los libros (episodios) está construido por la conjunción de ciertas piezas preestablecidas por el autor que forman una “columna vertebral” de la historia. Esta “columna vertebral” permite que haya una aparentemente sencilla intertextualidad entre los libros (episodios) de la serie que resulta bastante fascinante. Siempre existirá la curiosidad del lector de conocer cómo se desenvuelve la historia en la próxima parte de la saga y esto es lo que crea la “fidelidad” del lector (espectador) Por otra parte, esta “columna vertebral” permite la construcción de un complejo “mundo efectivo” que es la base en la que se fundamenta cualquier fanatismo y devoción al mundo alterno que se plantea.

El contenido escondido: la escogencia de los nombres y su carga semántica

Cualquier estudio superficial sobre la construcción de los nombres de los personajes, lugares, hechizos y objetos tanto de La Guerra de las Galaxias como de Harry Potter evidenciaría la elaborada escogencia de ciertas palabras para nombrar ciertos objetos. No es desconocido el hecho de que muchas palabras en muchos idiomas (y más asombrosamente, algunas palabras en muchos idiomas) no pueden ser separadas de la carga semántica que traen ya sea cultural, fonética o morfológicamente. Otro punto en común utilizado por Rowling y Lucas es el de la utilización de los nombres (de personajes, lugares, máquinas, hechizos, etc.) como parte de la caracterización de lo que están nombrando. Con un poco de imaginación nos podemos dar cuenta de que el destino de Skywalker (caminante de cielos, trotacielos) es viajar por el espacio y volar por el cielo y que un dementor no puede hacer otra cosa que volvernos locos (dementes) Ya ha sido mencionada la referencia cultural del nombre del planeta Dagobah (templo a Buda) No podemos pronunciar el nombre de Dudley Dursley sin parecer que nos estuviéramos burlando de algún tonto. Yoda, por ser un guía espiritual que enseña una filosofía que toma aspectos orientales (budista zen sobretodo) es nombrado en honor al YOga y a buDA. No se puede dejar de mencionar el ingenioso anagrama con el que nos damos cuenta que Tom Marvolo Riddle no sólo es marvolo (maravilloso) ni enigmático (riddle = acertijo) sino que podemos construir la frase “I am lord Voldemort” con su nombre. La princesa Leia Organa es un líder de una rebelión orgánica que se opone a un régimen imperialista mecanizado y tecnificado. La profesora McGonagall es muy regañona, si pensamos en su apellido Mc/Go/nag/all (nag = irritar con repetidos regaños) También es interesante cómo se utilizan junto con la carga semántica de las palabras, la carga cultural de los símbolos. Por ejemplo, la casa Gryffindor es la casa de los valientes, los héroes, los buenos y los que como el Grifo de oro que nos evoca (con un poco de francés: Grifo-d’or) representan la valentía de los que luchan contra el mal. El caso de Slytherin es mucho más interesante porque se podría decir que trae una carga semántica triple: el significado, el sonido y la figura de la palabra. En la casa Slytherin estudian los que podrían hacer cualquier cosa (sin importar su correctitud) para lograr lo que buscan y los que se arrastran por la oscuridad del sótano de Hogwarts con intenciones igualmente oscuras tal como lo sugiere el verbo en inglés “slither” que se traduce como “arrastrarse” (aunque “sly” es también “astuto”). En segundo lugar, la pronunciación de la ese en Slytherin asemeja el sonido de ciertas serpientes (que por cierto son atacadas por los grifos) y siempre está relacionado con la picardía y la maldad. Y tercero, la forma de la “S” nos evoca también casualmente la de una serpiente arrastrándose por el suelo (o la marca que ésta deja en la arena) o enroscada aprisionando a su víctima, de hecho, esta simbología gráfica de contorsión es usada también en varias ocasiones en la obra cuando se hace referencia a esta casa (por ejemplo, las columnas dentro de la cámara de los secretos). En fin, existe una gran cantidad de nombres cuidadosamente seleccionados para contener una carga semántica importante que agrega un contenido “entre líneas” que ayuda a generar en la mente del lector/espectador un ambiente simbólico completo.

EXPECTO PATRONUS

“El hombre, ante el estímulo del miedo que aflora en él por efecto de la percepción de fenómenos naturales, aparentemente inexplicables y grandiosos, intenta la interpretación de una casuística, esto es, pretende conocer el origen del miedo, lo que supone, al mismo tiempo, llegar al ente responsable de tales fenómenos”

María J. Fernández en “Campo Semántico y Connotación”

Como ya hemos visto, el conflicto interno del héroe que se relaciona con la ausencia de sus padres y la falta de conocimiento sobre su pasado son el combustible principal que arde dentro de la historia manteniéndola viva a través de cada episodio. Harry sueña con estar con sus padres, con conocer su pasado, con saber (al igual que el lector) por qué Voldemort lo busca tan particularmente a él. Esto es lo que hace que Harry se meta en tantos problemas y justifique sus travesuras en muchos casos y es el tema básico y fundamental sobre el que tiene preguntas que hacer siempre que se le da la oportunidad de hacerlas. El joven Skywalker también desconoce su pasado y a su padre. Simbólicamente ambos héroes reciben una herencia de su padre para iniciar sus aventuras: Harry recibe la capa de invisibilidad a través de su protector y maestro Dumbledore y Luke recibe la espada de luz (lightsaber) de su padre, Anakin que, dicho en inglés: “Anakin, Luke’s father ‘and akin’ to him” (akin = emparentado, pariente) En el tercer libro Harry cree ver la figura de su padre en la otra orilla del lago que lo salva de los dementors, pero es realmente él mismo que invoca un patronus con la forma de un ciervo (el animal que representa a su padre, “cornamenta”) que cumple el papel de protector en ausencia de su verdadero padre. De igual forma, Luke es salvado del poder del emperador cuando Vader se “desarrolla” como héroe y sacrifica su fidelidad al imperio por salvar a su propio hijo, lo que permite que Luke finalmente se identifique con la figura de su verdadero padre y lo trate compasivamente.

Este conflicto paternal está basado en una historia que se puede decir que es “anterior” a la historia que se presenta al lector/espectador. En el caso de SW, podría decirse que fue sólo por decisión del autor que esta historia fue dejada para “después” (en el discurso que se presenta al espectador que ha seguido el desarrollo de esta saga) aunque cronológicamente en la trama ocurrió “antes”. La historia del padre de Luke (y los padres de Harry) parece ser digna de su propio desarrollo literario por separado y como una historia que “soporte” la historia que todos conocemos. ¿Se podría decir que después del séptimo libro Rowling se dedicará a escribir la historia de los padres de Harry? Conocemos detalles de esta historia (sobretodo de lo revelado en el tercer libro, como la broma que jugaron a Snape y la confección del mapa del merodeador) así como en el primer libro se dieron detalles de cosas que ocurrirían en el segundo o tercer libro por lo que esta idea puede no ser tan descabellada. Lo que sí es seguro (o por lo menos está dentro de las “previsiones” que el lector puede hacer) es que al final de la saga (el séptimo año de Harry en Hogwarts) se habrá aclarado en gran medida el misterioso pasado de Harry y la muerte de sus padres así como Luke solucionó su problema familiar al final de “El Retorno del Jedi”.

Yin-yang: El bien y el mal

Otra temática fundamental de cada una de las sagas como un todo es el inminente conflicto entre el bien y el mal y la manera en que se conjugan y coexisten estos dos extremos. Quizá la filosofía oriental del yin-yang haya influenciado en la introducción de esta moraleja en el fundamento de las historias de Harry Potter y de La Guerra de las Galaxias. Parece haber un elemento en común entre la coexistencia del bien y el mal (sobretodo dentro del héroe) y cómo los personajes, eventos y la misma historia ejemplifican este hecho de que el mal está dentro del bien y el bien dentro del mal y ambos coexisten en armonía.

Veamos, por ejemplo, el caso de los héroes (lo más obvio): Cuando Luke Skywalker empieza a entrenarse como caballero Jedi y es llevado a la gruta donde debe encontrarse con sus conflictos internos, obtiene una visión muy simbólica, su propia cara dentro del cuerpo de Darth Vader. Luke descubre que “The dark side of the Force lies within as well as without” (el lado oscuro de La Fuerza está dentro [de sí mismo] así como afuera) Esta realidad debe ser enfrentada luego por el héroe cuando Vader le revela que él es su verdadero padre a lo que Luke reacciona negándolo (o no-aceptándolo) y, vencido por el miedo (o por otro lado, venciendo la tentación) se lanza al vacío en vez de aceptar unirse al oscuro poder de su padre. Luke es hijo de Darth Vader y La Fuerza lo acompaña fuertemente, parte del lado oscuro de La Fuerza forma parte de él (el mal dentro del bien) A su vez, Harry Potter es “el niño que vivió”. Lo que lo hace tan famoso es el haber sobrevivido al ataque del mago más maligno de todos los tiempos: Lord Voldemort quedando marcado por éste. La cicatriz en forma de rayo que Harry lleva en la frente es un símbolo que en todo momento le recuerda el hecho de que parte de los poderes del malvado mago se le “imprimieron” a él. Harry, sin saberlo, conoce el dialecto de las serpientes (pársel) que sólo es conocido por algunos magos malignos. Parte de la maldad de Voldemort se encuentra dentro de él (el mal dentro del bien nuevamente) Para entrar en la cámara secreta Harry debe entrar en contacto con su lado oscuro. El héroe no es inconsciente del hecho de que el mal se encuentra dentro de él ya que cuando tiene que probarse el sombrero seleccionador le invade un inmenso temor que sea asignado a la casa de Slytherin (donde van todos los malos) y el sombrero le confirma su temor cuando le dice que tiene las cualidades para estar en esa casa. Así vemos cómo recurrentemente se observa esta filosofía de la compenetración del mal dentro del bien (y en menor grado, viceversa) tanto en la historia de Harry Potter como en la de Luke Skywalker. Al final de la saga de SW, Anakin Skywalker siente compasión por su hijo y se “reivindica” salvándolo del mortal poder del emperador (el bien dentro del mal) Sólo podemos suponer lo que podría pasar análogamente en Harry Potter con la “bondad dentro del mal” en novelas futuras.

Esta ambivalencia (que es considerada como un simbolismo básico en la literatura) del bien contra el mal es representada simbólicamente con la oposición binaria de la luz y la oscuridad. No nos sorprende entonces cómo la rebelión que busca liberar al universo de la represión del imperio esté inspirada y ayudada por la luz de La Fuerza mientras que el imperio es movido por el fuerte poder del lado oscuro de La Fuerza. En Harry Potter existe una simbología parecida, no tan relacionada con la luz/oscuridad sino con la vida y la ausencia de ésta. Voldemort ha perdido sus poderes al haber atacado a Harry y tiene que vivir como un parásito de la vida de otros seres (como en La Piedra Filosofal) o del recuerdo (como en La Cámara de los Secretos), es un ser que no posee actualmente un cuerpo o una vitalidad propios y que tiene que vivir escondido (en la oscuridad) Harry es un niño lleno de vida, que juega Quidditch (el deporte de los magos que se practica volando a gran altura en unas veloces escobas) y que posee una vitalidad inmensa. La asociación luz/oscuridad se hace en los lugares que corresponden a las casas de Griffyndor (los valientes y buenos) y Slytherin (los despiadados y malvados) Griffyndor se encuentra en una torre del castillo de Hogwarts (alto, cerca del cielo, iluminada por el sol) mientras que Slytherin tiene su casa en las oscuras profundidades de la parte subterránea del castillo (oscura, fría y húmeda) En la historia del joven Skywalker, el planeta donde vive Luke tiene dos soles (lo que lo hace bastante iluminado y nada oscuro) En Harry Potter incluso se maneja el concepto de “las artes oscuras” en la academia mágica que se refiere al uso de la magia para fines maléficos. El profesor que es el centro de atención en cada año de escuela de Harry es el profesor de la materia de “defensa contra las artes oscuras” y que siempre tiene que ser cambiado a final de año por alguna extraña razón (una razón del discurso, para mantener la estructura y brindar la posibilidad de una nueva aventura) Los boggarts (seres peligrosos que se transforman en lo que uno más tema) viven preferiblemente en lugares oscuros y encerrados. Pareciera también que el lado oscuro siempre tiene más poder (o por lo menos más poder político) Vader trata de convencer a Luke con la famosa frase que James E. Jones grabó con su profunda voz “You don’t know the power of the dark side” (no conoces el poder del lado oscuro) Lucius Malfoy representa el lado “oscuro” de la magia que busca siempre hacerle la vida imposible a Potter. Es Malfoy el que logra convencer al ministerio de la magia que se condene al hipogrifo que al final de Harry Potter y el prisionero de Azkabán ayudaría a Harry. Es el imperio el que tiene el poder “constituido” en la galaxia mientras que la rebelión (el lado bueno de La Fuerza) es sólo una oposición al régimen imperial.

LA GUERRA DE LOS MUGGLES

Se puede formular otra analogía interesante que podría encajar dentro de “el objetivo didáctico del autor”. Por un lado podemos destacar que Rowling intenta hacer una crítica a la frialdad del mundo actual que está acostumbrado a su cotidianidad y rechaza cualquier cosa “fuera de lo normal” y lo cataloga como peligroso. Cuando la trama se complica podemos también notar cómo se manejan temas como el racismo, la pureza de la raza que busca el legado de Slytherin y el rechazo al sistema educativo rígido y con poca importancia a la creatividad. En el caso de Lucas, podemos identificar un marcado conflicto político. Una crítica a la rigidez del imperio se relaciona con múltiples símbolos en el régimen de Hitler.

Esta relación de la problemática política que se plantea en La Guerra de las Galaxias con la segunda guerra mundial y el “imperio” de Hitler puede ser explicada con ciertos elementos en detalle. Un elemento simbólico que no se ve en una obra puramente literaria y que se aprecia en el diseño (imagen visual, vestimenta) de los personajes es el asombroso parecido entre el ejército imperial de SW y los soldados que servían a Hitler. El control rígido y riguroso caracterizó la Alemania de Hitler así como al imperio. Los soldados y pilotos del imperio galáctico utilizan cascos que les cubren la cara completamente, deshumanizando y uniformizando a todos los individuos (otra crítica fuerte que hace Lucas con la película) mientras que todos los militantes de la rebelión utilizan cascos abiertos que dejan ver sus caras y los muestran más humanamente. Ciertos soldados imperiales son llamados “stormtroopers” así como los guardaespaldas personales de Adolf Hitler. El “Führer” creó un grupo elitesco de soldados (el SS) llamado “Schutzstaffel” (escuadrón de protección), existe una reminiscencia de la imagen de este grupo en Vader con su vestimenta y casco negros y su obsesiva obediencia al emperador. Se sabe que el senador Palpatine llegó al poder elegido como presidente de la República y que luego se declaró a sí mismo emperador, eliminando a sus oponentes. De igual forma Hitler llegó a ser presidente de Alemania y luego se volvió un dictador declarándose el “Führer” o líder supremo. Hitler se aisló de la gente y sólo se rodeaba de sus guardaespaldas personales. De igual forma el emperador Palpatine se aisló siempre protegido por sus guardias rojos y recibiendo sólo a ciertos personajes importantes (como Vader).

Por otro lado, Rowling presenta una crítica constante a los paradigmas educativos y de valores sociales en la temática de los libros. Por ejemplo, me parece que resulta una crítica al sistema educativo la descripción que se hace de la clase del profesor Binns en Harry Potter y la cámara secreta cuando está hablando de la convención de brujos y todos quieren saber la historia de la cámara de los secretos. Explícitamente se dice que la clase estaba envuelta en un profundo sopor hasta que el profesor empezó a contar el cuento que todos estaban esperando. La actitud del profesor frente a la indiferencia de los alumnos es una recíproca indiferencia con la que se conforma con seguir adormeciendo a sus estudiantes. Mientras que cuando obtiene la atención con un cuento escandaloso y sensacional, el profesor se asombra y termina rechazando las peticiones de que siga hablando de la leyenda de la cámara de los secretos con lo que “en cinco minutos, la clase se sumergió de nuevo en su sopor habitual”. Otra crítica importante de Rowling es el rechazo en general de la sociedad a cualquier cosa fuera de lo común o que no cuadre con los paradigmas de la cotidianidad. La sociedad actual intenta ahogar cualquier indicio de creatividad e imaginación con lo que se debería tender a una sociedad uniformizada, sin “extraños” en la que todos hagamos lo que tenemos que hacer sin inventar nada. De igual forma como Lucas critica la tecnificación extrema del hombre (imperio mecanizado vs. Rebelión orgánica) Rowling critica la “normalización” y el rechazo a la imaginación. Más importante aún (en la comparación entre los dos textos), relacionándose con la problemática política que expone Lucas, en el segundo libro de Harry Potter se expone la intención de limpiar la raza de los magos que no deberían mezclarse con los muggle (todo el problema de los “sangre sucia”) lo que se relaciona directa y unívocamente con la intención de Hitler de la limpieza de la raza y el exterminio de los judíos. Así que después de todo, los autores no están muy lejos en sus críticas políticas.

LA FUERZA DE LA MAGIA

Ya hemos visto cómo se puede comparar la saga del niño mago Harry Potter con la historia espacial de La Guerra de las Galaxias en el ámbito de su estructura, elementos en común y factores influyentes. Sólo dejamos para la conclusión la comparación final entre la importancia de La Fuerza (con un apoyo técnico importante) para el mundo de Skywalker y la magia para el mundo de Harry Potter. Son estos dos elementos los que garantizan que exista la aventura dentro de los mundos que se plantean en cada uno de los textos y los que permiten que se dé algo “especial” en estos.

La fuerza es lo que une a todos los seres y sistemas del universo, es algo que comparten y que les permite coexistir. Controlando la fuerza, los caballeros Jedi pueden ejercer un gran poder sobre su entorno y percibir ciertas “cosas” que los que no se han entrenado en las artes de la fuerza no pueden percibir. La fuerza es lo que guía el camino del héroe en su aventura. La dualidad de la existencia de la fuerza permite que existan el bien y el mal, el lado claro y el lado oscuro de la fuerza. La fuerza, en definitiva, es lo que hace “posible” el mundo fantástico de La Guerra de las Galaxias.

La magia es lo que diferencia a los brujos de la gente muggle. Controlando el poder de la magia los magos pueden transformar cosas, predecir el futuro, crear pociones con efectos diversos y provechosos y realizar cambios profundos en su entorno lo que los hace capaces de controlar en gran medida la naturaleza. El mundo muggle es estéril y estático comparado con el mundo de la magia. La gente que no conoce del poder de la magia necesita inventar artefactos complicados para arreglárselas sin ella. La magia, en definitiva es lo que hace “posible” el mundo fantástico de Harry Potter que coexiste perfectamente con un mundo “real” muy parecido al nuestro.

Una diferencia fundamental que se debe mencionar entre La Guerra de las Galaxias y el mundo de Harry Potter es su “cercanía” a la realidad del lector/espectador. La Guerra de las Galaxias se desarrolla “hace mucho tiempo, en una galaxia muy, muy lejana” en un mundo tecnificado con naves espaciales y androides. Harry Potter se desarrolla principalmente en Inglaterra (la misma de Londres y la lluvia) en un momento histórico que podría bien coincidir con el nuestro y en un mundo que, según lo que plantea la historia, es perfectamente posible (sólo que los magos se las han arreglado para que nosotros los muggle no nos enteremos de su existencia) Así que el mundo perfectamente posible contrasta con la galaxia muy lejana de Star Wars.

En conclusión, se ha descrito exhaustivamente una analogía que para muchos salta a la vista entre dos fenómenos míticos modernos que están pasando a formar parte de la cultura (por lo menos occidental) de la misma forma que los mitos de la antigüedad eran parte importante de la cultura de ciertos pueblos. Harry Potter y La Guerra de las Galaxias podrían encontrarse en galaxias más cercanas de lo que parece (o a pocas chimeneas de distancia, si se prefiere)

BIBLIOGRAFÍA

MARÍA JESÚS FERNÁNDEZ LEBORANS. CAMPO SEMÁNTICO Y CONNOTACIÓN. Editorial Planeta. 1977
JUAN VILLEGAS. LA ESTRUCTURA MÍTICA DEL HÉROE EN LA NOVELA DEL SIGLO XX. Planeta, Barcelona. 1978
MARY HENDERSON. STAR WARS: THE MAGIC OF MYTH. Bantam Books. 1997
UMBERTO ECO. LECTOR IN FABULA: LA COOPERACIÓN INTERPRETATIVA EN EL TEXTO NARRATIVO. Editorial Lumen.